El Vaticano para muchos es el corazón de la fe y la esperanza un lugar de luz donde las almas buscan consuelo y salvación pero debajo de esas grandiosas cúpulas y entre los pasillos llenos de historia existen rincones que la iglesia no desea Mostrar al mundo rincones donde la luz no llega donde la fe se enfrenta a sus peores pesadillas y donde los secretos más oscuros permanecen ocultos Adrián Santoro un médico racional y pragmático jamás pensó que su viaje a ese lugar sagrado lo llevaría al borde de la locura no creía en lo sobrenatural ni en
El poder del mal Más allá de lo que su bisturí podía cortar y sus medicamentos podían curar sin embargo lo que encontró debajo de esas tierras sagradas en los túneles profundos y oscuros no podía explicarse con cencia ni siquiera con las escrituras más antiguas allí la fe y la razón chocaron Desatando una tormenta de horror que lo cambiaría para siempre Este es el relato de su descenso al Abismo un abismo que no solo pone a prueba su mente y su cuerpo sino también su alma recuerda suscribirte para traer más historia El silencio en mi departamento
era casi palpable roto solo por el suave Tic Tac del reloj en la pared acababa de terminar de revisar los resultados de un estudio sobre tratamientos experimentales para trastornos neurológicos había estado absorto durante horas analizando datos y cotejando informes sumido en mi rutina habitual Pero últimamente algo me faltaba era como si estuviera Atrapado en un ciclo interminable de información y cifras que aunque esenciales ya no despertaban en mí la pasión que solían recostado en mi silla de oficina mi mirada se desvió hacia una foto enmarcada que descansaba sobre mi escritorio una instantánea de otra época
cuando mi vida era más impredecible y cada día estaba cargado de emoción Éramos un grupo de jóvenes médicos en nuestra primera conferencia internacional todos llenos de ambición al centro de la imagen David sonreía con ese entusiasmo que siempre lo caracterizó pero con el tiempo nos separamos como Suele suceder Fue entonces cuando mi teléfono vibró sobre la mesa arrancándome de mis pensamientos vi el número desconocido en la pantalla y por un instante consideré no responder quién podría ser a esta hora sin embargo algo me empujó a tomar la llamada sí dije sin mucho interés el Silencio
Al otro lado me hizo pensar que era un error o alguna de esas llamadas automatizadas hasta que escuché una respiración suave casi vacilante luego la voz Adrián cuánto tiempo sentí que mi corazón daba un vuelco esa voz imposible mi mente trataba de asimilarlo mientras me enderezada en la silla como si necesitara estar más firme para enfrentarlo que venía David eres tú mi voz sonó incrédula casi ahogada No puedo creerlo han pasado cco o 6 años más de lo que parece su tono tenía esa mezcla de seriedad y misterio que siempre lo hacía sonar como si
supiera algo que los demás no sabían pero no te llamo solo para hablar del pasado tengo algo importante que discutir contigo algo que podría cambiarlo todo al principio pensé que era una broma O tal vez una llamada hecha por nostalgia Pero había una urgencia en su voz algo que podría cambiarlo todo la última vez que lo vi estaba planeando un viaje a África para participar en una misión humanitaria luego desapareció ni un mensaje ni un correo Nada de qué hablas pregunté incapaz de Ocultar mi confusión la última vez que supe de ti estabas en alguna
parte del Congo no después simplemente desapareciste todos pensábamos que eso ya no importa Adrián me interrumpió con la misma firmeza de siempre Necesito verte en persona es un asunto delicado y no puedo hablar de ello por teléfono pero es una oportunidad única algo que no se presenta dos veces en la vida me quedé en silencio intentando procesar sus palabras oportunidad de qué estaba hablando lo último que esperaba en esta etapa de mi vida era una oportunidad y menos aún viniendo de él alguien cuya vida se había convertido en un Enigma dónde estás pregunté al fin
sintiendo la necesidad de despejar el aire de tanto misterio qué necesitas de mí Estoy en Roma su voz se suavizo como si anticipara mi reacción Necesito que vengas al Vaticano tuve que parpadear varias veces para asegurarme de haber escuchado bien El Vaticano repetí como si la sola palabra no tuviera sentido en mi mundo de bisturíes Y microscopios qué demonios haces allí y qué podría interesarme a mí en un lugar así Había algo surrealista en esa conversación yo un médico cuya vida siempre giró en torno a lo tangible y comprobable y él hablando de la sede
de la Iglesia Católica de todas las cosas pero David parecía estar esperándolo sentí que son reía al otro lado de la línea Incluso si yo no podía verlo Eso es lo que quiero que descubras su voz bajó casi susurrando Hay algo aquí que no puedes entender Desde la distancia no voy a presionarte pero si decides venir tendré un trabajo esperándote uno que solo tú puedes hacer me frot el puente de la nariz una costumbre que adoptaba cada vez que las cosas escapaban de mi control trabajo en el Vaticano mi mente se arremolinaba con preguntas pero
la más grande de todas era por qué Yo después de tantos años sin contacto qué podía querer David de alguien como yo no puedo simplemente dejarlo todo y viajar a Roma David respondí con un tono más áspero de lo que pretendía tengo pacientes investigaciones y realmente estás satisfecho Adrián su pregunta fue directa y cortante me quedé mudo él sabía cómo golpear donde más dolía lo que tengo aquí podría ser la respuesta que llevas años buscando Incluso si no te has dado cuenta de lo que buscas Piénsalo no tienes que decidir ahora el click al final
de la llamada resonó con una fuerza inusual en la habitación silenciosa miré el teléfono como si pudiera darme respuestas pero solo me devolvió el reflejo de mi rostro perplejo afuera la lluvia comenzó a golpear las ventanas dejé el móvil sobre el escritorio y me levanté caminando de un lado a otro en la penumbra mis pensamientos se arremolinaban qué hacía David en el Vaticano qué podía ofrecerme un lugar como ese que no estuviera relacionado con la fe o la espiritualidad dos conceptos que nunca tuvieron cabida en mi vida finalmente mis ojos volvieron a posarse en la
foto enmarcada recordé aquellos días la emoción la sensación de estar a punto de descubrir algo grande de cambiar el mundo algo que no sentía Desde hacía mucho tiempo tal vez murmuréis indeciso Tal vez es justo lo que necesito las palabras flotaron en el aire perdidas en el eco de la tormenta que se desataba afuera y en ese momento supe que la decisión ya estaba tomada llegar a la ciudad del Vaticano es como entrar a un mundo completamente distinto al atravesar las enormes puertas de hierro que separan la plaza de San Pedro de las calles de
Roma una sensación de solemnidad me envuelve nunca pensé que estaría aquí rodeado de una historia tan antigua y llena de misterio he caminado entre rascacielos y he visitado algunos de los centros médicos más avanzados del mundo pero el Vaticano El Vaticano tiene un peso distinto un peso que no se puede medir ni analizar con pruebas científicas alrededor de mí decenas de turistas se arremolinan mirando la inmensa basílica con admiración pero yo no soy uno de ellos Mi destino está más allá de lo que ellos pueden ver un guardia suizo imponente con su uniforme tradicional de
colores rojo azul y amarillo me observa y hace una pequeña inclinación de cabeza al reconocerme me acerco lentamente aún sintiendo la incredulidad de estar aquí doctor Santoro bienvenido me dice en un inglés con acento italiano como si fuera completamente natural que un hombre de ciencia se presentara en este lugar me hace un gesto para que lo siga lo hago sin decir palabra todavía procesando todo esto caminamos por un estrecho sendero que bordea la plaza dejando atrás la multitud y adentrándonos en un lugar mucho más privado a medida que avanzamos la arquitectura imponente y los jardines
perfectamente cuidados me rodean pasamos junto a estatuas de mármol que parecen observarnos Con Ojos silenciosos aquí cada Rincón parece guardar un secreto cada pasillo susurrar un misterio El guardia Me guía a través de varias puertas cada una más pesada y ornamentada que la anterior hasta que llegamos a una zona donde los turistas jamás pondrían un pie de pronto la idad de la Basílica de San Pedro se disuelve en un laberinto de Pasillos oscuros Y estrechos las paredes están adornadas con pinturas religiosas cada una representando escenas de ángeles y demonios en un conflicto eterno siento como
un escalofrío recorre mi espalda pero no es miedo Es algo más un presentimiento por aquí me indica el Guardia suizo al llegar a una puerta de madera maciza decorada con símbolos que no logro reconocer al entrar me recibe Una atmósfera solemne la sala está apenas iluminada por la luz de unas pocas lámparas de aceite que parpadean como Si estuvieran luchando contra una oscuridad mayor al fondo varios hombres vestidos con sotanas negras me observan en silencio no son simples sacerdotes eso Lo noto al instante el aire alrededor de ellos parece cargado de una energía difícil de
describir como si no pertenecieran del todo a este mundo entre ellos destaca un hombre de cabello canoso y expresión severa con un crucifijo de plata colgando del cuello me doy cuenta de que todos llevan cruces similares Aunque de distintos tamaños y estilos como si fueran insignias de un Rango que desconozco doctor Santoro soy el padre Renato dice el hombre al frente dando un paso hacia mí su voz es grave con un acento italiano muy marcado y sus ojos parecen escrut arme hasta el alma nos complace que haya aceptado nuestra oferta asiento lentamente sin estar seguro
de cómo reaccionar todavía no sé por qué estoy aquí parte de mí quiere reírse de lo absurdo de la situación un médico en el corazón del Vaticano rodeado de sacerdotes pero hay algo en su mirada algo en la seriedad con la que me Observa que me hace callar padre Renato respondo con un tono controlado agradezco la oportunidad pero debo confesar que sigo sin entender del todo Cuál es mi papel aquí Renato intercambia una mirada con los otros sacerdotes como si mi escepticismo fuera algo esperado luego con un gesto pausado me invita a acercarme a una
mesa de madera situada en el centro de la sala sobre ella hay un grueso dossier con mi nombre escrito en la portada me estremezco al ver la carpeta Cómo pueden tener información sobre mí cuánto saben realmente su tarea doctor comienza a explicar el padre Renato abriendo el dossier y mostrándome fotografías de personas en condiciones deplorables es simple en apariencia pero extremadamente delicada debe cuidar de ciertas personas que están bajo nuestra custodia mis ojos se fijan en las imágenes veo rostros de macr cuerpos atados a camas ojos que reflejan un sufrimiento que nunca he visto en
mi carrera intento suprimir el instinto de retroceder están enfermos pregunto aún aferrándome a la lógica Qué clase de enfermedad es esta no es una enfermedad que haya estudiado en los libros de Medicina doctor Santoro responde con suavidad como si hablara con un niño estas personas están poseídas por entidades nuestro equipo de exorcistas trabaja incansablemente para liberarlas pero el proceso puede ser largo y peligroso su misión es mantenerlos con vida hasta que encontremos una solución definitiva me quedo en silencio posesión esa palabra retumba en mi mente Como una burla no puedo evitar el impulso de reír
Esto es lo que vine a hacer cuidar a personas poseídas miro a los sacerdotes con incredulidad con todo respeto digo tratando de mantener la calma me está pidiendo que cuide a gente que creen que está poseída por demonios Renato no parpadea su mirada permanece fija en mí Serena pero cargada de algo que no logro identificar no doctor responde con un tono firme no lo creemos lo sabemos y pronto usted también lo sabrá el el ambiente en la sala se vuelve opresivo noto que los otros sacerdotes observan mi reacción con la misma intensidad siento un nudo
en el estómago pero no es miedo es la certeza de que Estoy frente a algo que no puedo explicar con las herramientas que he acumulado a lo largo de los años algo que desafía todo lo que siempre he creído aquí tiene su contrato continúa el padre Renato señalando un documento que acaba de colocar FR a mí Léalo con cuidado si decide aceptar será parte de algo más grande de lo que jamás imaginó mis manos tiemblan levemente mientras tomo el bolígrafo firmo el contrato aún sin entender del todo lo que estoy haciendo Tal vez es curiosidad
Tal vez es la necesidad de saber si todo esto es real o solo una puesta en escena O tal vez Simplemente no tengo nada que perder levantar la vista veo un atisbo de satisfacción en el rostro de Renato bienvenido doctor Santoro dice con una leve inclinación de cabeza Bienvenido al Vaticano no hay manera de preparar la mente para lo que estoy a punto de enfrentar mientras el padre Renato Me guía a través de la serie de pasadizos subterráneos siento el peso de cada paso resonar en las paredes de piedra Los guardias suizos nos flanquean en
silencio sus rostros pétreos como Si estuvieran acostumbrados a caminar por estos túneles todos los días pero no soy un guardia ni un sacerdote y la atmósfera del lugar empieza a asfixiarme los muros cubiertos de musgo y humedad apenas reflejan la tenue luz de las antorchas que cuelgan a intervalos regulares a medida que avanzamos el aire se vuelve más pesado cargado de un frío antinatural que se filtra hasta los huesos Qué es este lugar Me resisto a preguntar pero la pregunta late en mi mente como un tambor frenético estoy fuera de mi elemento eso es obvio
aquí la ciencia no tiene lugar cada fibra de mi ser quiere volver a la superficie a la claridad y la lógica del mundo de arriba este lugar murmuro al fin rompiendo el silencio Cuántos niveles tiene el padre Renato se vuelve ligeramente la llama de la antorcha proyectando sombras inquietantes en su rostro hay una expresión inescrutable en sus ojos los túneles se extienden por debajo de la ciudad del Vaticano como un laberinto dror Santoro algunos dicen que fueron construidos hace siglos otros que fueron ampliados para ocultar ciertos secretos no todos los caminos conducen a la luz
su respuesta vaga no hace más que aumentar mi mi incomodidad qué secreto se esconde este lugar camino más cerca de él sintiendo que cada paso nos lleva más profundo no solo en la tierra sino en una oscuridad que amenaza con devorarme el ruido de nuestros pasos y el chasquido de las antorchas parecen eco de Voces antiguas que susurran en algún lugar fuera de mi campo visual a medida que nos adentramos más las paredes de piedra veo inscripciones en latín talladas en los muros frases que no alcanzo a leer del todo en la penumbra Pero algunas
palabras se destacan daemonium exorcismus infernum el tono ritualista de las frases me heriza la piel me obligo a mantener la calma esto no tiene sentido son solo palabras no finalmente después de lo que parece una eternidad llegamos a una sala un espacio abierto que se revela ante nosotros como un anfiteatro subterráneo la luz de las antorchas parpadea en las esquinas proyectando sombras alargadas sobre las paredes de piedra alrededor de la sala dispuestas en un semicírculo hay varias celdas de hierro con gruesos barrotes cada una separada por unos metros siento un escalofrío no parecen jaulas humanas
parecen más bien jaulas para contener bestias Bienvenido a las catacumbas internas del Vaticano dice el padre Renato su voz resonando en el espacio vacío aquí es donde mantenemos a los más peligrosos antes de que pueda preguntar A qué se refiere noto un movimiento en una de las celdas una figura humana se estira entre las sombras sus dedos huesudos agarrándose a los barrotes mi corazón late con fuerza cuando el rostro demacrado emerge a la escasa luz los ojos de la figura están rojos no por el color del Iris sino como si todo el globo ocular se
hubiera teñido de sangre una ira casi palpable emana de él una rabia que parece superar las capacidades de cualquier ser humano normal Quién es él pregunto en voz baja Aunque algo en mi interior me advierte que no quiero saber la respuesta el padre Renato me mira de reojo y su expresión se endurece ese doctor es el prisionero 12 está poseído por una entidad que no hemos logrado identificar por completo ha estado aquí durante más de una década nuestra tarea ha sido mantenerlo con vida y contenerlo doy Un paso atrás sintiendo la mirada del prisionero perforarme
sus pupilas se fijan en mí con una intensidad que me deja helado los labios secos se abren lentamente y un gruñido bajo gutural se escapa de su garganta ustedes no entienden gruñe y su voz suena como una mezcla de varias él los está usando todos ustedes pecadores El grito resuena en el espacio y por un momento Parece que la sala entera se estremece los guardias suizos se ponen en guardia sus manos yendo instintivamente a las empuñaduras de sus armas el prisionero se arroja contra los barrotes pero en lugar de retroceder como cualquier otro se queda
allí aplastando su rostro contra el Metal su aliento gélido y su mirada fija en mí no en los guardias no en el sacerdote en mí tú grita de repente y me congelo crees que puedes detenerme hombre de ciencia tú no sabes nada nada la risa que sale de su boca no es humana es un sonido que me revuelve el estómago y me hace dar un paso a involuntariamente miro al padre Renato Esperando algún tipo de reacción Pero él simplemente asiente como si esto fuera algo que hubiera visto cientos de veces antes su rabia es el
primer signo doctor dice con calma No se deje engañar por las apariencias no es él quien le habla ahora la entidad en su interior lo consume se alimenta de su desesperación debe ser monitoreado constantemente y sobre todo debe seguir vivo si muere mientras el demonio aún reside en él no podemos prever Qué pasará mis ojos no pueden apartarse del prisionero 12 un hombre Atrapado dentro de su propio cuerpo condenado a un tormento sin fin todo mi ser me dice que esto es una locura Que lo que estoy viendo no puede ser real pero aquí estoy
en el corazón del Vaticano en una mazmorra que parece sacada de una novela de terror y el miedo que siento es demasiado tangible para ignorarlo y y Qué se supone que debo hacer logro decir mi voz apenas un susurro mantenerlo vivo doctor Santoro responde el padre Renato con firmeza usted es un médico su deber es proteger la vida Incluso en las peores circunstancias si él muere la oscuridad que lo habita podría a otros podría liberarse no tenemos todas las respuestas Pero sabemos esto Usted es la última línea de defensa la última línea de defensa la
idea me golpea como un puñetazo en el estómago estoy Atrapado en este juego de fuerzas que no comprendo rodeado de entidades que no debería existir y sin embargo el padre Renato me mira con la expectativa de que yo un hombre de ciencia logre hacer lo imposible entendido respondo aunque no lo entiendo del todo pero ya firmé el contrato estoy aquí y por primera vez en mucho tiempo Siento que estoy a punto de enfrentarme a algo que está más allá de mi comprensión algo que podría romperme entonces dice el padre Renato con voz grave girándose para
guiarme de vuelta hacia la salida vamos a empezar mientras me alejo de las celdas la risa del prisionero 12 reverbera en la oscuridad detrás de mí un recordatorio de que a partir de ahora todo ha cambiado la pesada Puerta de Hierro se cierra tras de mí con un estruendo que parece resonar en todo el subterráneo el sonido se prolonga como el eco de una sentencia inminente me encuentro una vez más en las catacumbas Pero esta vez estoy solo frente a la celda del prisionero 12 los guardias suizos permanecen a una distancia prudente observándome con la
frialdad de quienes han presenciado demasiadas cosas aterradoras para reaccionar con sorpresa pero para mí cada fibra de mi ser está en alerta el prisionero 12 se yergue al otro lado de los barrotes la tenue luz de la antorcha ilumina su rostro demacrado sus pómulos sobresaliendo como cuchillas afiladas bajo la piel marchita los ojos rojos enmarcados por profundos surcos oscuros me perforan con una intensidad que casi me obliga a mirar hacia otro lado pero no puedo no debo si he aprendido algo en mis años como médico esa nunca Mostrar debilidad frente a un paciente inestable Así
que doctor Santoro dice con una voz que es un susurro y un rugido a la vez has venido a verme de nuevo Qué honor el tono burlón La sonrisa torcida todo en él parece diseñado para provocarme me acerco despacio con una bandeja de suministros médicos que se siente absurdamente inadecuada en este entorno gasa desinfectante analgésicos básicos cosas que se usan para curar heridas físicas Pero cómo se supone que esto ayudará a un hombre poseído intento no pensar en ello mientras examino la delgada línea de sangre que corre por uno de sus antebrazos la piel está
rasgada y la herida se extiende en un patrón extraño como si hubiera sido provocada con premeditación vine a tratar tus heridas digo con una calma que apenas logro mantener parece que te has lastimado el prisionero 12 suelta una carcajada que reverbera en la celda seca y quebrada la risa suena como si hubiera olvidado cómo hacerlo de forma humana lastimado replica con zorna crees que estoy herido doctor Oh no Esto no es nada Comparado con lo que otros han hecho pero tú Adrián no estás aquí para curarme verdad Tú estás aquí porque no puedes curarte a
ti mismo me quedo helado A qué se refiere miró sus heridas y continuó limpiándolas Pero mis manos tiemblan levemente qué está intentando hacer la forma en que pronuncia mi nombre me hace pensar que sabe más de lo que debería me concentro en su brazo aplicando el desinfectante evitando el contacto visual te has olvidado de ella Adrián prosigue en un susurro envenenado te has olvidado de Elena el sonido de ese nombre me golpea como una bala mis manos se congelan y por un instante no puedo moverme Elena no escuchado ese nombre en años de repente el
túnel frío y oscuro parece cerrarse a mi alrededor trato de reaccionar de convencerme de que es una trampa un truco Pero él se inclina hacia delante sus dedos largos y delgados agarran los barrotes con una fuerza que hace rechinar el Metal Elena murmura alargando cada sílaba como si saborear el dolor que me causa la conociste en la universidad no es así esa noche de invierno la primera vez que la viste Recuerdas lo que sentiste cómo te temblaron las manos cuando intentaste hablarle o cómo deseabas poder cambiar todo cuando la perdiste mis rodillas flaquean Cómo sabe
todo esto nadie en el Vaticano conoce esa parte de mi vida y sin embargo cada palabra que sale de su boca es un dardo envenenado dirigido a mi corazón Cállate s seo sorprendido de escuchar mi propia voz el prisionero 12 sonríe con una satisfacción oscura su rostro se deforma con una mueca que no es de este mundo los ojos rojos brillan con un fuego extraño y en ese momento sé que no es el hombre quien me habla la entidad dentro de él me está observando me conoce por qué doctor se burla no quieres que hablemos
de Elena de de cómo la dejaste ir de cómo la abandonaste en su momento de mayor necesidad Recuerdas la última vez que la viste cómo ella he dicho que te calles mi grito rebota en las paredes de piedra reverberando como un cañonazo en la oscuridad el silencio que sigue es denso mis manos están cerradas en puños tan apretados que los nudillos se ponen blancos intento recuperar el control soy un profesional no puedo dejar que un hombre delirante me saque de mis casillas pero el nombre de Elena el recuerdo de sus ojos brillantes de sus manos
cálidas sobre las mías lo último que quería recordar está ahora aquí en este lugar de Pesadilla traído a la superficie por un ser que no debería saber nada de ella el prisionero 12 observa cada uno de mis gestos con una calma Espeluznante lo veo en tu rostro murmura con una suavidad perturbadora ella sigue contigo verdad sigues escuchando su voz por las noches sigues preguntándote qué habría pasado si hubieras sido más fuerte si no hubieras huido como un cobarde las palabras son cuchillos que se hunden en heridas antiguas y me obligo a respirar profundamente Debo mantener
la compostura no puedo dejar que este ser me manipule no sé de qué hablas digo con una voz más tranquila de la que siento mi trabajo aquí es asegurarme de que no te hagas más daño él inclina la cabeza como un Depredador examinando a su presa Oh pero sí sabes sabes muy bien de qué hablo la recuerdas a ella y ahora te preguntas ella me habría perdonado me habría dejado entrar en su vida otra vez el dolor que esas preguntas evocan es casi físico me tambaleo pero no dejo que lo vea sigo limpiando la herida
mis movimientos ahora más torpes menos precisos Él sonríe y por un momento me pregunto si el dolor que siente en su propio cuerpo le causa algún tipo de placer la única herida aquí eres tú doctor Santoro susurra con voz gutural y estás infectado Solo que no lo sabes aún dejo caer la gasa ensangrentada al suelo mi respiración agitada no puedo seguir aquí necesito alejarme necesito pensar pero no puedo darle la satisfacción de verme huir voy a asegurarme de que te mantengas con vida digo con los dientes apretados levantándome de golpe no importa lo que digas
no importa lo que creas saber el prisionero 12 no dice nada por un largo momento luego sus labios se curvan en una sonrisa que no es humana una sonrisa que me seguirá en mis sueños veremos doctor veremos Quién es el que realmente sobrevive doy media vuelta y salgo de la celda sintiendo Como cada fibra de mi ser tiembla Pero no por miedo a él no por lo que representa sino por las verdades que acaba de destapar dentro de mí veremos Quién es el que realmente sobrevive pensé pero en el fondo de mi mente una pequeña
voz tan familiar y a la vez tan aterr susurra una última advertencia Y si tiene razón quién soy yo para detenerlo las semanas se convierten en un borrón de oscuridad y rutina opresiva cada mañana me despierto en mi austero dormitorio dentro de los muros del Vaticano sabiendo que el día estará lleno de horrores que desafían la lógica y la ciencia el sol apenas logra penetrar las gruesas cortinas de mi habitación y me encuentro resistiendo la tentación de quedarme en la seguridad del espacio estrecho y monacal pero debo cumplir con mi deber el descenso a los
túneles se ha convertido en una especie de Rito macabro me ajusto la bata médica como una armadura Aunque sé que no tiene el poder de protegerme de lo que me espera abajo con cada paso hacia las profundidades el aire se vuelve más denso impregnado de un edor a humedad y a algo más algo que no puedo i ificar pero que siempre me produce un leve mareo los guardias suizos me acompañan en silencio sus ojos siempre atentos y sus armas listas Ellos están acostumbrados a la locura de estos túneles pero yo yo sigo sin poder entender
cada día es una nueva prueba de mi fortaleza mental los prisioneros o más bien las entidades dentro de ellos no se comportan como enfermos normales algunos gritan mi nombre en idiomas Que no conozco otros se quedan Mirando al techo con los ojos en blanco y otros como el prisionero 12 solo se ríen con una mueca escalofriante que parece traspasarme me maldicen me desafían intentan provocarme pero es peor cuando algunos ruegan por ayuda con voces desgarradas sus miradas llenas de una humanidad que parece luchando por emerger entre Las garras de la oscuridad las heridas que presentan
me funden cada vez más cortes que se cierran demasiado rápido o marcas que parecen símbolos antiguos tallados en carne viva los cuerpos de los prisioneros se retuercen de formas imposibles y sus ojos siempre sus ojos me miran con una Furia un odio que va más allá del sufrimiento humano están atrapados pero algo dentro de ellos también disfruta la lucha como si quisieran arrastrarme con ellos a su Abismo Luca uno de los guardias que ha trabajado aquí por años es el único que se digna a explicarme lo que pasa no son humanos doctor me dice en
una ocasión mientras observamos a uno de los prisioneros más agresivos estrellarse contra los barrotes con una fuerza que debería haberle roto los huesos al menos no en su totalidad algunos de ellos eran personas normales hasta que fueron invadidos pero las cosas que que los poseen esos demonios No pertenecen a este mundo y nuestra misión es asegurarnos de que se queden aquí abajo donde no puedan desatar su caos en la superficie mis pensamientos vuelven a ese día a menudo Cómo se supone que debo hacer frente a algo que no pertenece a este plano estoy entrenado para
tratar cuerpos y Mentes no para lidiar con entidades que escapan a la comprensión humana sin embargo cada día sigo bajando enfrentándome a la misma rutina de terror y cada noche regreso a mi habitación el cuerpo tenso y la mente exhausta preguntándome cuánto tiempo más podré resistir la noche del escape comenzó como cualquier otra había terminado mi ronda diaria y estaba revisando mis notas en la pequeña sala de observación situada en uno de los niveles Superiores de los túneles me sumergí en mis apuntes intentando encontrar algún patrón que explicara las anomalías físicas de los prisioneros Pero
entonces un ruido sordo un temblor casi imperceptible hizo que mi pluma se detuviera en el aire el suelo vibró ligeramente bajo mis pies No le di importancia al principio pensando que era algún viejo generador del lugar pero los gritos comenzaron a llegar en oleadas reverberando en los estrechos corredores luego un estruendo ensordecedor resonó a la distancia y el sonido metálico de barrotes siendo destrozados se mezcló con los gritos de los guardias no atrás no dejen que salga el pánico brotó en mi pecho mientras la certeza de lo que estaba ocurriendo se materializaba prisionero 12 él
había logrado romper su confinamiento los guardias suizos corrían en todas direcciones sus botas resonando como truenos en el túnel de piedra me quedé congelado en la pequeña habitación el corazón martillando en mi pecho debía hacer algo pero qué enfrentar a un ser como él eso era un suicidio salí lentamente de mi sala mirando hacia el corredor principal Desde allí pude ver la masacre prisionero 12 se movía entre los guardias como un animal salvaje sus músculos se contorsion aban de formas imposibles con una facilidad aterradora agarró a uno de los guardias del cuello y antes de
que pudiera gritar su cabeza fue arrancada del cuerpo con un chasquido que me hizo querer vomitar la sangre salpicó las paredes como si fuera un líquido espeso y oscuro y el cuerpo decapitado cayó pesadamente al suelo deténgase Y en cuestión de segundos los gritos de terror Fueron reemplazados por el sonido de carne rasgada y huesos triturados intenté retroceder esconderme en las sombras pero sus ojos se clavaron en mí brillaban como brazas encendidas en la oscuridad y por un segundo pensé que todo acabaría ahí pero en lugar de dirigirse hacia mí prisionero 12 se volvió hacia
un grupo de sacerdotes que acababan de llegar sus manos le levantadas en gesto de Súplica por el poder de Dios exclamó uno de los sacerdotes mientras blandía un crucifijo va de retro satana el prisionero se detuvo por un momento sus ojos Ardiendo con una Furia desmedida pero luego soltó una carcajada que resonó en cada Rincón del túnel con un movimiento brutal arrojó un cuerpo ensangrentado contra el sacerdote derribo al suelo los otros sacerdotes salpicaron agua bendita recitando oraciones a toda prisa pero él no se detuvo cada palabra Santa parecía enfurecer aún más fue Entonces cuando
apareció el padre gaetano con su cruz de plata en alto el anciano sacerdote se abrió paso entre los cuerpos caídos su mirada fija y llena de una calma feroz comenzó a recitar una oración en latín su voz retumbando en el túnel como un trueno in nominé patri et espíritus Santi entonó avanzando lentamente hacia el prisionero prisionero 12 se quedó inmóvil como Atrapado en un trance su cuerpo temblando violentamente el odio en sus ojos parecía consumirse en llamas negras y por primera vez vi algo en él que no había visto antes miedo omnis espíritus malignus omnis
incursio infernalis Sari continuó el padre gaetano sus palabras fluyendo como un torrente el prisionero gritó un aullido inhumano que sacudió los cimientos mismos del túnel pero el sacerdote no se detuvo cada palabra parecía atarlo debilitándose 12 se giró hacia mí sus ojos rojos Ardiendo con una última chispa de odio no he terminado rugió Volveré por ti y luego se desplomó su cuerpo cayendo pesadamente al suelo de piedra sus ojos apagándose lentamente pero su maldición quedó resonando en el aire padre gaetano cayó de rodillas agotado Pero susurrando entre dientes que Dios nos proteja porque esto esto
Solo ha comenzado y yo en la penumbra supe que su advertencia no era una simple frase Había algo en la forma en que el prisionero 12 había caído algo en su risa final algo que me decía que esta no sería la última vez que me enfrentaría a la oscuridad la puerta de mi apartamento se cierra con un sonido seco como un martillo que Sella mi propia tumba me quedo de pie un momento en la penumbra con la mano aún sobre el pomo respirando lentamente mientras la tensión abandona mis hombros de a poco el lugar está
en completo silencio como si el mundo entero se hubiera detenido para dejarme solo con mis pensamientos la frialdad de las paredes las sombras que se acumulan en los rincones todo parece más oscuro de lo que recordaba camino hacia la pequeña mesa en la esquina dejando la maleta sobre el suelo y me desplomo en la única silla de la estancia el cuerpo me duele no físicamente pero cada músculo pare arrastrar un peso invisible intento recordar la última vez que dormí bien dos días tres desde que comenzó todo esto las noches han sido un cúmulo de pesadillas
y desvelos la imagen del prisionero 12 destrozando cuerpos con una fuerza inhumana y la mirada llena de odio del padre gaetano mientras recitaba aquellas oraciones en latín esas escenas me siguen como sombras vivientes con un suspiro paso las manos por mi rostro tratando de sacudirme la sensación de opresión me levanto lentamente y voy hasta el pequeño botiquín que tengo en la cocina encuentro una botella de Whisky que me habían regalado mis colegas antes de dejar el hospital cuánto tiempo ha pasado desde entonces dos meses quizás tres la botella está aún sin abrir pero hoy Parece
un buen momento para romper esa regla sirvo un generoso trago en un vaso bajo y lo observo durante un segundo viendo como el líquido dorado brilla a la luz tenue de la lámpara luego lo trago de un solo golpe el calor me abraza la garganta pero no logra borrar la frialdad que ha echado raíces en mi interior me dejo caer en el viejo sillón frente a la ventana y miro la ciudad allá abajo Roma siempre ha sido un lugar lleno de historia pero ahora sus calles parecen aún más ancestrales cargadas con secretos oscuros como si
todo el lugar estuviera construido sobre cimientos que jamás deberían haber sido desenterrados los recuerdos del día se arremolinan en mi mente las palabras del prisionero 12 me resuenan una y otra vez como una maldición grabada a fuego no he terminado doctor Volveré por ti esa voz gutural y burlesca sigue persiguiéndome cómo pudo saber tanto sobre mí cómo pudo ver más allá de lo que es posible intento razonar encontrar respuestas en la ciencia en la psiquiatría en cualquier cosa que pueda devolverme la sensación de control pero las imágenes del caos de los cuerpos mutilados y de
la furia desenfrenada de esa criatura rompen cualquier lógica quizás debería haber huido esa misma noche tomar el primer vuelo fuera de Roma alejarme del Vaticano y de sus túneles malditos pero no pude algo en mí una parte que nunca había reconocido se niega a Rendirse estoy Atrapado Entre dos mundos el de la razón que me ha guiado durante toda mi vida como médico y este nuevo donde lo que considero imposible toma forma ante mis propios ojos mi mirada se posa en el pequeño crucifijo que cuelga en la pared del apartamento un recuerdo de mi infancia
hace años que no me había detenido a mirarlo realmente Cuántas veces me burlé de la fe Cuántas veces desech las creencias como simples ilusiones que las personas creaban para soportar el dolor del mundo es esto real murmuro mi voz sonando extrañamente hueca en la habitación vacía no hay respuesta solo el silencio El eco de mis propias dudas trato de aferrarme a lo que sé anatomía biología psicología pero nada de eso explica lo que vi allá abajo el prisionero 12 no era un loco ni un psicópata era algo más algo que no debería existir Y si
él era real Qué significa eso para todo lo demás para las creencias que siempre consideré supersticiones tomo otro trago esta vez más lento me inclino hacia delante apoyando los codos sobre las rodillas sintiendo la presión crecer en mi pecho las preguntas se multiplican formando un nudo en mi estómago es posible que la ciencia no sea la respuesta a todo que haya un mundo entero un mundo oscuro y oculto que jamás he querido aceptar Si estos demonios existen qué más habita en las sombras qué más se esconde en los rincones más fundos de nuestra realidad recuerdo
las miradas de los prisioneros en los túneles esa Furia contenida esos ojos vacíos que parecían no solo odiar sino también entender como si todos supieran algo que yo no como si esperará a que también cayera en su desesperación necesito respuestas me escucho decir en un susurro apenas audible Pero dónde buscarlas en la iglesia en las escrituras antiguas todo eso está tan lejos de mi zona de Confort que solo pensar en ello me provoca una náusea sutil sin embargo algo en mí sabe que no puedo ignorar lo que está sucediendo no después de haber visto a
un ser humano transformado en un monstruo con mis propios ojos mientras las horas se desvanecen y El Whisky empieza a hacer efecto una sola idea se cristaliza en mi mente Si estas entidades existen si el mal es algo tangible y no solo un concepto entonces debo entenderlo necesito comprender Qué es realmente lo que estoy enfrentando porque si no lo hago si no consigo averiguar la verdad Entonces tal vez la próxima vez que descienda a esos túneles no saldré con vida me recuesto en el sofá los ojos pesados y la cabeza embotada pero el sueño sigue
eludiendo dejando espacio para que las palabras del prisionero 12 sigan resonando en mi mente reverberando en la oscuridad no he terminado y con un estremecimiento me doy cuenta de que yo tampoco he terminado si llegaste a este punto del video déjame en los comentarios Qué te pareció un me gusta una suscripción te lo agradecería por aquí te dejaré otra historia que te va a gustar