Bienvenidos a Español en tus Oídos. Una experiencia de escucha inmersiva con conversaciones reales en español. Escucha diálogos auténticos con hablantes de distintos países de Latinoamérica y España mientras haces tus actividades diarias. Este audio está diseñado para ayudarte a absorber el idioma de forma natural, solo escuchando, sin necesidad de mirar la pantalla, tomar apuntes o pausar. Puedes escucharlo mientras cocinas, trabajas, manejas, caminas o simplemente te relajas. Sin explicaciones, sin gramática, solo español real, claro y auténtico. Prepárate para una hora completa de input comprensible que alimenta tu español sin esfuerzo. Empecemos. Daniela, ¿tú qué lengua hablas en
casa? Pues depende, hablo más de una lengua. Mi madre es holandesa y nos habla siempre en holandés a mí y a mi hermano. Y mi padre es de Rumanía y nos habla en rumano. Ah, ¿y tu hermano y tú les habláis también en holandés y en rumano? Sí, normalmente sí. Hablamos en holandés con mi madre y en rumano con mi padre, pero muchas veces les hablamos en español. Ya, claro, porque habéis nacido aquí los dos, ¿no? Sí. ¿Y entre vosotros habláis en español? Sí, casi siempre. ¿Y qué lengua hablan tus padres entre ellos? ¿Holandés o
rumano? Hablan en inglés. Mi madre no habla rumano y mi padre no tiene mucho nivel de holandés. Ah, o sea, que habláis cuatro lenguas en casa. Sí. En la escuela hablas en español, ¿no? Bueno, sí, con la mayoría de mis amigos, sí. Por ejemplo, con Lucía, que es mi mejor amiga, hablo siempre en español, pero voy a una escuela internacional y hablo inglés con mi maestra y con algunos niños. Ah, oye, y ya sé que es una pregunta que seguro que te hace todo el mundo, pero ¿prefieres hablar en holandés o en rumano? No sé,
me da igual. Las hablas con más gente, aparte de con tu padre y con tu madre. Sí, en Rumanía hablo rumano con mi abuela y con mis tíos y mis primos. Y los padres de mi madre viven en Holanda y con ellos siempre hablo en holandés también. Claro. Qué suerte hablar tantas lenguas desde tan pequeña. ¿Qué tal? Hola. Mira, soy Carmen. ¿Y tú cómo te llamas? Bárbara. ¿De dónde eres, Bárbara? De Alemania. De Berlín. De Berlín. ¿Cuánto tiempo piensas estar aquí en España, Bárbara? Pienso que dos meses, pero si encuentro trabajo, me voy a quedar
más. A ver si hay suerte. ¿Y qué haces en Alemania? ¿A qué te dedicas? Soy secretaria. Mm, secretaria. Vale. ¿Hablas otras lenguas? Sí, un poco de italiano, inglés, bastante bien. Y también un poco de francés. Muy bien. Hablas muchísimas lenguas. ¿Y por qué estudias español, Bárbara? Porque tengo que hacer un examen este año, pero también porque quiero vivir en España o en algún país de Latinoamérica como Argentina o Chile. ¿Te gusta viajar? ¿Y desde cuándo estudias español? Mm, pues desde hace años. ¿Y qué cosas te gusta hacer en clase? No sé. Me gusta leer textos
y hacer ejercicios en grupo con mis compañeros. No me gusta mucho escribir. Ah, no te gusta escribir. ¿Qué dificultades crees que tienes con el español? ¿Qué cosas te cuestan más? ¡Uf! Muchas, supongo. Qué va, mujer hablas muy bien. No sé. Por ejemplo, me cuesta mucho diferenciar entre ser y estar y a veces me cuesta pronunciar la r. Bueno, es cuestión de práctica. ¿Y qué te gusta hacer en tu tiempo libre? Me gusta mucho la música. También me encanta ir a la playa y salir con los amigos. Muy bien, Bárbara, ya hemos acabado. Muchas gracias. Hola,
¿qué tal? Hola, yo soy Elena. ¿Y tú cómo te llamas? Greta. ¿De dónde eres, Greta? De Alemania. De Munich. De Munich. ¿Cuánto tiempo piensas estar aquí en España, Greta? Un mes. Muy bien. ¿Y qué haces en Alemania? ¿A qué te dedicas? Soy estudiante de medicina. Estudiante de medicina. Muy bien. ¿Y hablas otras lenguas? Sí, un poco de polaco e inglés. Bastante bien. Ajá. ¿Y por qué estudias español, Greta? Porque tengo muchos amigos españoles y latinoamericanos y mi novio es colombiano y además quiero viajar por Latinoamérica. Me gustaría ir a Perú, a Colombia, a Chile. Ah,
pues tienes que ir a Cuba. Mi país es muy bonito. Sí, me encantaría también ir a Cuba. Ah, ¿y desde cuándo estudias español? Hm, pues desde hace 5 años. ¿Y qué cosas te gusta hacer en clases? No sé, me gusta hacer juegos y hacer ejercicios en grupo con mis compañeros. No me gusta hacer actividades de gramática. Ah, ya es complicada la gramática. Sí. ¿Qué dificultades crees que tienes con el español? ¿Qué cosas te cuestan más? ¡Uf! No sé, por ejemplo, me cuesta mucho saber cuándo tengo que decir por y cuándo para y pronunciar la R.
Y me cuesta entenderlo todo cuando hablan muy rápido y también hablar con fluidez. Pienso mucho en lo que quiero decir y hablo lentamente. Bueno, eso es normal, hay que practicar. ¿Qué te gusta hacer en tu tiempo libre? Me gusta mucho leer y escribir, ver películas y series, salir con amigos, no sé, viajar también. Muy bien, Greta, ya hemos acabado. Muchas gracias. Julio, ¿tú estudias inglés? No, pues sí, porque tengo que hablarlo con clientes en mi trabajo. ¿Y por qué lo dices así? ¿No te gusta? Es que me cuesta pronunciar algunas palabras y cuando tengo que
hablar inglés me pongo nervioso y como que tengo acento y no me entienden. Bueno, hombre, eso es normal. Noemí, ¿qué tal las clases de alemán? Muy bien. Me gusta mucho ese idioma. Sí, sí. Me encanta como suena, me gusta la cultura. ¿Y no te parece difícil? Pues sí, hay muchas palabras diferentes del español y me cuesta mucho retener el vocabulario nuevo. Ya no soy tan joven. Ya. A mí me cuesta mucho aprender lenguas ahora. Sí. Y luego están las formas de los verbos en pasado, los verbos irregulares. Ah, y las declinaciones. La gramática me cuesta.
Además, yo cuando no domino la gramática de un idioma, me bloqueo. No me siento segura. Oye, Ana, tú hablas muchas lenguas, ¿no? Sí, bueno, unas cuantas. Aparte de español, hablo polaco, inglés e italiano. Ah, polaco nunca te he oído hablar polaco ya, porque solo lo hablo en casa con mis padres y con mis hermanos, porque mis padres son de Polonia y esa es la lengua que hablamos en casa. Ajá. Además, también lo hablo cuando voy a Polonia en vacaciones con mis amigos y con mis abuelos que viven allí. Ah, o sea que es un poco
tu lengua materna. Sí, sí, es mi lengua materna. ¿Y inglés hablas bien? Bueno, el inglés lo estudio en la universidad porque estudio filología inglesa y lo hablo con muchos amigos del extranjero que nos comunicamos en inglés. Y si estudias filología inglesa, seguro que lees un montón, ¿no? En en inglés. Sí, un montón. Y además me encanta la literatura inglesa y americana. Y bueno, además veo muchas series en inglés, escucho música en inglés, así que con el inglés estoy en contacto continuamente. E italiano también. Sí, pues el italiano lo hablo un poco porque mis padres tienen
un apartamento en la costa cerca de Genénova y vamos cada año en verano. Caray, qué suerte. Y seguro que te sabes todos los nombres de los platos increíbles que hay de pasta, ¿no? Sí, todos. Hm, qué bien. Y bueno, y seguro que lo hablas perfecto, entonces, ¿no? Si vas cada año. Bueno, me defiendo. La verdad es que veo bastante la televisión en italiano, así que lo entiendo bien, pero lo hablo regular y por eso voy a clases. Verónica, tú tienes una vida bastante interesante, ¿no? Bueno, sí, si se puede decir, porque has vivido en en
muchísimos sitios. Bueno, nací, viví en Argentina hasta el año 2008 y cuando finalicé mis estudios me fui a México. A México, caray. ¿Y qué hiciste en México? Al principio viajé, recorrí un poco el país, visité amigos, luego decidí quedarme y busqué un trabajo. Ah, ¿y de qué trabajaste? En un momento trabajé de camarera en un restaurante, luego me llamaron de un hotel en la playa y me fui a Puerto Vallarta, que queda en la costa del Pacífico, y trabajé de fotógrafa. Qué bonito, ¿no? Sí, muy bonito. Y luego ya te fuiste de México. Luego, en
el año 2009 viajé a Londres a estudiar inglés. Ah, ¿y cuánto tiempo te quedaste en Londres? 3 meses. Ah, y aprendiste mucho. Bueno, un poco. Y luego ya entonces es cuando te viniste a España, ¿no? Sí, en el año 2009 vine a España. Mm. Y en España supongo que has hecho muchas cosas también, ¿no? Sí, sí. Los primeros años trabajé de camarera, de canguro, de dependienta y desde hace 6 meses tengo un proyecto musical con unos amigos. Este me gusta mucho, mira. Ay, no. No me gustan nada los cojines, ¿no? Bueno, a ver, yo hablo
del salón en general, pero a mí los cojines sí que me gustan, me parecen muy alegres. Ya, son tu estilo, eso es verdad. Y el cuadro seguro que también te gusta, ¿no? Sí, es así étnico. Es Sí, es mi estilo. Pero a ver, el el salón, ¿te gusta o no? Sí, sí, me gusta. Es muy luminoso. Sí, a mí me parece muy acogedor, me encanta. Pero para mi gusto es demasiado moderno. Demasiado moderno. En serio, es que es superclásico. A mí me parece muy normal. No sé, muy moderno. Bueno, no sé, quizás es que me
parece un poco frío porque todos los muebles son muy blancos. Pues a mí eso me gusta. Me parece que le da claridad. Lo que no me gusta mucho es la estantería. Es con ese color así, parece muy vieja, pero lo demás me encanta. Sí, sí, sí. ¿No te gusta ningún mueble? A ver, sí, el sofá no está mal, pero es muy pequeño y a mí me gusta tener mucho sitio para tumbarme. Sí, eso es verdad. ¿Y el sillón? ¿El sillón te parece chulo? Mm, no está mal, pero yo prefiero un sillón de piel de esos
marrones. Es que es que eres un clásico, lo que te he dicho. Julián, me han dicho que te has comprado una casa. Sí, bueno, es un piso. Ya, sí, me imagino. Pero muy bien, ¿no? ¿Y cómo es? Pues mira, tiene 55 m²ad. Es un ático. Ajá. Qué bien. Mi piso también es un ático. ¿Y dónde está? Está en el centro de la ciudad. Es una zona muy bonita. Ajá. El mío es más grande. Tiene unos 70 met², pero no está en el centro. Está en las afueras de la ciudad. Sí, es que en el centro
los pisos son muy caros. Sí, es verdad. A ver, es un edificio antiguo, pero con ascensor. Eso está bien. Y es pequeño, pero es muy acogedor. Tiene un salón de 20 m², tiene mucha luz, una habitación y una cocina americana. Una cocina americana. Qué bien, ¿no? Sí, es muy chula. Y además tengo una terraza de 15 m². Ah, sí. Yo también tengo terraza, pero la mía es un poco más pequeña. Pero también hay mucha luz, eso es muy importante. Sí. Qué bien, ¿no? Un piso en el centro y con terraza. ¿Te vistas? Sí, tiene unas
vistas muy bonitas y es muy luminoso. ¿Y es tranquilo? No, eso no. Da a una calle peatonal y a un mercado, así que es bastante ruidoso. Ajá. El tuyo sí que es tranquilo, ¿no? Sí, claro. Está en una zona residencial. Además, mi terraza da al campo. No se oye ningún ruido. ¿Y tu lugar favorito cuál es? Bueno, es que yo no tengo un lugar favorito, tengo dos lugares favoritos en casa. Sí, sí, sí. El comedor y el baño. ¿Y el comedor? ¿Por qué el comedor? Bueno, el comedor, porque cuando llegas de trabajar me encanta sentarme
con toda mi familia y en la mesa y hablar sobre lo que hemos hecho durante el día. Sí, sí. Es un espacio familiar. Totalmente, totalmente. Ajá. Y solo para la familia, ¿sí? No, y de vez en cuando pues vienen amigos, me gusta preparar una cena especial y y en la mesa, yo creo, del comedor es cuando surge la magia, ¿no? Y el baño, porque el baño, el baño indudablemente porque cada noche después de un día estresante me gusta tomar un baño caliente y y me relaja muchísimo, muchísimo, sobre todo si el día ha sido duro,
¿no? Ya, ya, claro. Pues me encanta estar en casa, pasar ratitos en casa es lo mejor. Sí. ¿Y cuál es tu lugar favorito? Ahora el salón. Lo acabo de pintar y está precioso. ¿De qué color? Azul. Qué bien. Qué bonito. Y con la luz que entra, de verdad, es una maravilla. Me encanta sentarme allí, leer un rato, bonito, ponerme cerquita del balcón, que a veces entra un reyito de gusta escuchar música. Sí, además tengo el equipo allí mismo. Ajá. Sí, sí. En el salón, ¿no? Qué bien. Un día te invito a tomar un café. Y
Pedro, ¿cuál es tu lugar favorito en tu casa? mi casa el dormitorio. Ajá. Y eso sí. Sí. Me levanto a la mañana y viene el pibe y me despierta. ¿Tienes un hijo? Sí. Un año y medio tiene. Ay, es pequeñito. Y jugamos todo el tiempo ahí, todo el rato libre que tengo. Lo paso con él ahí. Qué bien. Tengo la tele, miramos películas. Ajá. A veces inclusive comemos ahí en la cama. Qué bien. Y además me encanta dormir. Ya no si es el mejor sitio, la verdad. Y en tu casa, ¿cuál cuál es tu lugar
favorito, Carolina? Bueno, mi lugar favorito, hombre, cuando hace buen clima me gusta mucho estar en la terraza. Ahí tienes terraza. Qué bien. Sí, es una terraza muy agradable, muy grande. Grandí grande. Oh, qué bien. Y me encanta porque tengo matas y tengo flores y me gusta cuidarlas. Qué envidia. Ya ves. Y a veces también tomo el sol. Ay, qué bien. ¿Me invitarás un día de estos? Por supuesto. Eres bienvenido cuando quieras. [Música] Oye, Lorenzo, ¿me prestas 5 € para desayunar? Es que me he dejado el monedero en casa. Sí, mujer, toma. Seguro que tienes bastante
con cinco. Sí, sí, perfecto. Mañana te los devuelvo. Muchas gracias. Hola, buenas tardes. ¿Qué desean? ¿Qué quieres tomar? Yo un cortado. A mí póngame un café. Un cortado y un café. ¿Desean alguna cosa más? No, no, gracias. Bueno, ¿y qué tal? ¿Cómo te va la vida? Pues bien, no me puedo quejar. ¿Qué estás haciendo ahora? ¿Has cambiado de trabajo? Uy, sí, hace un año. Ahora estoy trabajando para varias productoras de cine. Ah, qué bien. Sí, no me puedo quejar. ¿Y tú qué haces? Yo estoy trabajando en la empresa de mi hermano. ¿Y qué tal? Pues
muy bien. ¿Y de novios? ¿Qué tal? ¿Estás saliendo con alguien? Pues mira, no. ¡Uf! ¡Qué calor! ¿Usted no tiene calor? No, no, estoy bien. ¿Le importa si abro la ventana? Es que de verdad tengo mucho calor. Ábrala, ábrala, no se preocupe. Oye, Patricia, que hay una cosita que quería pedirte. Mira, es que este domingo tengo una boda. Ah, sí, sí, tengo una boda de un compañero de mi marido que se casa y bueno, me he comprado un vestido muy bonito, pero me falta un pañuelo y he pensado que ese pañuelo azul que tienes aquí como
oscuro, ¿me lo podrías dejar? Por supuesto, por supuesto que si te lo presto, no hay problema. Pasas por mi casa y lo recoges. Muchas gracias. [Música] Oiga, perdone. ¿Le importaría vigilar mi equipaje? Es que tengo que ir un momento al laabo. Solo será un momento, ¿de verdad? Claro, claro. Vaya, tranquila, no se preocupe. Muchísimas gracias. Nada, tranquila, Sara, cuánto tiempo. Hola, ¿qué tal? Muy bien. ¿Qué haces por aquí? Nada, he quedado con unos amigos y tú pues ya ves, aquí tomando unas cañas. Oye, espera que te presento. Esta es Rosa, una compañera de trabajo. Hola,
mucho gusto. ¿Qué tal? Encantada. ¿Quieres tomar algo? Sí, ¿por qué no? Oye, María, tengo que pedirte un favor. Dime. ¿Me podrías dejar tu coche un día? Es que tengo que ir al centro comercial a comprar unos muebles. ¡Uf! No sé, Miguel, es que es muy nuevo. Ya sabes que me lo acabo de comprar y no sé, me da cosa. Ya, ya, ya lo sé, pero me harías un gran favor. Es que es una estantería muy pesada y no puedo llevarla en metro o en autobús. De verdad que te entiendo, eh, pero es que a veces
ya he dejado el coche y me sabe mal pedírtelo, de verdad, pero te prometo que voy a tener mucho cuidado, además, solo para un par de horas. A ver, eh, ¿cuándo lo necesitas? Cuando tú me digas el viernes, por ejemplo, por la mañana. Ay, no sé, Miguel. Es que de verdad es que además conduces fatal y me da un miedo. Bueno, he mejorado mucho, ¿eh? En serio, ¿tú crees? Bueno, a ver, eh, vamos a hacer una cosa. ¿Qué te parece si vamos el viernes? Pero conduzco yo, así me quedo más tranquila. Vale. Sí, muchas gracias,
pero de verdad, ¿no te importa? No. Hola, buenos días. Estamos haciendo una encuesta para la radio joven. Os quería hacer unas preguntas. ¿Estáis llegando de vuestras vacaciones? Sí, sí, acabamos de llegar. Estamos cansadísimos. Ya me imagino. ¿Y de dónde venís? Hemos estado en Chile. Ah, ¿y qué tal? Bien. Muy bien. Hemos recorrido casi todo el país. Hemos estado en Santiago de Chile, en Valparaíso, en Tierra de Fuego, en Los Andes. ¿Qué habéis visto en Los Andes? Hemos estado en la zona del volcán Osorno y es una zona superbonita. ¿Y habéis estado en más sitios? alguna
isla. Sí, hemos ido a la isla de Pascua y también hemos estado en la isla de Chiloé. Qué bien. Es bonita, preciosa. ¿Y la comida, ¿qué tal? ¿Qué habéis comido? Bueno, pues muchas empanadas, pescado. La comida está muy buena. Daniela, ¿tú qué lengua hablas en casa? Pues depende, hablo más de una lengua. Mi madre es holandesa y nos habla siempre en holandés a mí y a mi hermano. Y mi padre es de Rumanía y nos habla en rumano. Ah, ¿y tu hermano y tú les habláis también en holandés y en rumano? Sí, normalmente sí. Hablamos
en holandés con mi madre y en romano con mi padre, pero muchas veces les hablamos en español. Ya, claro, porque habéis nacido aquí los dos, ¿no? Sí. ¿Y entre vosotros habláis en español? Sí, casi siempre. ¿Y qué lengua hablan tus padres entre ellos? ¿Holandés o rumano? Hablan en inglés. Mi madre no habla romano y mi padre no tiene mucho nivel de holandés. Ah, o sea, que habláis cuatro lenguas en casa. Sí. En la escuela hablas en español, ¿no? Bueno, sí. Con la mayoría de mis amigos, sí. Por ejemplo, con Lucía, que es mi mejor amiga,
hablo siempre en español, pero voy a una escuela internacional y hablo inglés con mi maestra y con algunos niños. Ah, oye, y ya sé que es una pregunta que seguro que te hace todo el mundo, pero ¿prefieres hablar en holandés o en rumano? No sé, me da igual. Las hablas con más gente aparte de con tu padre y con tu madre. Sí, en Rumanía hablo rumano con mi abuela y con mis tíos y mis primos. Y los padres de mi madre viven en Holanda y con ellos siempre hablo en holandés también. Claro. Qué suerte hablar
tantas lenguas desde tan pequeña. ¿Qué tal? Hola. Mira, soy Carmen. ¿Y tú cómo te llamas? Bárbara. ¿De dónde eres, Bárbara? De Alemania. De Berlín. De Berlín. ¿Cuánto tiempo piensas estar aquí en España, Bárbara? Pienso que dos meses, pero si encuentro trabajo, me voy a quedar más. A ver si hay suerte. ¿Y qué haces en Alemania? ¿A qué te dedicas? Soy secretaria. Mm, secretaria. Vale. ¿Hablas otras lenguas? Sí, un poco de italiano, inglés, bastante bien. Y también un poco de francés. Muy bien. Hablas muchísimas lenguas. ¿Y por qué estudias español, Bárbara? Porque tengo que hacer un
examen este año, pero también porque quiero vivir en España o en algún país de Latinoamérica como Argentina o Chile. Te gusta viajar. ¿Y desde cuándo estudias español? Mm, pues desde hace dos años. ¿Y qué cosas te gusta hacer en clase? No sé. Me gusta leer textos y hacer ejercicios en grupo con mis compañeros. No me gusta mucho escribir. Ah, no te gusta escribir. ¿Qué dificultades crees que tienes con el español? ¿Qué cosas te cuestan más? ¡Uf! Muchas, supongo. Qué va, mujer, hablas muy bien. No sé, por ejemplo, me cuesta mucho diferenciar entre ser y estar
y a veces me cuesta pronunciar la r. Bueno, es cuestión de práctica. ¿Y qué te gusta hacer en tu tiempo libre? Me gusta mucho la música. También me encanta ir a la playa y salir con los amigos. Muy bien, Bárbara, ya hemos acabado. Muchas gracias. Hola, ¿qué tal? Hola, yo soy Elena. ¿Y tú cómo te llamas? Creta. ¿De dónde eres, Greta? De Alemania. De Munich. De Munich. ¿Y cuánto tiempo piensas estar aquí en España, Greta? Un mes. Muy bien. ¿Y qué haces en Alemania? ¿A qué te dedicas? Soy estudiante de medicina. Estudiante de medicina. Muy
bien. ¿Y hablas otras lenguas? Sí, un poco de polaco e inglés. Bastante bien. Ajá. ¿Y por qué estudias español, Greta? Porque tengo muchos amigos españoles y latinoamericanos y mi novio es colombiano y además quiero viajar por Latinoamérica. Me gustaría ir a Perú, a Colombia, a Chile. Ah, pues tienes que ir a Cuba. Mi país es muy bonito. Sí, me encantaría también ir a Cuba. Ah, ¿y desde cuándo estudias español? Hm, pues desde hace 5 años. ¿Y qué cosas te gusta hacer en clases? No sé. Me gusta hacer juegos y hacer ejercicios en grupo con mis
compañeros. No me gusta hacer actividades de gramática. Ah, ya es complicada la gramática. Sí. ¿Qué dificultades crees que tienes con el español? ¿Qué cosas te cuestan más? ¡Uf! No sé, por ejemplo, me cuesta mucho saber cuándo tengo que decir por y cuándo para y pronunciar la resta entenderlo todo cuando hablan muy rápido y también hablar con fluidez. Pienso mucho en lo que quiero decir y hablo lentamente. Bueno, eso es normal. Hay que practicar. ¿Qué te gusta hacer en tu tiempo libre? Me gusta mucho leer y escribir, ver películas y series, salir con amigos, no sé,
viajar también. Muy bien, Greta, ya hemos acabado. Muchas gracias. Julio, ¿tú estudias inglés? No, pues sí, porque tengo que hablarlo con clientes en mi trabajo. ¿Y por qué lo dices así? No te gusta. Es que me cuesta pronunciar algunas palabras. Y cuando tengo que hablar inglés me pongo nervioso y como que tengo acento y no me entienden. Bueno, hombre, eso es normal. Noemí, ¿qué tal las clases de alemán? Muy bien. Me gusta mucho ese idioma. Sí, sí. Me encanta como suena, me gusta la cultura. ¿Y no te parece difícil? Pues sí, hay muchas palabras diferentes
del español y me cuesta mucho retener el vocabulario nuevo. Ya no soy tan joven. Ya. A mí me cuesta mucho aprender lenguas. Ahora sí. Y luego están las formas de los verbos en pasado, los verbos irregulares. Ah, y las declinaciones. La gramática me cuesta. Además, yo cuando no domino la gramática de un idioma me bloqueo. No me siento segura. Oye, Ana, tú hablas muchas lenguas, ¿no? Sí, bueno, unas cuantas. Aparte de español, hablo polaco, inglés e italiano. Ah, polao. Nunca te he oído hablar polaco ya, porque solo lo hablo en casa con mis padres y
con mis hermanos, porque mis padres son de Polonia y esa es la lengua que hablamos en casa. Ajá. Además, también lo hablo cuando voy a Polonia en vacaciones con mis amigos y con mis abuelos que viven allí. Ah, o sea, que es un poco tu lengua materna. Sí, sí, es mi lengua materna. ¿Y hablas bien? Bueno, el inglés lo estudio en la universidad porque estudio filología inglesa y lo hablo con muchos amigos del extranjero que nos comunicamos en inglés. Y si estudias filología inglesa, seguro que lees un montón, ¿no? En en inglés, sí, un montón.
Y además me encanta la literatura inglesa y americana. Y bueno, además veo muchas series en inglés, escucho música en inglés, así que con el inglés estoy en contacto continuamente. E italiano también. Sí, pues el italiano lo hablo un poco porque mis padres tienen un apartamento en la costa cerca de Génova y vamos cada año en verano. Caray, qué suerte. Y seguro que te sabes todos los nombres de los platos increíbles que hay de pasta, ¿no? Sí, todos. Hm, qué bien. Y bueno, y seguro que lo hablas perfecto, entonces, ¿no? Si vas cada año. Bueno, me
defiendo. La verdad es que veo bastante la televisión en italiano, así que lo entiendo bien, pero lo hablo regular y por eso voy a clases. Verónica, tú tienes una vida bastante interesante, ¿no? Bueno, sí, si se puede decir, porque has vivido en en muchísimos sitios. Bueno, nací, viví en Argentina hasta el año 2008 y cuando finalicé mis estudios me fui a México. A México, caray. ¿Y qué hiciste en México? Al principio viajé, recorrí un poco el país, visité amigos, luego decidí quedarme y busqué un trabajo. Ah, ¿y de qué trabajaste? En un momento trabajé de
camarera en un restaurante, luego me llamaron de un hotel en la playa y me fui a Puerto Vallarta, que queda en la costa del Pacífico, y trabajé de fotógrafa. Qué bonito, ¿no? Sí, muy bonito. Y luego ya te fuiste de México. Luego, en el año 2009 viajé a Londres a estudiar inglés. Ah, ¿y cuánto tiempo te quedaste en Londres? 3 meses. Ah, y aprendiste mucho. Bueno, un poco. Y luego ya entonces es cuando te viniste a España, ¿no? Sí, en el año 2009 vine a España. M. Y en España supongo que has hecho muchas cosas
también, ¿no? Sí, sí. Los primeros años trabajé de camarera, de canguro, de dependienta y desde hace 6 meses tengo un proyecto musical con unos amigos. Este me gusta mucho, mira. Ay, no. No me gustan nada los cojines. No, bueno, a ver, yo hablo del salón en general, pero a mí los cojines sí que me gustan. Me parecen muy alegres. Ya, son tu estilo, eso es verdad. Y el cuadro seguro que también te gusta, ¿no? Sí, es así étnico. Es Sí, es mi estilo. Pero a ver, el salón, ¿te gusta o no? Sí, sí, me gusta.
Es muy luminoso. Sí, a mí me parece muy acogedor, me encanta, pero para mi gusto es demasiado moderno. Demasiado moderno. En serio, es que es superclásico. A mí me parece muy normal. No sé, muy moderno. Bueno, no sé, quizás es que me parece un poco frío porque todos los muebles son muy blancos. Pues a mí eso me gusta, me parece que le da claridad. Lo que no me gusta mucho es la estantería. Es con ese color así. Parece muy vieja, pero lo demás me encanta. Sí, sí, sí. ¿No te gusta ningún mueble? A ver, sí,
el sofá no está mal, pero es muy pequeño y a mí me gusta tener mucho sitio para tumbarme. Sí, eso es verdad. ¿Y el sillón? ¿El sillón te parece chulo? Mm, no está mal, pero yo prefiero un sillón de piel de esos marrones. Es que es que eres un clásico lo que te he dicho. Julián, me han dicho que te has comprado una casa. Sí, bueno, es un piso. Ya, sí, me imagino. Pero muy bien, ¿no? ¿Y cómo es? Pues mira, tiene 55 met²ad. Es un ático. Ajá. Qué bien. Mi piso también es un ático.
¿Y dónde está? Está en el centro de la ciudad. Es una zona muy bonita. Ajá. El mío es más grande. Tiene unos 70 met²ad, pero no está en el centro. Está en las afueras de la ciudad. Sí, es que en el centro los pisos son muy caros. Sí, es verdad. A ver, es un edificio antiguo, pero con ascensor. Eso está bien. Y es pequeño, pero es muy acogedor. Tiene un salón de 20 m², tiene mucha luz, una habitación y una cocina americana. Una cocina americana. Qué bien, ¿no? Sí, es muy chula. Y además tengo una
terraza de 15 m². Ah, sí, yo también tengo terraza, pero la mía es un poco más pequeña. Pero también hay mucha luz, eso es muy importante. Sí. Qué bien, ¿no? Un piso en el centro y con terraza. ¿Tiene vistas? Sí, tiene unas vistas muy bonitas y es muy luminoso. ¿Y es tranquilo? No, eso no da a una calle peatonal y a un mercado, así que es bastante ruidoso. Ajá. El tuyo sí que es tranquilo, ¿no? Sí, claro. Está en una zona residencial. Además, mi terraza da al campo. No se oye ningún ruido. ¿Y tu lugar
favorito cuál es? Bueno, es que yo no tengo un lugar favorito, tengo dos lugares favoritos en casa. Sí, sí, sí. El comedor y el baño. ¿Y el comedor porque el comedor? Bueno, el comedor porque cuando llegas de trabajar me encanta sentarme con toda mi familia y en la mesa y hablar sobre lo que hemos hecho durante el día. Sí, sí. Es un espacio familiar. Totalmente, totalmente. Ajá. Y solo para la familia, ¿sí no? Y de vez en cuando pues vienen amigos, me gusta preparar una cena especial y y en la mesa, yo creo, del comedor
es cuando surge la magia, ¿no? Y el baño, porque el baño el baño indudablemente porque cada noche después de un día estresante me gusta tomar un baño caliente y y me relaja muchísimo, muchísimo, sobre todo si el día ha sido duro, ¿no? Ya, ya, claro. Pues me encanta estar en casa, pasar ratitos en casa es lo mejor. Sí. ¿Y cuál es tu lugar favorito? Ahora el salón lo acabo de pintar y está precioso. ¿De qué color? Azul. Qué bien. Qué bonito. Y con la luz que entra, de verdad, es una maravilla. Me encanta sentarme allí,
leer un rato, ponerme cerquita del balcón, que a veces entra un reyo. ¿Te gusta escuchar música? Sí, además tengo el equipo allí mismo. Ajá. Sí, sí. En el salón, ¿no? Qué bien. Un día te invito a tomar un café. Y Pedro, ¿cuál es tu lugar favorito en tu casa? En mi casa el dormitorio. Ajá. Y eso sí. Sí. Me levanto a la mañana y viene el pibe y me despierta. ¿Tienes un hijo? Sí. Un año y medio tiene. Ay, es pequeñito. Y jugamos todo el tiempo ahí. Todo el rato libre que tengo. Lo paso con
él ahí. Tengo la tele, miramos películas, a veces inclusive comemos ahí en la cama. Qué bien. Y además me encanta dormir. Ya no es el mejor sitio, la verdad. Y en tu casa, ¿cuál cuál es tu lugar favorito, Carolina? Bueno, mi lugar favorito, hombre, cuando hace buen clima me gusta mucho estar en la terraza. Ahí tienes terraza. Qué bien. Sí, es una terraza muy agradable, muy grande. Grandí grande. Oh, qué bien. Y me encanta porque tengo matas y tengo flores y me gusta cuidarlas. Qué envidia. Ya ves. Y a veces también tomo el sol. Ay,
qué bien. Invitarás un día de estos. Por supuesto. Eres bienvenido cuando quieras. [Música] Oye, Lorenzo, ¿me prestas 5 € para desayunar? Es que me he dejado el monedero en casa. Sí, mujer, toma. Seguro que tienes bastante con cinco. Sí, sí, perfecto. Mañana te los devuelvo. Muchas gracias. Hola, buenas tardes. ¿Qué desean? ¿Qué quieres tomar? Yo un cortado. A mí póngame un café. Un cortado y un café. ¿Desean alguna cosa más? No, no, gracias. Bueno, ¿y qué tal? ¿Cómo te va la vida? Pues bien, no me puedo quejar. ¿Qué estás haciendo ahora? ¿Has cambiado de trabajo?
Uy, sí, hace un año. Ahora estoy trabajando para varias productoras de cine. Ah, qué bien. Sí, no me puedo quejar. ¿Y tú qué haces? Yo estoy trabajando en la empresa de mi hermano. ¿Y qué tal? Pues muy bien. ¿Y de novios? ¿Qué tal? ¿Estás saliendo con alguien? Pues mira, no. ¡Uf! ¡Qué calor! ¿Usted no tiene calor? No, no, estoy bien. ¿Le importa si abro la ventana? Es que de verdad tengo mucho calor. Ábrala, ábrala, no se preocupe. Oye, Patricia, que hay una cosita que quería pedirte. Mira, es que este domingo tengo una boda. Ah, sí,
sí, tengo una boda de un compañero de mi marido que se casa y bueno, me he comprado un vestido muy bonito, pero me falta un pañuelo y he pensado que ese pañuelo azul que tienes aquí como oscuro, ¿me lo podrías dejar? Por supuesto, por supuesto que si te lo presto, no hay problema. Pasas por mi casa y lo recoges. Muchas gracias. [Música] Oiga, perdone, ¿le importaría vigilar mi equipaje? Es que tengo que ir un momento al laabo. Solo será un momento, ¿de verdad? Claro, claro. Vaya, tranquila, no se preocupe. Muchísimas gracias. Nada, tranquila. Sara, cuánto
tiempo. Hola, ¿qué tal? Muy bien. ¿Qué haces por aquí? Nada, he quedado con unos amigos y tú, pues ya ves, aquí tomando unas cañas. Oye, espera que te presento. Esta es Rosa, una compañera de trabajo. Hola, mucho gusto. ¿Qué tal? Encantada. ¿Quieres tomar algo? Sí, ¿por qué no? Oye, María, tengo que pedirte un favor. Dime. ¿Me podrías dejar tu coche un día? Es que tengo que ir al centro comercial a comprar unos muebles. ¡Uf! No sé, Miguel, es que es muy nuevo. Ya sabes que me lo acabo de comprar y no sé, me da cosa.
Ya, ya, ya lo sé, pero me harías un gran favor. Es que es una estantería muy pesada y no puedo llevarla en metro o en autobús. De verdad que te entiendo, eh, pero es que a veces ya he dejado el coche y me sabes mal pedírtelo, de verdad, pero te prometo que voy a tener mucho cuidado, además, solo para un par de horas. A ver, eh, ¿cuándo lo necesitas? Cuando tú me digas el viernes, por ejemplo, por la mañana. Ay, no sé, Miguel, es que de verdad es que además conduces fatal y me da un
miedo. Bueno, he mejorado mucho, ¿eh? En serio, ¿tú crees? Bueno, a ver, eh, vamos a hacer una cosa. ¿Qué te parece si vamos el viernes, pero conduzco yo, así me quedo más tranquila. Vale. Sí, muchas gracias, pero de verdad, ¿no te importa? No. Hola, buenos días. Estamos haciendo una encuesta para la radio joven. Os quería hacer unas preguntas. ¿Estáis llegando de vuestras vacaciones? Sí, sí, acabamos de llegar. Estamos cansadísimos. Ya me imagino. ¿Y de dónde venís? Hemos estado en Chile. Ah, ¿y qué tal? Bien, muy bien. Hemos recorrido casi todo el país. Hemos estado en
Santiago de Chile, en Valparaíso, en Tierra de Fuego, en Los Andes. ¿Qué habéis visto en Los Andes? Hemos estado en la zona del volcán Osorno y es una zona superbonita. ¿Y habéis estado en más sitios, alguna isla? Sí, hemos ido a la isla de Pascua y también hemos estado en la isla de Chiloé. Qué bien, es bonita, preciosa. ¿Y la comida, ¿qué tal? ¿Qué habéis comido? Bueno, pues muchas empanadas, pescado, la comida está muy buena. Daniela, ¿tú qué lengua hablas en casa? Pues depende, hablo más de una lengua. Mi madre es holandesa y nos habla
siempre en holandés a mí y a mi hermano. Y mi padre es de Rumanía y nos habla en rumano. Ah, ¿y tu hermano y tú les habláis también en holandés y en rumano? Sí, normalmente sí. Hablamos en holandés con mi madre y en rumano con mi padre, pero muchas veces les hablamos en español. Ya, claro, porque habéis nacido aquí los dos, ¿no? Sí. ¿Y entre vosotros habláis en español? Sí, casi siempre. ¿Y qué lengua hablan tus padres entre ellos? ¿Holandés o rumano? Hablan en inglés. Mi madre no habla romano y mi padre no tiene mucho
nivel de holandés. Ah, o sea, que habláis cuatro lenguas en casa. Sí. En la escuela hablas en español, ¿no? Bueno, sí, con la mayoría de mis amigos sí. Por ejemplo, con Lucía, que es mi mejor amiga, hablo siempre en español. Pero voy a una escuela internacional y hablo inglés con mi maestra y con algunos niños. Ah, oye, y ya sé que es una pregunta que seguro que te hace todo el mundo, pero ¿prefieres hablar en holandés o en rumano? No sé, me da igual. Las hablas con más gente, aparte de con tu padre y con
tu madre. Sí, en Rumanía hablo romano con mi abuela y con mis tíos y mis primos. Y los padres de mi madre viven en Holanda y con ellos siempre hablo en holandés también. Claro. Qué suerte hablar tantas lenguas desde tan pequeña. ¿Qué tal? Hola. Mira, soy Carmen. ¿Y tú cómo te llamas? Bárbara. ¿De dónde eres, Bárbara? De Alemania. De Berlín. De Berlín. ¿Cuánto tiempo piensas estar aquí en España, Bárbara? Pienso que dos meses, pero si encuentro trabajo, me voy a quedar más. A ver si hay suerte. ¿Y qué haces en Alemania? ¿A qué te dedicas?
Soy secretaria. Mm. Secretaria. Vale. ¿Hablas otras lenguas? Sí, un poco de italiano, inglés, bastante bien. Y también un poco de francés. Muy bien. Hablas muchísimas lenguas. ¿Y por qué estudias español, Bárbara? Porque tengo que hacer un examen este año, pero también porque quiero vivir en España o en algún país de Latinoamérica como Argentina o Chile. ¿Te gusta viajar? ¿Y desde cuándo estudias español? Mm, pues desde hace dos años. ¿Y qué cosas te gusta hacer en clase? No sé, me gusta leer textos y hacer ejercicios en grupo con mis compañeros. No me gusta mucho escribir. Ah,
no te gusta escribir. ¿Qué dificultades crees que tienes con el español? ¿Qué cosas te cuestan más? ¡Uf! Muchas, supongo. Qué va, mujer hablas muy bien. No sé, por ejemplo, me cuesta mucho diferenciar entre ser y estar y a veces me cuesta pronunciar la r. Bueno, es cuestión de práctica. ¿Y qué te gusta hacer en tu tiempo libre? Me gusta mucho la música. También me encanta ir a la playa y salir con los amigos. Muy bien, Bárbara, ya hemos acabado. Muchas gracias. Hola, ¿qué tal? Hola, yo soy Elena. ¿Y tú, ¿cómo te llamas? Greta. ¿De dónde
eres, Greta? De Alemania. De Munich. De Munich. ¿Cuánto tiempo piensas estar aquí en España, Greta? Un mes. Muy bien. ¿Y qué haces en Alemania? ¿A qué te dedicas? Soy estudiante de medicina. Estudiante de medicina. Muy bien. ¿Y hablas otras lenguas? Sí, un poco de polaco e inglés. Bastante bien. Ajá. ¿Y por qué estudias español, Greta? Porque tengo muchos amigos españoles y latinoamericanos y mi novio es colombiano y además quiero viajar por Latinoamérica. Me gustaría ir a Perú, a Colombia, a Chile. Ah, pues tienes que ir a Cuba. Mi país es muy bonito. Sí, me encantaría
también ir a Cuba. Ah, ¿y desde cuándo estudias español? Hm, pues desde hace 5 años. ¿Y qué cosas te gusta hacer en clases? No sé, me gusta hacer juegos y hacer ejercicios en grupo con mis compañeros. No me gusta hacer actividades de gramática. Ah, ya es complicada la gramática. Sí. ¿Qué dificultades crees que tienes con el español? ¿Qué cosas te cuestan más? ¡Uf! No sé, por ejemplo, me cuesta mucho saber cuándo tengo que decir por y cuándo para y pronunciar la resta entenderlo todo cuando hablan muy rápido y también hablar con fluidez. Pienso mucho en
lo que quiero decir y hablo lentamente. Bueno, eso es normal, hay que practicar. ¿Qué te gusta hacer en tu tiempo libre? Me gusta mucho leer y escribir, ver películas y series, salir con amigos, no sé, viajar también. Muy bien, Greta, ya hemos acabado. Muchas gracias. Julio, ¿tú estudias inglés? No, pues sí, porque tengo que hablarlo con clientes en mi trabajo. ¿Y por qué lo dices así? ¿No te gusta? Es que me cuesta pronunciar algunas palabras y cuando tengo que hablar inglés me pongo nervioso y como que tengo acento y no me entienden. Bueno, hombre, eso
es normal. Noemí, ¿qué tal las clases de alemán? Muy bien. Me gusta mucho ese idioma. Sí, sí. Me encanta cómo suena, me gusta la cultura. ¿Y no te parece difícil? Pues sí, hay muchas palabras diferentes del español y me cuesta mucho retener el vocabulario nuevo. Ya no soy tan joven. Ya. A mí me cuesta mucho aprender lenguas. Ahora sí. Y luego están las formas de los verbos en pasado, los verbos irregulares. Ah, y las declinaciones. La gramática me cuesta. Además, yo cuando no domino la gramática de un idioma, me bloqueo. No me siento segura. Oye,
Ana, ¿tú hablas muchas lenguas? No. Sí, bueno, unas cuantas. Aparte de español, hablo polaco, inglés e italiano. Ah, polaco. Nunca te he oído hablar polaco ya, porque solo lo hablo en casa con mis padres y con mis hermanos, porque mis padres son de Polonia y esa es la lengua que hablamos en casa. Ajá. Además, también lo hablo cuando voy a Polonia en vacaciones con mis amigos y con mis abuelos que viven allí. Ah, o sea, que es un poco tu lengua materna. Sí, sí, es mi lengua materna. ¿Y inglés hablas bien? Bueno, el inglés lo
estudio en la universidad porque estudio filología inglesa y lo hablo con muchos amigos del extranjero que nos comunicamos en inglés. Y si estudias filología inglesa, seguro que lees un montón, ¿no? En en inglés. Sí, un montón. Y además me encanta la literatura inglesa y americana. Y bueno, además veo muchas series en inglés, escucho música en inglés, así que con el inglés estoy en contacto continuamente. E italiano también. Sí, pues el italiano lo hablo un poco porque mis padres tienen un apartamento en la costa cerca de Génova y vamos cada año en verano. Caray, qué suerte.
Y seguro que te sabes todos los nombres de los platos increíbles que hay de pasta, ¿no? Sí, todos. Hm, qué bien. Y bueno, y seguro que lo hablas perfecto, entonces, ¿no? Si vas cada año. Bueno, me defiendo. La verdad es que veo bastante la televisión en italiano, así que lo entiendo bien, pero lo hablo regular y por eso voy a clases. Verónica, tú tienes una vida bastante interesante, ¿no? Bueno, sí, si se puede decir, porque has vivido en en muchísimos sitios. Bueno, nací, viví en Argentina hasta el año 2008 y cuando finalicé mis estudios me
fui a México. A México, caray. ¿Y qué hiciste en México? Al principio viajé, recorrí un poco el país, visité amigos, luego decidí quedarme y busqué un trabajo. Ah, ¿y de qué trabajaste? En un momento trabajé de camarera en un restaurante. Luego me llamaron de un hotel en la playa y me fui a Puerto Vallarta, que queda en la costa del Pacífico, y trabajé de fotógrafa. Qué bonito, ¿no? Sí, muy bonito. Y luego ya te fuiste de México. Luego, en el año 2009 viajé a Londres a estudiar inglés. Ah, ¿y cuánto tiempo te quedaste en Londres?
tres meses. Ah, y aprendiste mucho. Bueno, un poco. Y luego ya entonces es cuando te viniste a España, ¿no? Sí, en el año 2009 vine a España. M. Y en España supongo que has hecho muchas cosas también, ¿no? Sí, sí. Los primeros años trabajé de camarera, de canguro, de dependienta y desde hace 6 meses tengo un proyecto musical con unos amigos. Este me gusta mucho, mira. Ay, no. No me gustan nada los cojines. No, bueno, a ver, yo hablo del salón en general, pero a mí los cojines sí que me gustan. Me parecen muy alegres.
Ya, son tu estilo, eso es verdad. Y el cuadro seguro que también te gusta, ¿no? Sí, es así étnico. Sí, es mi estilo. Pero a ver, el el salón, ¿te gusta o no? Sí, sí, me gusta. Es muy luminoso. Sí, a mí me parece muy acogedor, me encanta. Pero para mi gusto es demasiado moderno. Demasiado moderno. En serio, es que eres superclásico. A mí me parece muy normal. No sé, muy moderno. Bueno, no sé, quizás es que me parece un poco frío porque todos los muebles son muy blancos. Pues a mí eso me gusta. Me
parece que le da claridad. Lo que no me gusta mucho es la estantería. Es con ese color así, parece muy vieja, pero lo demás me encanta. Sí, sí, sí. ¿No te gusta ningún mueble? A ver, sí, el sofá no está mal, pero es muy pequeño y a mí me gusta tener mucho sitio para tumbarme. Sí, eso es verdad. ¿Y el sillón? ¿El sillón te parece chulo? Mm, no está mal, pero yo prefiero un sillón de piel de esos marrones. Es que es que eres un clásico lo que te he dicho. Julián, me han dicho que
te has comprado una casa. Sí, bueno, es un piso. Ya, sí, me imagino. Pero muy bien, ¿no? ¿Y cómo es? Pues mira, tiene 55 met²ad. Es un ático. Ajá. Qué bien. Mi piso también es un ático. ¿Y dónde está? Está en el centro de la ciudad. Es una zona muy bonita. Ajá. El mío es más grande. Tiene unos 70 m², pero no está en el centro. Está en las afueras de la ciudad. Sí, es que en el centro los pisos son muy caros. Sí, es verdad. A ver, es un edificio antiguo, pero con ascensor. Eso
está bien. Y es pequeño, pero es muy acogedor. Tiene un salón de 20 m². Tiene mucha luz, una habitación y una cocina americana. Una cocina americana. Qué bien, ¿no? Sí, es muy chula. Y además tengo una terraza de 15 m². Ah, sí, yo también tengo terraza, pero la mía es un poco más pequeña. Pero también hay mucha luz, eso es muy importante. Sí. Qué bien, ¿no? Un piso en el centro y con terraza. ¿Te vistas? Sí, tiene unas vistas muy bonitas y es muy luminoso. ¿Y es tranquilo, ¿no? Eso no da a una calle peatonal
y a un mercado, así que es bastante ruidoso. Ajá. El tuyo sí que es tranquilo, ¿no? Sí, claro. Está en una zona residencial. Además, mi terraza da al campo. No se oye ningún ruido. ¿Y tu lugar favorito cuál es? Bueno, es que yo no tengo un lugar favorito, tengo dos lugares favoritos en casa. Sí, sí, sí. El comedor y el baño. Y el comedor, ¿por qué el comedor? Bueno, el comedor, porque cuando llegas de trabajar me encanta sentarme con toda mi familia y en la mesa y hablar sobre lo que hemos hecho durante el día.
Sí, sí. Es un espacio familiar. Totalmente, totalmente. Ajá. Y solo para la familia, ¿sí no? Y de vez en cuando pues vienen amigos, me gusta preparar una cena especial y y en la mesa, yo creo, del comedor es cuando surge la magia, ¿no? Y el baño, porque el baño el baño indudablemente porque cada noche después de un día estresante me gusta tomar un baño caliente y y me relaja muchísimo, muchísimo, sobre todo si el día ha sido duro, ¿no? Ya, ya, claro. Pues me encanta estar en casa, pasar ratitos en casa es lo mejor. ¿Y
cuál es tu lugar favorito ahora? El salón lo acabo de pintar y está precioso. ¿De qué color? Azul. ¡Qué bien! ¡Qué bonito! Y con la luz que entra, de verdad, es una maravilla. Me encanta sentarme allí, leer un rato, bonito, ponerme cerquita del balcón, que a veces entra un reyito de Gusta música. Sí, además tengo el equipo allí mismo. Ajá. Sí, sí. En el salón, ¿no? Qué bien. Un día te invito a tomar un café. Y Pedro, ¿cuál es tu lugar favorito en tu casa? En mi casa el dormitorio. Ajá. Y eso sí. Sí. Me
levanto a la mañana y viene el pibe y me despierta. Y ¿Tienes un hijo? Sí, un año y medio tiene. Ay, es pequeñito. Y jugamos todo el tiempo ahí. Todo el rato libre que tengo. Lo paso con él ahí. Tengo la tele, miramos películas, a veces inclusive comemos ahí en la cama. Qué bien. Y además me encanta dormir. Ya no es el mejor sitio. Y en tu casa, ¿cuál cuál es tu lugar favorito, Carolina? Bueno, mi lugar favorito, hombre, cuando hace buen clima me gusta mucho estar en la terraza. Ahí tienes terraza. Qué bien. Sí,
es una terraza muy agradable, muy grande. Grandí grande. Oh, qué bien. Y me encanta porque tengo matas y tengo flores y me gusta cuidarlas. Qué envidia. Ya ves. Y a veces también tomo el sol. Ay, qué bien. ¿Me invitarás un día de estos? Por supuesto. Eres bienvenido cuando quieras. [Música] Oye, Lorenzo, ¿me prestas 5 € para desayunar? Es que me he dejado el monedero en casa. Sí, mujer, toma. Seguro que tienes bastante con cinco. Sí, sí, perfecto. Mañana te los devuelvo. Muchas gracias. Hola, buenas tardes. ¿Qué desean? ¿Qué quieres tomar? Yo un cortado. A mí
póngame un café. Un cortado y un café. ¿Desean alguna cosa más? No, no, no. Gracias. Bueno, ¿y qué tal? ¿Cómo te va la vida? Pues bien, no me puedo quejar. ¿Qué estás haciendo ahora? ¿Has cambiado de trabajo? Uy, sí, hace un año. Ahora estoy trabajando para varias productoras de cine. Ah, qué bien. Sí, no me puedo quejar. ¿Y tú qué haces? Yo estoy trabajando en la empresa de mi hermano. ¿Y qué tal? Pues muy bien. ¿Y de novios? ¿Qué tal? ¿Estás saliendo con alguien? Pues mira, no. ¡Uf! ¡Qué calor! ¿Usted no tiene calor? No, no,
estoy bien. ¿Le importa si abro la ventana? Es que de verdad tengo mucho calor. Ábrala, ábrala, no se preocupe. Oye, Patricia, que hay una cosita que quería pedirte. Mira, es que este domingo tengo una boda. Ah, sí, sí. Tengo una boda de un compañero de mi marido que se casa y bueno, me he comprado un vestido muy bonito, pero me falta un pañuelo y he pensado que ese pañuelo azul que tienes aquí como oscuro, ¿me lo podrías dejar? Por supuesto, por supuesto que si te lo presto, no hay problema. Pasas por mi casa y lo
recoges. Muchas gracias. [Música] Oiga, perdone. ¿Le importaría vigilar mi equipaje? Es que tengo que ir un momento al laabo. Solo será un momento, ¿de verdad? Claro, claro. Vaya, tranquila, no se preocupe. Muchísimas gracias. Nada, tranquila, Sara, cuánto tiempo. Hola, ¿qué tal? Muy bien. ¿Qué haces por aquí? Nada, he quedado con unos amigos y tú pues ya ves, aquí tomando unas cañas. Oye, espera que te presento. Esta es Rosa, una compañera de trabajo. Hola, mucho gusto. ¿Qué tal? Encantada. ¿Quieres tomar algo? Sí, ¿por qué no? Oye, María, tengo que pedirte un favor. Dime. ¿Me podrías dejar
tu coche un día? Es que tengo que ir al centro comercial a comprar unos muebles. ¡Uf! No sé, Miguel, es que es muy nuevo. Ya sabes que me lo acabo de comprar y no sé, me da cosa. Ya, ya, ya lo sé, pero me harías un gran favor. Es que es una estantería muy pesada y no puedo llevarla en metro o en autobús. De verdad que te entiendo, eh, pero es que a veces ya he dejado el coche y me sabe mal pedírtelo, de verdad, pero te prometo que voy a tener mucho cuidado, además, solo
para un par de horas. A ver, eh, ¿cuándo lo necesitas? Cuando tú me digas el viernes, por ejemplo, por la mañana. Ay, no sé, Miguel, es que de verdad es que además conduces fatal y me da un miedo. Bueno, he mejorado mucho, ¿eh? En serio, ¿tú crees? Bueno, a ver, eh, vamos a hacer una cosa. ¿Qué te parece si vamos el viernes? Pero conduzco yo, así me quedo más tranquila. Vale. Sí, muchas gracias, pero de verdad, ¿no te importa? No. Hola, buenos días. Estamos haciendo una encuesta para la radio joven. Os quería hacer unas preguntas.
¿Estáis llegando de vuestras vacaciones? Sí, sí, acabamos de llegar. Estamos cansadísimos. Ya me imagino. ¿Y de dónde venís? Hemos estado en Chile. Ah, ¿y qué tal? Bien, muy bien. Hemos recorrido casi todo el país. Hemos estado en Santiago de Chile, en Valparaíso, en Tierra de Fuego, en Los Andes. ¿Qué habéis visto en Los Andes? Hemos estado en la zona del volcán Osorno y es una zona superbonita. Y habéis estado en más sitios. ¿Alguna isla? Sí, hemos ido a la isla de Pascua y también hemos estado en la isla de Chiloé. ¡Qué bien! Es bonita, preciosa.
¿Y la comida, ¿qué tal? ¿Qué habéis comido? Bueno, pues muchas empanadas, pescado. La comida está muy buena. Daniela, ¿tú qué lengua hablas en casa? Pues depende, hablo más de una lengua. Mi madre es holandesa y nos habla siempre en holandés a mí y a mi hermano. Y mi padre es de Rumanía y nos habla en rumano. Ah, ¿y tu hermano y tú les habláis también en holandés y en rumano? Sí, normalmente sí. Hablamos en holandés con mi madre y en rumano con mi padre, pero muchas veces les hablamos en español. Ya, claro, porque habéis nacido
aquí los dos, ¿no? Sí. ¿Y entre vosotros habláis en español? Sí, casi siempre. ¿Y qué lengua hablan tus padres entre ellos? ¿Holandés o rumano? Hablan en inglés. Mi madre no habla rumano y mi padre no tiene mucho nivel de holandés. Ah, o sea, que habláis cuatro lenguas en casa. Sí. En la escuela hablas en español, ¿no? Bueno, sí, con la mayoría de mis amigos, sí. Por ejemplo, con Lucía, que es mi mejor amiga, hablo siempre en español, pero voy a una escuela internacional y hablo inglés con mi maestra y con algunos niños. Ah, oye, y
ya sé que es una pregunta que seguro que te hace todo el mundo, pero ¿prefieres hablar en holandés o en rumano? No sé, me da igual. Las hablas con más gente, aparte de con tu padre y con tu madre. Sí, en Rumanía hablo rumano con mi abuela y con mis tíos y mis primos. Y los padres de mi madre viven en Holanda y con ellos siempre hablo en holandés también. Claro. Qué suerte hablar tantas lenguas desde tan pequeña. ¿Qué tal? Hola. Mira, soy Carmen. ¿Y tú cómo te llamas? Bárbara. ¿De dónde eres, Bárbara? De Alemania.
De Berlín. De Berlín. ¿Cuánto tiempo piensas estar aquí en España, Bárbara? Pienso que dos meses, pero si encuentro trabajo, me voy a quedar más. A ver si hay suerte. ¿Y qué haces en Alemania? ¿A qué te dedicas? Soy secretaria. Mm. Secretaria. Vale. ¿Hablas otras lenguas? Sí, un poco de italiano, inglés, bastante bien. Y también un poco de francés. Muy bien. Hablas muchísimas lenguas. ¿Y por qué estudias español, Bárbara? Porque tengo que hacer un examen este año, pero también porque quiero vivir en España o en algún país de Latinoamérica como Argentina o Chile. ¿Te gusta viajar?
¿Y desde cuándo estudias español? Mm, pues desde hace dos años. ¿Y qué cosas te gusta hacer en clase? No sé, me gusta leer textos y hacer ejercicios en grupo con mis compañeros. No me gusta mucho escribir. Ah, no te gusta escribir. ¿Qué dificultades crees que tienes con el español? ¿Qué cosas te cuestan más? ¡Uf! Muchas, supongo. Qué va, mujer, hablas muy bien. No sé, por ejemplo, me cuesta mucho diferenciar entre ser y estar y a veces me cuesta pronunciar la r. Bueno, es cuestión de práctica. ¿Y qué te gusta hacer en tu tiempo libre? Me
gusta mucho la música. También me encanta ir a la playa y salir con los amigos. Muy bien, Bárbara, ya hemos acabado. Muchas gracias. Hola, ¿qué tal? Hola, yo soy Elena. ¿Y tú cómo te llamas? Greta. ¿De dónde eres, Greta? De Alemania. De Munich. De Munich. ¿Y cuánto tiempo piensas estar aquí en España, Greta? Un mes. Muy bien. ¿Y qué haces en Alemania? ¿A qué te dedicas? Soy estudiante de medicina. Estudiante de medicina. Muy bien. ¿Y hablas otras lenguas? Sí, un poco de polaco e inglés. Bastante bien. Ajá. ¿Y por qué estudias español, Greta? Porque tengo
muchos amigos españoles y latinoamericanos y mi novio es colombiano y además quiero viajar por Latinoamérica. Me gustaría ir a Perú, a Colombia, a Chile. Ah, pues tienes que ir a Cuba. Mi país es muy bonito. Sí, me encantaría también ir a Cuba. Ah, ¿y desde cuándo estudias español? Hm, pues desde hace 5 años. ¿Y qué cosas te gusta hacer en clases? No sé, me gusta hacer juegos y hacer ejercicios en grupo con mis compañeros. No me gusta hacer actividades de gramática. Ah, ya es complicada la gramática. Sí. ¿Qué dificultades crees que tienes con el español?
¿Qué cosas te cuestan más? ¡Uf! No sé, por ejemplo, me cuesta mucho saber cuándo tengo que decir por y cuándo para y pronunciar la resta entenderlo todo cuando hablan muy rápido y también hablar con fluidez. Pienso mucho en lo que quiero decir y hablo lentamente. Bueno, eso es normal, hay que practicar. ¿Qué te gusta hacer en tu tiempo libre? Me gusta mucho leer y escribir, ver películas y series, salir con amigos, no sé, viajar también. Muy bien, Greta, ya hemos acabado. Muchas gracias. Julio, ¿tú estudias inglés? No, pues sí, porque tengo que hablarlo con clientes
en mi trabajo. ¿Y por qué lo dices así? ¿No te gusta? Es que me cuesta pronunciar algunas palabras y cuando tengo que hablar inglés me pongo nervioso y como que tengo acento y no me entienden. Bueno, hombre, eso es normal. Noemí, ¿qué tal las clases de alemán? Muy bien. Me gusta mucho ese idioma. Sí, sí. Me encanta como suena, me gusta la cultura. ¿Y no te parece difícil? Pues sí, hay muchas palabras diferentes del español y me cuesta mucho retener el vocabulario nuevo. Ya no soy tan joven. Ya. A mí me cuesta mucho aprender lenguas.
Ahora sí. Y luego están las formas de los verbos en pasado, los verbos irregulares. Ah, y las declinaciones. La gramática me cuesta. Además, yo cuando no domino la gramática de un idioma, me bloqueo. No me siento segura. Oye, Ana, ¿tú hablas muchas lenguas? No. Sí, bueno, unas cuantas. Aparte de español, hablo polaco, inglés e italiano. Ah, polaco. Nunca te he oído hablar pola ya, porque solo lo hablo en casa con mis padres y con mis hermanos, porque mis padres son de Polonia y esa es la lengua que hablamos en casa. Ajá. Además, también lo hablo
cuando voy a Polonia en vacaciones con mis amigos y con mis abuelos que viven allí. Ah, o sea, que es un poco tu lengua materna. Sí, sí, es mi lengua materna. ¿Y inglés hablas bien? Bueno, el inglés lo estudio en la universidad porque estudio filología inglesa y lo hablo con muchos amigos del extranjero que nos comunicamos en inglés. Y si estudias filología inglesa, seguro que lees un montón, ¿no? En en inglés, sí, un montón. Y además me encanta la literatura inglesa y americana. Y bueno, además veo muchas series en inglés, escucho música en inglés, así
que con el inglés estoy en contacto continuament italiano también. Sí, pues el italiano lo hablo un poco porque mis padres tienen un apartamento en la costa cerca de Génova y vamos cada año en verano. Caray, qué suerte. Y seguro que te sabes todos los nombres de los platos increíbles que hay de pasta, ¿no? Sí, todos. Hm, qué bien. Y bueno, y seguro que lo hablas perfecto, entonces, ¿no? Si vas cada año. Bueno, me defiendo. La verdad es que veo bastante la televisión en italiano, así que lo entiendo bien, pero lo hablo regular y por eso
voy a clases. Verónica, tú tienes una vida bastante interesante, ¿no? Bueno, sí, si se puede decir, porque has vivido en en muchísimos sitios. Bueno, nací, viví en Argentina hasta el año 2008 y cuando finalicé mis estudios me fui a México. A México, caray. ¿Y qué hiciste en México? Al principio viajé, recorrí un poco el país, visité amigos, luego decidí quedarme y busqué un trabajo. Ah, ¿y de qué trabajaste? En un momento trabajé de camarera en un restaurante. Luego me llamaron de un hotel en la playa y me fui a Puerto Vallarta, que queda en la
costa del Pacífico, y trabajé de fotógrafa. Qué bonito, ¿no? Sí, muy bonito. Y luego ya te fuiste de México. Luego, en el año 2009 viajé a Londres a estudiar inglés. Ah, ¿y cuánto tiempo te quedaste en Londres? tres meses. Ah, y aprendiste mucho. Bueno, un poco. Y luego ya entonces es cuando te viniste a España, ¿no? Sí, en el año 2009 vine a España. M. Y en España supongo que has hecho muchas cosas también, ¿no? Sí, sí. Los primeros años trabajé de camarera, de canguro, de dependienta y desde hace 6 meses tengo un proyecto musical
con unos amigos. Este me gusta mucho, mira. Ay, no. No me gustan nada los cojines. No, bueno, a ver, yo hablo del salón en general, pero a mí los cojines sí que me gustan. Me parecen muy alegres. Ya, son tu estilo, eso es verdad. Y el cuadro seguro que también te gusta, ¿no? Sí, es así étnico. Sí, es mi estilo. Pero a ver, el salón, ¿te gusta o no? Sí, sí, me gusta. Es muy luminoso. Sí, a mí me parece muy acogedor, me encanta, pero para mi gusto es demasiado moderno. Demasiado moderno. En serio, es
que es superclásico. A mí me parece muy normal, no sé, muy moderno. Bueno, no sé, quizás es que me parece un poco frío porque todos los muebles son muy blancos. Pues a mí eso me gusta, me parece que le da claridad. Lo que no me gusta mucho es la estantería. Es con ese color así, parece muy vieja, pero lo demás me encanta. Sí, sí, sí. ¿No te gusta ningún mueble? A ver, sí, el sofá no está mal, pero es muy pequeño y a mí me gusta tener mucho sitio para tumbarme. Sí, eso es verdad. ¿Y
el sillón? ¿El sillón te parece chulo? Mm, no está mal, pero yo prefiero un sillón de piel de esos marrones. Es que es que eres un clásico lo que te he dicho. Julián, me han dicho que te has comprado una casa. Sí, bueno, es un piso. Ya, sí, me imagino. Pero muy bien, ¿no? ¿Y cómo es? Pues mira, tiene 55 met²ad. Es un ático. Ajá. Qué bien. Mi piso también es un ático. ¿Y dónde está? Está en el centro de la ciudad. Es una zona muy bonita. Ajá. El mío es más grande. Tiene unos 70
m²ad, pero no está en el centro. Está en las afueras de la ciudad. Sí, es que en el centro los pisos son muy caros. Sí, es verdad. A ver, es un edificio antiguo, pero con ascensor. Eso está bien. Y es pequeño, pero es muy acogedor. Tiene un salón de 20 m². Tiene mucha luz, una habitación y una cocina americana. Una cocina americana. Qué bien, ¿no? Sí, es muy chula. Y además tengo una terraza de 15 m². Ah, sí, yo también tengo terraza, pero la mía es un poco más pequeña. Pero también hay mucha luz, eso
es muy importante. Sí. Qué bien, ¿no? Un piso en el centro y con terraza. ¿Te vistas? Sí, tiene unas vistas muy bonitas y es muy luminoso. ¿Y es tranquilo? No, eso no. Da a una calle peatonal y a un mercado, así que es bastante ruidoso. Ajá. El tuyo sí que es tranquilo, ¿no? Sí, claro. Está en una zona residencial. Además, mi terraza da al campo. No se oye ningún ruido. ¿Y tu lugar favorito cuál es? Bueno, es que yo no tengo un lugar favorito. Tengo dos lugares favoritos en casa. Sí, sí, sí. El comedor y
el baño. ¿Y el comedor? ¿Por qué el comedor? Bueno, el comedor porque cuando llegas de trabajar me encanta sentarme con toda mi familia y en la mesa y hablar sobre lo que hemos hecho durante el día. O sea, es un espacio familiar. Totalmente, totalmente. Ajá. Y solo para la familia, ¿sí no? Y de vez en cuando pues vienen amigos, me gusta preparar una cena especial y y en la mesa, yo creo, del comedor es cuando surge la magia, ¿no? Y el baño, ¿por qué el baño? Yo indudablemente porque cada noche después de un día estresante
me gusta tomar un baño caliente y y me relaja muchísimo, muchísimo, sobre todo si el día ha sido duro, ¿no? Ya, ya, claro. Pues me encanta estar en casa, pasar ratitos en casa es lo mejor. Sí. ¿Y cuál es tu lugar favorito ahora? El salón. Lo acabo de pintar y está precioso. ¿De qué color? Azul. Qué bien, qué bonito. Y con la luz que entra, de verdad, es una maravilla. Me encanta sentarme allí, leer un rato, bonito, ponerme cerquita del balcón, que a veces entra un reyito de Gusta música. Sí, además tengo el equipo allí
mismo. Ajá. Sí, sí, en el salón, ¿no? Qué bien. Un día te invito a tomar un café. Y Pedro, ¿cuál es tu lugar favorito en tu casa? En mi casa, el dormitorio. Ajá. Y eso sí. Sí. Me levanto a la mañana y viene el pibe y me despierta. Y tienes un hijo. Sí, un año y medio tiene. Ay, es pequeñito. Y jugamos todo el tiempo ahí. Todo el rato libre que tengo. Lo paso con él ahí. Qué bien. Tengo la tele, miramos películas. Ajá. A veces inclusive comemos ahí en la cama. Qué bien. Y además
me encanta dormir. Ya no. No, si es el mejor sitio, ¿verdad? Y en tu casa, ¿cuál cuál es tu lugar favorito, Carolina? Bueno, mi lugar favorito, hombre, cuando hace buen clima me gusta mucho estar en la terraza. Ahí tienes terraza. Qué bien. Sí, es una terraza muy agradable, muy grande. Grandí grande. Oh, qué bien. Y me encanta porque tengo matas y tengo flores y me gusta cuidarlas. Qué envidia. Ya ves. Y a veces también tomo el sol. Ay, qué bien. ¿Me invitarás un día de estos? Por supuesto. Eres bienvenido cuando quieras. [Música] Oye, Lorenzo, ¿me
prestas 5 € para desayunar? Es que me he dejado el monedero en casa. Sí, mujer, toma. Seguro que tienes bastante con cinco. Sí, sí, perfecto. Mañana te los devuelvo. Muchas gracias. Hola, buenas tardes. ¿Qué desean? ¿Qué quieres tomar? Yo un cortado. A mí póngame un café. Un cortado y un café. ¿Desean alguna cosa más? No, no, no. Gracias. Bueno, ¿y qué tal? ¿Cómo te va la vida? Pues bien, no me puedo quejar. ¿Qué estás haciendo ahora? ¿Has cambiado de trabajo? Uy, sí, hace un año. Ahora estoy trabajando para varias productoras de cine. Ah, qué bien.
Sí, no me puedo quejar. ¿Y tú qué haces? Yo estoy trabajando en la empresa de mi hermano. ¿Y qué tal? Pues muy bien. ¿Y de novios? ¿Qué tal? ¿Estás saliendo con alguien? Pues mira, no. ¡Uf! ¡Qué calor! ¿Usted no tiene calor? No, no, estoy bien. ¿Le importa si abro la ventana? Es que de verdad tengo mucho calor. Ábrala, ábrala, no se preocupe. Oye, Patricia, que hay una cosita que quería pedirte. Mira, es que este domingo tengo una boda. Ah, sí, sí, tengo una boda de un compañero de mi marido que se casa y bueno, me
he comprado un vestido muy bonito, pero me falta un pañuelo y he pensado que ese pañuelo azul que tienes aquí como oscuro, ¿me lo podrías dejar? Por supuesto, por supuesto que si te lo presto, no hay problema. Pasas por mi casa y lo recoges. Muchas gracias. [Música] Oiga, perdone, ¿le importaría vigilar mi equipaje? Es que tengo que ir un momento al lavabo. Solo será un momento, ¿de verdad? Claro, claro. Vaya, tranquila, no se preocupe. Muchísimas gracias. Nada, tranquila. Sara, cuánto tiempo. Hola, ¿qué tal? Muy bien. ¿Qué haces por aquí? Nada, he quedado con unos amigos.
¿Y tú? Pues ya ves, aquí tomando unas cañas. Oye, espera que te presento. Esta es Rosa, una compañera de trabajo. Hola, mucho gusto. ¿Qué tal? Encantada. ¿Quieres tomar algo? Sí, ¿por qué no? Oye, María, tengo que pedirte un favor. Dime. ¿Me podrías dejar tu coche un día? Es que tengo que ir al centro comercial a comprar unos muebles. ¡Uf! No sé, Miguel, es que es muy nuevo. Ya sabes que me lo acabo de comprar y no sé, me da cosa. Ya, ya, ya lo sé, pero me harías un gran favor. Es que es una estantería
muy pesada y no puedo llevarla en metro o en autobús. La verdad que te entiendo, eh, pero es que a veces ya he dejado el coche y me sabe mal pedírtelo, de verdad, pero te prometo que voy a tener mucho cuidado. Además, solo para un par de horas. A ver, eh, ¿cuándo lo necesitas? Cuando tú me digas. El viernes, por ejemplo, por la mañana. Ay, no sé, Miguel. Es que de verdad, es que además conduces fatal y me da un miedo. Bueno, he mejorado mucho, ¿eh? En serio. ¿Tú crees? Bueno, a ver, eh, vamos a
hacer una cosa. ¿Qué te parece si vamos el viernes, pero conduzco yo, así me quedo más tranquila. Vale. Sí, muchas gracias, pero de verdad, ¿no te importa? No. Hola, buenos días. Estamos haciendo una encuesta para la radio joven. Os quería hacer unas preguntas. ¿Estáis llegando de vuestras vacaciones? Sí, sí, acabamos de llegar. Estamos cansadísimos. Ya me imagino. ¿Y de dónde venís? Hemos estado en Chile. Ah, ¿y qué tal? Bien, muy bien. Hemos recorrido casi todo el país. Hemos estado en Santiago de Chile, en Valparaíso, en Tierra de Fuego, en Los Andes. ¿Qué habéis visto en
Los Andes? Hemos estado en la zona del volcán Osorno y es una zona superbonita. ¿Y habéis estado en más sitios, alguna isla? Sí, hemos ido a la isla de Pascua y también hemos estado en la isla de Chiloé. ¡Qué bien! Es bonita. Preciosa. ¿Y la comida, ¿qué tal? ¿Qué habéis comido? Bueno, pues muchas empanadas, pescado, la comida está muy buena. Gracias por escuchar este episodio de español en tus oídos. Te felicitamos por integrar el español a tu día de forma pasiva, natural y sin esfuerzo. Estás entrenando tu oído con voces reales, acentos auténticos y situaciones
cotidianas para comprender mejor los diálogos, repasar vocabulario y estudiar con más profundidad. Descarga gratis el PDF con todas las transcripciones. Te ayudará mucho a avanzar con confianza. Nos encanta acompañarte mientras trabajas, cocinas o descansas. Hay nuevos episodios todas las semanas, así que si quieres seguir aprendiendo, suscríbete al canal y activa la campanita para no perderte ningún episodio. Muchas gracias por estar ahí. Hasta la próxima. Yeah.