el sonido de la lluvia golpeando contra los cristales de la ventana parecía acompañar El ritmo acelerado de mi corazón allí estaba yo de pie en medio del pasillo de nuestra Modesta casa en las afueras de Sevilla con las luces parpadeantes proyectando sombras inquietas sobre las paredes descoloridas frente a mí sentado en el viejo sofá de cuero que habíamos comprado en nuestros primeros años de matrimonio estaba Rodrigo su mirada fría y distante me atravesaba como si yo fuera invisible como si las lágrimas que corrían por mis mejillas no significará nada para él Rodrigo por favor supliqué
mi voz quebrándose con cada palabra es nuestra hija nuestra pequeña Sofía necesita ayuda urgente Necesita ir al hospital ahora mismo el silencio que siguió a mis palabras fue ensordecedor Sofía nuestra niña de apenas 4 años yacía en su habitación su pequeño cuerpo Ardiendo en fiebre podía escuchar su respiración entrecortada incluso desde aquí un recordatorio constante de lo frágil que era su situación el drct Sánchez un hombre amable con ojos cansados y una barba canosa nos había visitado esa misma tarde sus palabras aún resonaban en mi mente la niña necesita tratamiento hospitalario inmediato la neumonía Está
avanzando rápidamente luego con una mirada compasiva había añadido sé que es costoso pero no hay otra opción si quieren que la pequeña se recupere costó esa palabra me había golpeado como un puño en el estómago con mi trabajo de media jornada en la librería del barrio y los gastos crecientes del hogar apenas llegábamos a fin de mes Cómo íbamos a pagar un tratamiento hospitalario haré lo que sea continué dando un paso hacia Rodrigo pediré un préstamo trabajaré horas extra lo que haga falta pero necesito tu apoyo Rodrigo necesitamos tu ayuda vi como sus hombros se
tensaba bajo la camisa arrugada que llevaba puesta desde la mañana lentamente se levantó del sofá su figura alta y delgada proyectando una sombra alargada sobre mí por un momento un Destello de esperanza se encendió en mi pecho quizás ahora entendería quizás ahora reaccionaría pero esa esperanza se desvaneció tan rápido como había aparecido cuando vi la sonrisa fría que se dibujó en su rostro no era la sonrisa cálida y de amor que me había enamorado hace años en aquella feria de abril Bajo el cielo estrellado de Andalucía no esta era una sonrisa que no reconocía una
que me helaba la sangre Lucía dijo su voz calmada y controlada como si estuviera discutiendo el clima y no la vida de nuestra hija ya no hay espacio para personas enfermas en mi vida ni para ti ni para esa niña que solo trae desgracias sus palabras me golpearon Como una bofetada sentí que el aire abandonaba mis pulmones y que el suelo bajo mis pies se tambaleaba Cómo podía decir algo así cómo podía referirse a Sofía nuestra pequeña princesa como una desgracia qué estás diciendo logré articular mi voz apenas un susurro es nuestra hija Rodrigo nuestra
bebé era corrigió su tono frío e impersonal era nuestra hija cuando pensábamos que sería perfecta y sana pero mírate Lucía mírate bien Estás agotada siempre preocupada siempre corriendo de un lado a otro con medicinas y visitas al médico es esta la vida que querías es esta la vida que yo quiero cada palabra era como un puñal que se clavaba en mi corazón no podía creer lo que estaba escuchando este no era el hombre con el que me había casado el hombre que había llorado de alegría cuando sostu a Sofía por primera vez en nuestros brazos
la vida no siempre es como la planeamos Rodrigo dije tratando de mantener la calma Pero eso no significa que abandonemos a quienes amamos Sofía nos necesita Ahora más que nunca Rodrigo soltó una risa seca carente de humor se pasó una mano por el pelo un gesto que solía hacer cuando estaba nervioso o frustrado pero ahora ese gesto familiar solo me pareció el movimiento de un extraño amor preguntó su voz cargada de Sarcasmo el amor no paga las facturas Lucía El amor no cura enfermedades El amor es un lujo que ya no podemos permitirnos se dirigió
hacia la puerta principal tomando su chaqueta del perchero por un momento pensé que iba a salir a alejarse de esta conversación de esta realidad pero en lugar de eso se giró hacia a mí sus ojos fríos y determinados fuera dijo sampe señalando la puerta arreglen sus vidas lejos de mí me quedé paralizada incapaz de procesar lo que estaba sucediendo nos estaba echando a mí y a nuestra hija enferma no puedes hablar en serio dije mi voz temblando dónde se supone que iremos eso ya no es mi problema respondió su voz carente de emoción tienes Hasta
mañana para recoger tus cosas y las de la niña después de eso cambiaré las cerraduras en ese momento un gemido débil proveniente de la habitación de Sofía rompió el silencio tenso que había caído entre nosotros era como si nuestra pequeña Incluso en su estado febril pudiera sentir que algo estaba terriblemente mal corría hacia su habitación dejando a Rodrigo en el pasillo Sofía estaba acurrucada en su pequeña su rostro enrojecido por la fiebre y su respiración aún más laboriosa que antes la tomé en mis brazos sintiendo el calor que emanaba de su cuerpecito es ch mi
amor susurré volví al pasillo con Sofía en brazos esperando contra toda Esperanza que ver a su hija en este estado hiciera que Rodrigo recapacitara pero cuando salí Me encontré con un pasillo vacío Rodrigo se había ido dejando tras de Sí solo el eco de sus crueles palabras y el peso aplastante de nuestra nueva realidad me senté en el sofá abrazando a Sofía contra mi pecho las lágrimas corriendo libremente por mi rostro a través de la ventana podía ver El pequeño columpio que Rodrigo había construido para Sofía en el jardín el verano pasado ahora se balanceaba
suavemente con el viento un recordatorio doloroso de tiempos más felices mientras la noche caía sobre Sevilla y las luces de la ciudad comenzaban a parpadear en la distancia me di cuenta de que para nosotras dos ya no quedaba amor ni refugio en este hogar teníamos que irnos teníamos que encontrar una manera de sobrevivir por nuestra cuenta con cuidado comencé a empacar una pequeña maleta con Lo esencial ropa para y para mí sus medicamentos y el viejo oso de peluche que no podía dormir sin él Cada objeto que metía en la maleta era un recordatorio de
la vida que estábamos dejando atrás de los sueños que se desmoronaba a nuestro alrededor mientras empacaba mi mente daba vueltas tratando desesperadamente de encontrar una solución a dónde iríamos mis padres habían fallecido hace años en un accidente de tráfico y las pocas amistades que tenía se habían alejado gradualmente a medida que el cuidado de consumía más y más de mi tiempo la ciudad que siempre me había parecido acogedora y llena de vida ahora se presentaba ante mí como un lugar hostil e indiferente las calles que una vez recorrí con alegría ahora parecían Laberintos interminables llenos
de peligros desconocidos cuando terminé de empacar me senté en el borde de la cama de Sofía observando su rostro mientras dormía intranquila su pequeña frente estaba arrugada como si Incluso en sueños pudiera sentir la angustia Que nos rodeaba te prometo que vamos a salir adelante mi niña susurré acariciando suavemente su mejilla mamá va a encontrar una manera pero mientras pronunciaba esas palabras sentía el peso de la incertidumbre aplastándolo tembloroso me levanté y miré por última vez la habitación que había sido nuestro Refugio durante tantos años cada Rincón guardaba un recuerdo el lugar donde Sofía dio
sus primeros pasos donde leímos juntas sus primeros cuentos donde compartimos risas y llantos tomé la maleta con una mano y a Sofía con la otra y con pasos lentos y pesados me dirigí hacia la puerta principal cada paso era una lucha cada metro que nos alejaba de nuestro hogar era un dolor agudo en mi pecho al llegar a la puerta me detuve un momento giré la cabeza esperando contra toda Esperanza ver a Rodrigo allí arrepentido pidiéndonos que nos quedáramos pero el pasillo estaba vacío silencioso indiferente a nuestro dolor con un último suspiro Abrí la puerta
y salí a la noche sevillana el aire fresco de la primavera acarició nuestros rostros trayendo consigo el aroma de los naranjos en flor en cualquier otra circunstancia habría sido una noche hermosa para un paseo mientras caminábamos por las calles empedradas del barrio iluminadas por la tenue luz de las farolas sentí que cada paso nos alejaba no solo de nuestro hogar sino de la vida que habíamos conocido hasta ahora éramos como dos pequeñas hojas arrastradas por un viento implacable sin saber dónde nos llevaría el destino pero a pesar del miedo y la incertidumbre sentía una determinación
creciendo en mi interior Sofía me necesitaba fuerte me necesitaba Valiente y por ella Estaba dispuesta a enfrentar cualquier obstáculo que se nos presentara Mientras nos alejamos las luces de nuestra antigua casa se perdieron en la distancia y con ellas una parte de nuestras vidas pero en medio de la oscuridad de esa noche mientras sostenía mi hija contra mi pecho sentí que también nacía algo nuevo una fuerza que no sabía que tenía una determinación feroz de proteger y cuidar a mi pequeña sin importar lo que el destino nos deparará y así con pasos inciertos pero decididos
Sofía y yo nos adentramos en la noche sevillana hacia un futuro desconocido pero nuestro un futuro que aunque incierto enfrentarías juntas con amor y valentía las calles de Sevilla normalmente llenas de vida y color parecían ahora un laberinto interminable de sombras y miedos el reloj de la giralda marcaba a las 2 de la madrugada cuando llegué exhausta y desorientada al parque de María Luisa mis pies dolían después de horas de caminar sin rumbo cargando a Sofía y nuestra pequeña maleta el parque que durante el día Era uno Asis de verdor y alegría se había transformado
en un lugar sombrío y amenazante bajo la luz de la luna los árboles centenarios proyectaban sombras inquietantes y el silencio solo era interrumpido por el ocasional ulular de un bú o el crujir de las ramas movidas por la brisa nocturna me senté en un banco cerca de la Fuente de los Leones abrazando a Sofía contra mi pecho su pequeño cuerpo ardía de fiebre y su respiración era cada vez más trabajosa el miedo me atenazaba el corazón qué iba a hacer cómo iba a cuidar de mi hija sin un techo sobre nuestras cabezas sin dinero para
medicinas mamá murmuró Sofía en sueños su voz débil y quebradiza es ch mi vida susurré meciéndome que todo estaría bien cuando quiera sabía dónde pasaríamos la noche el viento frío de la madrugada sevillana se colaba por debajo de mi fino abrigo el único que había podido tomar antes de salir apresuradamente de casa Sofía tiritaba en mis brazos y yo la envolvía lo mejor que podía con la manta que había sacado de su cama Miré a mi alrededor buscando desesperadamente alguna idea alguna solución el parque estaba desierto salvo por algunas figuras sombrías que se movían en
la distancia no podía evitar pensar en todas las historias que había escuchado sobre los peligros de la noche en la ciudad cada sombra parecía una amenaza cada sonido un posible peligro mis pensamientos volaron hacia Rodrigo Cómo podía habernos hecho esto Cómo podía haber cambiado tanto el hombre que una vez me juró Amor eterno bajo el azaar de la Catedral recordé nuestros primeros años juntos llenos de risas y sueños en qué momento se había podrido todo un sollozo escapó de mi garganta y rápidamente lo ahogué para no despertar a Sofía no podía permitirme el lujo de
derrumbarme ahora mi hija me necesitaba fuerte necesitaba que encontrara una solución repasé mentalmente la lista de personas a las que podría pedir ayuda Mis padres ya no estaban Víctimas de aquel terrible accidente en la carretera a Cádiz hace años las pocas amistades que tenía se habían ido alejando gradualmente a medida que el cuidado de Sofía consumía más y más de mi tiempo Rodrigo siempre había sido celoso de mis amistades y poco a poco me había ido aislando de todos Pensé en Carmen mi vecina de toda la vida siempre había sido amable con nosotras a menudo
cuidando de Sofía cuando yo tenía que hacer algún recado Pero sabía que su situación económica era tan precaria como la mía Cómo podía pedirle que nos acogiera también estaba Manolo el dueño de la librería donde trabajaba tiempo parcial era un hombre mayor y bondadoso que siempre tenía una palabra amable para todos pero ya había sido muy generoso conmigo dándome adelantos de sueldo cuando las facturas se acumulaban no podía abusar más de su bondad las horas pasaban lentamente y el frío se hacía cada vez más intenso Sofía se agitaba en mis brazos su frente Ardiendo contra
mi pecho sabía que necesitaba atención médica urgente Pero cómo iba a pagarla Fue entonces cuando recordé algo un detalle que había pasado por alto en medio del caos y la desesperación de las últimas horas Rodrigo siempre había sido meticuloso casi obsesivo con su seguridad yo conocía algunos de sus secretos pequeños detalles que había ido descubriendo a lo largo de los años sabía por ejemplo que guardaba una cantidad considerable de dinero en efectivo en una caja fuerte oculta detrás de un cuadro en su despacho para emergencias solía decir Bueno si esto no era una emergencia no
sabía que podría serlo también conocía sus horarios sus movimientos sabía que los martes y jueves salía temprano de casa para ir al gimnasio antes de ir a la oficina y mañana era martes una idea comenzó a formarse en mi mente era arriesgada peligrosa incluso pero mientras miraba el rostro pálido y sudoroso de supe que no tenía otra opción Rodrigo siempre me había subestimado tratándome como si fuera incapaz de tomar decisiones por mí misma pero en su arrogancia había cometido el error de revelar demasiado yo conocía las claves de sus correos electrónicos las contraseñas de sus
cuentas bancarias información que él creía que yo era demasiado tonta para recordar o utilizar esa noche mientras el cielo comenzaba a aclararse con las primeras luces del amanecer tomé una decisión iba a usar todo lo que sabía para salvar a mi hija Rodrigo nos había quitado todo pero desconocía hasta qué punto una madre puede llegar cuando se trata de proteger a su hija con cuidado me levanté del banco Ajustando a Sofía en mis brazos necesitaba encontrar un lugar seguro para ella mientras llevaba a cabo mi plan Fue entonces cuando vi a una mujer mayor abriendo
un pequeño kosco cerca de la entrada del parque me acerqué a ella notando la mirada de preocupación en sus ojos cuando vio mi estado y el de Sofía Buenos días dije mi voz ronca por el frío y el llanto contenido me llamo Lucía sé que esto puede sonar extraño pero podría cuidar de mi hija por unas horas Necesito resolver algo urgente y no tengo a nadie más a quien recurrir la mujer que se presentó como Rosario me miró con una mezcla de sorpresa y compasión por un momento temí que me rechazara que llamara a la
policía incluso Pero entonces Para mi sorpresa y alivio asintió lentamente claro hija dijo su voz cálida y reconfortante puedo ver que estás en apuros Deja a la niña conmigo Te prometo que estarás segura con lágrimas de gratitud en los ojos le expliqué brevemente la situación de Sofía sus medicamentos y Le prometí volver lo antes posible Rosario escuchó con atención asintiendo con comprensión Ve tranquila me dijo mientras tomaba a Sofía en sus brazos yo Cuidaré de ella como si fuera mi propia nieta con el corazón encogido besé la frente Ardiente de Sofía y le susurré que
mamá volvería pronto ella abrió los ojos brevemente esbozando una débil sonrisa antes de volver a dormirse en los brazos de Rosario mientras me alejaba del parque sentía una mezcla de determinación miedo lo que estaba a punto de hacer era arriesgado quizás incluso ilegal pero mientras pensaba en Sofía en su necesidad urgente de atención médica supe que no tenía otra opción el sol comenzaba a asomarse sobre los tejados de Sevilla cuando llegué a nuestra antigua casa las calles aún estaban desiertas lo cual jugaba a mi favor con el corazón la tiendo como un tambor en mi
pecho Me dirigí hacia la entrada trasera aquella que Rodrigo siempre olvidaba cer mientras me deslizaba silenciosamente por la cocina los recuerdos me asaltaron aquí habíamos compartido tantas comidas tantas risas aquí había sido feliz una vez Pero ahora todo eso parecía pertenecer a otra vida a otra Lucía me dirigí al despacho de Rodrigo moviéndome con cuidado para no hacer ruido sabía que él ya se habría ido al gimnasio pero no podía arriesgarme al entrar en la habitación el olor familiar de su Colonia me golpeó trayendo consigo una mezcla de emociones que tuve que apartar rápidamente local
el cuadro detrás del cual sabía que estaba la caja fuerte con dedos temblorosos ingresé la combinación un suave clic me indicó que había acertado dentro tal como esperaba había fajos de billetes cuidadosamente apilados tomé lo que consideré necesario para el tratamiento de Sofía y para mantenernos durante un tiempo mientras lo hacía mis ojos se posaron en una carpeta la curiosidad pudo más que yo y la abrí lo que vi me dejó sin aliento eran documentos que evidenciaban transacciones ilegales contratos fraudulentos pruebas de actividades que podrían destruir la reputación de Rodrigo Si alguna vez salieran a
la luz en ese momento entendí Por qué siempre había sido tan protector con su despacho porque siempre insistía en que yo no tocara Nada aquí sin pensarlo dos veces tomé también esos documentos no sabía si los usaría pero podrían ser útiles si Rodrigo decidía venir tras nosotras con el corazón la tiendo A mil por hora salí de la casa tan silenciosamente como había entrado las calles comenzaban a llenarse de vida pero yo me sentía como si estuviera en una burbuja aislada del mundo que me rodeaba regresé al parque lo más rápido que pude Rosario me
recibió con una sonrisa cálida Sofía dormida en sus brazos ha estado tranquila me dijo pero creo que necesita ver a un médico pronto asentí Agradeciendo a Rosario con lágrimas en los ojos tomé a Sofía en mis brazos sintiendo el calor de su pequeño cuerpo contra el mío vamos mi amor susurré mamá va a cuidar de ti ahora y mientras caminaba hacia el hospital más cercano con el dinero seguro en mi bolso y los documentos escondidos en la sentí que por primera vez en mucho tiempo tenía el control de nuestro destino la noche más oscura había
pasado y aunque el camino que teníamos por delante estaba lleno de incertidumbre ahora teníamos una oportunidad una oportunidad de sobrevivir de luchar de construir una nueva vida lejos de la sombra de Rodrigo y mientras el sol se elevaba sobre Sevilla iluminando las calles con su luz dorada sentí que también iluminaba un nuevo camino para nosotras un camino difícil sin duda Pero uno que recorrería juntas Sofía y yo con la fuerza que solo el amor de una madre puede dar el Hospital Universitario Virgen del rocío se alzaba imponente frente a mí sus paredes blancas brillando bajo
el sol de la mañana sevillana con Sofía en mis brazos y el corazón latiendo con fuerza crucé las puertas de urgencias el ajetreo del hospital me envolvió de inmediato médicos y enfermeras moviéndose apresuradamente el sonido de monitores y conversaciones entrem mezclándose en un murmullo constante me acerqué al mostrador de recepción donde una enfermera de mediana edad me miró con una mezcla de preocupación y eficiencia profesional Buenos días dije mi voz temblorosa mi hija tiene fiebre alta y dificultad para respirar necesita atención urgente la enfermera cuya placa la identificaba como Carmen asintió con comprensión rápidamente tomó
los datos de Sofía y al Ver el estado de mi pequeña a un médico de inmediato en cuestión de minutos nos encontrábamos en una sala de examen la doctora marttinez una mujer joven de ojos amables y manos gentiles examinaba a Sofía con cuidado tiene una neumonía bastante avanzada dijo finalmente su voz seria pero compasiva necesitará tratamiento intravenoso y posiblemente oxígeno Tendremos que ingresarla asentí sintiendo un nudo en la garganta a pesar del miedo sentí un inmenso alivio al saber que Sofía finalmente recibiría la atención que necesitaba Cuánto Cuánto costará todo esto pregunté con voz temblorosa
pensando en el dinero que había tomado de la caja fuerte de Rodrigo la doctora Martínez me miró con simpatía No se preocupe por eso ahora lo primero es la salud de su hija hablaremos de los detalles financieros más tarde mientras preparaban a Sofía para ingresarla me senté en una silla en el pasillo sintiendo el peso de los últimos días caer sobre mí el cansancio el miedo y la incertidumbre se mezclaban en un torbellino de emociones que amenazaba con abrumar me fue Entonces cuando vi a un hombre de traje entrar apresuradamente en el área de urgencias
mi corazón dio un vuelco cuando lo reconocí era Javier el mejor amigo y socio de negocios de Rodrigo acaso Rodrigo ya había descubierto lo que había hecho y había enviado a Javier a buscarme me encogí en mi asiento tratando de pasar desapercibida pero fue en vano los ojos de Javier se posaron en mí Para mi sorpresa se acercó con una expresión de genuina preocupación Lucía dijo sentándose a mi lado qué ha pasado Rodrigo me llamó esta mañana estaba furioso diciendo que habías entrado en la casa y robado dinero y documentos sentí que el pánico se
apoderaba de mí qué podía decir cómo podía explicar lo que había hecho sin parecer una delincuente Javier Yo comencé pero las palabras se me atascaron en la garganta él levantó una mano interrumpiéndome suavemente no necesitas explicarme nada ahora vi a Sofía cuando entraste Cómo está la preocupación en su voz parecía genuina y sentí que las lágrimas que había estado conteniendo comenzaban a fluir tiene neumonía logré decir entre sollozos la están ingresando Ahora yo no sabía qué más hacer Rodrigo nos echó de casa no teníamos a dónde ir y Sofía estaba tan enferma Javier me escuchó
en silencio su expresión cambiando de la preocupación a la indignación a medida que le contaba todo lo que había sucedido en los últimos días cuando terminé se quedó en silencio por un momento como si estuviera procesando toda la información Lucía dijo finalmente su voz suave pero firme lo que has pasado nadie debería pasar por algo así lo que hizo Rodrigo es imperdonable sus palabras me sorprendieron había esperado que tomara el lado de Rodrigo que me acusara de ladrona que amenazara con Llamar a la policía en cambio veía comprensión y algo más en sus ojos culpa
quizás hay algo que debes saber continuó Javier la voz esos documentos que tomaste son más importantes de lo que crees Rodrigo no ha estado haciendo negocios limpios últimamente mi mente daba vueltas tratando de procesar esta nueva información Rodrigo involucrado en negocios turbios siempre había sido ambicioso Sí pero nunca imaginé que cruzaría la línea de la legalidad qué quieres decir pregunté mi voz apenas un susurro Javier miró a su alrededor asegurándose de que nadie nos estuviera escuchando contratos fraudulentos evasión de impuestos sobornos la lista es larga yo yo sabía que algo no estaba bien pero no
quise ver la verdad hasta ahora la revelación me golpeó como un puño en el estómago de repente todas las largas horas de trabajo de Rodrigo sus viajes repentinos sus cambios de humor todo cobraba un y siniestro significado qué voy a hacer ahora pregunté más a mí misma que a Javier él puso una mano reconfortante en mi hombro por ahora concéntrate en Sofía yo me encargaré de Rodrigo no te preocupes por el dinero del hospital yo lo cubriré lo miré sorprendida por su generosidad Pero por qué harías eso Javier sonrió tristemente porque es lo correcto y
porque de alguna manera me siento responsable por no haber detenido a Rodrigo antes en ese momento la doctora Martínez se acercó a nosotros señora hemos instalado a Sofía en una habitación pueden pasar a verla ahora me levanté sintiéndome repentinamente ligera como si un gran peso hubiera sido levantado de mis hombros Javier se levantó conmigo ve con tu hija dijo yo me ocuparé de todo lo demás y Lucía ten cuidado Rodrigo no se va a quedar de brazos cruzados asentí agradecida por su ayuda y advertencia mientras seguía la doctora hacia la habitación de Sofía sentí que
estaba entrando en un nuevo capítulo de mi vida un capítulo lleno de incertidumbre Sí pero también de Esperanza la habitación de Sofía era pequeña pero acogedora conare de un suave tono pastel y una ventana que dejaba entrar la luz del Sol Mi pequeña yacía en la cama pareciendo aún más frágil rodeada de máquinas y tubos pero su respiración ya parecía más tranquila me senté junto a su cama tomando su manita entre las mías Estoy aquí mi amor susurré mamá está aquí y no va a dejarte mientras observaba a mi hija pensé en todo lo que
habíamos pasado en las últimas 24 horas habíamos perdido nuestro hogar habíamos dormido en un parque había robado a mi propio marido y ahora de alguna manera habíamos encontrado un Aliado inesperado los días siguientes pasaron en un borrón de visitas médicas tratamientos y largas horas de espera poco a poco Sofía comenzó a mejorar su fiebre bajó su respiración se hizo más fácil y finalmente después de lo que pareció una eternidad pude ver una sonrisa en su rostro Javier cumplió su palabra no solo se encargó de los gastos del hospital sino que también me ayudó a encontrar
un pequeño apartamento donde Sofía y yo podríamos quedarnos una vez que le dieran el alta me aseguró que Rodrigo no nos molestaría aunque no entró en detalles sobre cómo había logrado eso Una tarde mientras Sofía dormía pacíficamente en su cama de hospital recibi una visita inesperada era Gabriela la esposa de otro de Los Socios de Rodrigo siempre habíamos tenido una relación cordial pero Así que su presencia me sorprendió Lucía dijo sentándose a mi lado Javier me contó lo que pasó lo siento mucho asentí sin saber qué decir Gabriela continuó su voz suave pero decidida quiero
ayudarte esos documentos que tomaste pueden ser la clave para detener a Rodrigo y a todos los involucrados en sus negocios sucios la miré sorprendida Pero por qué me ayudarías pensé que tú y tu marido Gabriela sonrió tristemente mi marido está tan metido en esto como Rodrigo Llevo años tratando de reunir pruebas de encontrar una manera de detenerlos y ahora Gracias a ti tenemos una oportunidad me explicó que trabajaba en secreto con un grupo de abogados y periodistas que investigaban la corrupción empresarial los documentos que yo había tomado podrían ser la pieza final del rompecabezas que
necesitaban para llevar el caso ante la justicia pero necesito que confíes en mí Lucía dijo Gabriela sus ojos fijos en los míos sé que es mucho pedir especialmente después de todo lo que has pasado pero juntas podemos asegurarnos de que Rodrigo y los demás paguen por lo que han hecho Miré a Sofía durmiendo pacíficamente en su cama Pensé en todo lo que habíamos sufrido en el miedo y la incertidumbre que habíamos vivido Y entonces tomé mi decisión te ayudaré dije volviéndome hacia Gabriela por Sofía por mí y por todas las personas a las que Rodrigo
y los demás han lastimado Gabriela sonrió un brillo de determinación en sus ojos Gracias Lucía juntas vamos a cambiar las cosas mientras Gabriela y yo comenzábamos a planear nuestro siguiente movimiento sentí una me de miedo y emoción sabía que el camino por delante sería difícil y peligroso pero por primera vez en mucho tiempo sentí que tenía un propósito una misión Más allá de simplemente sobrevivir Miré a Sofía una vez más su pequeño pecho subiendo y bajando con cada respiración tranquila por ella por nuestro futuro Estaba dispuesta a enfrentar cualquier desafío que se presentara el plan
estaba en marcha y no había vuelta atrás la Lucía que una vez había sido una una esposa sumisa y una madre desesperada estaba desapareciendo y en su lugar emergía una mujer fuerte decidida a luchar por la justicia y por un futuro mejor para su hija mientras el sol se ponía sobre Sevilla tiniendo el cielo de tonos dorados y rosados sentí que también se ponía el sol sobre mi antigua vida y con el nuevo día vendría un nuevo comienzo lleno de desafíos pero también de Esperanza los días en el hospital Se convirtieron en semanas y poco
a poco Sofía fue recuperando sus cada mañana al entrar en su habitación y ver su sonrisa sentía que toda la lucha valía la pena sin embargo a medida que su salud mejoraba la realidad de nuestra situación comenzaba a pesar sobre mis hombros una tarde mientras Sofía dormía plácidamente me encontré Mirando por la ventana del hospital hacia las calles bulliciosas de Sevilla el aroma azar flotaba en el aire recordándome que la vida seguía su curso fuera de estas paredes blancas qué haríamos cuando nos dieran el alta Cómo podría mantener a mi hija y protegerla de Rodrigo
fue en ese momento cuando escuché un suave golpe en la puerta al girarme vi a Gabriela entrando silenciosamente en la habitación Lucía susurró acercándose a mí cómo está Sofía mejor respondí con una pequeña sonrisa los médicos dicen que podrá irse a casa en unos días Gabriela asintió pero pude ver la preocupación en sus ojos y tú cómo estás llevando todo esto su pregunta me tomó por sorpresa hacía tanto tiempo que nadie Se preocupaba por mí que por un momento no supe qué responder yo estoy Sobreviviendo dije finalmente sintiendo como las lágrimas comenzaban a acumularse en
mis ojos pero tengo miedo Gabriela no sé qué vamos a hacer cuando salgamos de aquí Gabriela me tomó de las manos su agarre firme y reconfortante por eso estoy aquí Lucía he estado trabajando en algo y creo que tengo una solución al menos temporal me explicó que había hablado con algunas personas influyentes que conocía mujeres que habían pasado por situaciones similares o que simplemente querían ayudar entre todas habían logrado reunir los fondos necesarios para alquilar noos un pequeño apartamento en el barrio de Triana por unos meses es un lugar seguro me aseguró Gabriela Rodrigo no
lo conoce y estará a nombre de una fundación no del tuyo además he conseguido un trabajo para ti en una pequeña editorial no es mucho pero te permitirá mantenerte a ti y a Sofía mientras resolvemos todo este lío me quedé sin palabras abrumada por su generosidad Gabriela yo no sé cómo agradecerte todo esto ella sonrió apretando suavemente mis manos no tienes que agradecerme nada somos mujeres Lucía debemos apoyarnos las unas a las otras además añadió su expresión volviéndose seria lo que estás haciendo al ayudarnos con esos documentos es mucho más valioso de lo que te
imaginas los días siguientes pasaron en un torbellino de actividad con la ayuda de Gabriela y su red de apoyo logré preparar todo para nuestra salida del hospital El día que finalmente le dieron el alta a Sofía sentí una mezcla de alivio y aprensión mientras empacaba las pocas pertenencias que teníamos una enfermera entró en la habitación La reconocí como Carmen la enfermera que nos había recibido aquel primer día en urgencias Lucía dijo con una sonrisa amable quería despedirme de ustedes antes de que se fueran Gracias por todo Carmen respondí sintiéndome genuinamente agradecida por su cuidado y
atención ante nuestra Estancia Carmen se acercó y Para mi sorpresa me dio un abrazo eres una mujer fuerte Lucía susurró no lo olvides nunca sus palabras me conmovieron más de lo que esperaba cuando nos separamos vi que tenía lágrimas en los ojos toma dijo entregándome un pequeño papel es mi número de teléfono Si alguna vez necesitas algo lo que sea llámame todas debemos cuidarnos entre nosotras asentí incapaz de hablar por el nudo en mi garganta en ese momento Sofía se despertó sus grandes ojos marrones mirando con curiosidad a su alrededor nos vamos a casa mamá
preguntó con su vocecita todavía débil Sí mi amor respondí acercándome a ella y acariciando su mejilla vamos a nuestra nueva casa el viaje en hasta el apartamento en Triana fue corto pero lleno de emociones Sofía miraba por la ventana con asombro señalando los edificios coloridos y las calles empedradas yo por mi parte no podía dejar de mirar por el espejo retrovisor temiendo ver en cualquier momento el coche de Rodrigo siguiéndonos Cuando llegamos al apartamento me sorprendí gratamente era pequeño Sí pero luminoso y acogedor Gabriela nos estaba esperando en la puerta una sonrisa cálida en su
rostro bienvenidas a su Nuevo Hogar dijo abriendo la puerta el interior era sencillo pero cómodo había una pequeña sala de estar que se conectaba con una cocina abierta un baño y dos dormitorios pequeños lo que más me impresionó fue que ya estaba amueblado con lo básico una mesa con sillas un sofá camas Gabriela esto es comencé sin saber cómo expresar mi gratitud es lo mínimo que podíamos hacer interrumpió ella agachándose para estar a la altura de Sofía te gusta tu nueva casa pequeña Sofía sintió entusiasmada sus ojos brillando de una manera que no había visto
en semanas puedo ver mi habitación preguntó mirándome con esperanza Claro que sí cariño respondí sintiendo como se me formaba un nudo en la garganta ve a explorar mientras Sofía corría o más bien caminaba amente aún débil por su enfermedad a ver su nueva habitación me volví hacia Gabriela no sé cómo voy a poder pagarte todo esto dije sintiendo el peso de la deuda que estaba acumulando Gabriela negó con la cabeza no tienes que pagarme nada Lucía como te dije esto es parte de una red de apoyo todas las mujeres que han contribuido lo han hecho
de corazón sin esperar nada a cambio me explicó que el grupo que había ayudado inclu a mujeres de todos los ámbitos desde exitosas empresarias hasta amas de casa pasando por profesionales y artistas todas ellas habían sido tocadas de alguna manera por historias como la mía y querían hacer la diferencia además añadió Gabriela con una sonrisa pícara no creas que esto es completamente altruista tu ayuda con los documentos que tomaste de Rodrigo es invaluable estamos más cerca que nunca de exponer toda la red de corrupción esa noche después de acostar a Sofía en su nueva cama
que para su deleite tenía sábanas con dibujos de princesas Me senté en el pequeño balcón del apartamento Desde allí podía ver el río Guadalquivir sus aguas reflejando las luces de la ciudad Pensé en todo lo que había pasado en las últimas semas en como mi vida había dado un giro de 180 gr hacía un mes era una esposa y madre atrapada en un matrimonio que se desmoronaba sin saber cómo salir de esa situación Ahora aunque aún teníamos un largo camino por recorrer sentía que por fin teníamos una oportunidad el sonido de mi teléfono me sacó
de mis pensamientos era un mensaje de Carmen la enfermera Espero que estén bien instaladas Recuerda si necesitas algo estoy aquí eres más fuerte de lo que crees Lucía sonreí sintiendo una calidez en el pecho quizás era cierto que era más fuerte de lo que creía Y definitivamente no estaba sola al día siguiente empecé mi nuevo trabajo en la editorial era un puesto sencillo principalmente organizando manuscritos y haciendo algunas tareas administrativas pero me permitía tener un horario flexible para cuidar de Sofía mi jefa una mujer llamada Elena resultó ser otra pieza más de esta red de
apoyo que se había formado a mi alrededor el primer día me llamó a su oficina para hablar Lucía dijo mirándome con una mezcla de comprensión y determinación Quiero que sepas que entendemos tu situación este trabajo no es solo un trabajo es un refugio Si alguna vez necesitas salir temprano o si necesitas traer a Sofía contigo no dudes en hacerlo sus palabras me conmovieron profundamente Gracias Elena no sé qué decir No tienes que decir nada respondió con una sonrisa solo haz tu trabajo lo mejor que puedas y recuerda que aquí Estás segura los días se convirtieron
en semanas y poco a poco Sofía y yo fuimos adaptándonos a nuestra nueva vida cada mañana la llevaba a una guardería cerca de la editorial antes de ir al trabajo por las tardes pasábamos tiempo juntas en nuestro pequeño apartamento paseando por las orillas del Guadalquivir Sofía parecía florecer en este nuevo ambiente su risa que había estado ausente durante tanto tiempo volví a llenar nuestros días verla jugar en los parques de Triana hacer amigos en la guardería me llenaba de una alegría que hacía mucho no sentía sin embargo la sombra de Rodrigo siempre estaba presente en
el fondo de mi mente sabía que no se quedaría de brazos cruzados que en algún momento intentaría algo pero por ahora gracias a la protección legal que Gabriela y su equipo habían conseguido estábamos a salvo una tarde mientras Sofía dibujaba en la mesa de la cocina recibe una llamada de Gabriela Lucía dijo su voz llena de emoción tenemos noticias los documentos que nos proporcionaste han sido la clave hemos logrado presentar una denuncia formal contra Rodrigo y sus socios la policía está investigando ahora mismo sentí una mezcla de alivio y miedo por fin se estaba haciendo
justicia Pero sabía que esto también significaba que la situación se volvería más peligrosa Qué significa esto para nosotras pregunté Mirando a Sofía ajena a todo mientras coloreaba con entusiasmo significa que estamos un paso más cerca de la libertad respondió Gabriela pero también significa que debemos ser más cuidadosas que nunca No te preocupes Lucía Te prometo que no estás sola en esto esa noche después de acostar a Sofía volví a sentarme en el balcón miré hacia el río hacia la ciudad que nos había acogido en nuestro momento más oscuro Pensé en todas las mujeres que nos
habían tendido una mano Gabriela Carmen Elena y tantas otras cuyos nombres ni siquiera conocía me di cuenta de que por primera vez en mucho tiempo sentía Esperanza teníamos un largo camino por delante lleno de desafíos y peligros pero ya no estábamos solas teníamos una red de apoyo un ejército de mujeres fuertes y valientes que estaba estaban dispuestas a luchar con nosotras mientras las luces de Sevilla brillaban en la distancia hice una promesa silenciosa no solo lucharía por Sofía y por mí sino por todas las mujeres que alguna vez se habían sentido atrapadas sin salida porque
ahora sabía que siempre hay una salida siempre hay esperanza siempre que nos mantengamos unidas con esa promesa en mi corazón me fui a dormir lista para enfrentar lo que el mañana pudiera traer porque ahora sabía que pasara lo que pasara no estaríamos solas El Amanecer en Sevilla siempre había sido mi momento favorito del día la luz dorada bañando las calles empedradas el aroma del café recién hecho mezclándose con el perfume de los naranjos en flor pero esa mañana mientras preparaba el desayuno para Sofía el aire parecía cargado de una tensión inusual encendí la pequeña televisión
de la cocina más por costumbre que por verdadero interés sin embargo las palabras del presentador del noticiero matutino me dejaron paralizada última hora la policía ha llevado a cabo una serie de redadas en varias empresas de la ciudad incluyendo la constructora Rodrigo Sánchez e hijos se sospecha de una red de corrupción y fraude a gran escala el sonido de la taza que se me cayó de las manos sobresaltó a Sofía que entró corriendo a la cocina mamá estás bien preguntó sus grandes ojos marrones llenos de preocupación asentí mecánicamente incapaz de apartar la vista de la
pantalla donde ahora mostraban imágenes de Rodrigo siendo escoltado por la policía su rostro una máscara de Furia e incredulidad Sí mi amor logré decir Finalmente solo se me resbaló la taza ve a terminar de vestirte Sí hoy te llevaré yo misma a la guardería Tan pronto como Sofía salió de la cocina marqué el número de Gabriela con manos temblorosas Ya lo has visto verdad fue lo primero que dijo al contestar sí respondí en un susurro Qué significa esto Gabriela estamos estamos a salvo hubo un momento de Silencio Al otro lado de la línea antes de
que Gabriela respondiera por ahora sí la policía está centrada en Rodrigo y sus socios principales pero Lucía Necesito que estés preparada es posible que quieran hablar contigo en algún momento sentí un escalofrío recorrer mi espalda la idea de tener que enfrentarme a Rodrigo aunque fuera en un juzgado me aterrorizaba y si me acusa de robo pregunté el miedo evidente en mi voz Yo yo tomé ese dinero y esos documentos tranquila me interrumpió Gabriela tenemos todo cubierto recuerda esos documentos han sido clave para destapar toda esta trama eres más una informante que una ladrona además tenemos
pruebas de cómo te trató de cómo te echó a la calle con una niña enferma ningún juez Se pondrá de su lado sus palabras me tranquilizaron un poco pero aún sentía un nudo en el estómago toda esta situación parecía irreal como si estuviera viviendo la vida de otra persona Gabriela dije después de un momento Gracias por todo no tienes que hacme nada respondió ella con calidez somos un equipo recuerdas ahora ve lleva a Sofía a la guardería y luego ve al trabajo intenta que todo parezca normal te mantendré informada de cualquier novedad después de dejar
a Sofía en la guardería me dirigí a la editorial Elena mi jefa me recibió con una mirada de comprensión si necesitas tomarte el día libre lo entenderé me dijo en voz baja negué con la cabeza prefiero estar ocupada respondí Además tengo que mantener las apariencias no Elena asintió dándome un apretón en el hombro antes de volver a su oficina el día transcurrió en una especie de niebla revisaba manuscritos organizaba reuniones respondía correos electrónicos pero mi mente estaba en otra parte cada vez que sonaba un teléfono Cada vez que algui entraba a la oficina sentía que
mi corazón se detenía por un momento fue cerca del mediodía cuando Recibí una llamada que me Elo la sangre era un número desconocido diga contesté con voz temblorosa Lucía la voz de Rodrigo fría y controlada me provocó un escalofrío sé que fuiste tú Sé que me traicionaste sentí que me faltaba el aire Cómo había seguido mi número Rodrigo Yo cállate me interrumpió no quiero oír tus excusas Solo quiero que sepas que esto no ha terminado puede que ahora pienses que has ganado pero te encontraré a ti y a la niña y entonces no llegué a
escuchar el resto de su amenaza con manos temblorosas colgué el teléfono y lo apagué me quedé sentada en mi escritorio sintiendo que el mundo giraba a mi alrededor Elena debió notar mi estado porque se acercó rápidamente Lucía qué pasa Estás pálida le conté sobre la llamada las palabras saliendo atropelladamente de mi boca Elena escuchó con atención su expresión volviéndose más seria con cada palabra vamos dijo finalmente tomando su bolso Te llevaré a la comisaría necesitas reportar esto inmediatamente el resto de la tarde pasó en un torbellino de declaraciones policiales y llamadas a Gabriela la policía
tomó muy en serio La amenaza de Rodrigo especialmente considerando la magnitud del caso de corrupción que estaban investigando señora me dijo un inspector mientras tomaba mi declaración quiero que sepa que está haciendo lo correcto su testimonio y esos documentos que proporcionó son cruciales para este caso asentí sintiendome mi agotada pero extrañamente en calma por primera vez desde que todo esto había comenzado sentía que estaba del lado correcto de la ley cuando finalmente pude recoger a Sofía de la guardería el sol ya se estaba poniendo sobre Sevilla Mi pequeña me recibió con un abrazo ajena a
todo el caos que nos rodeaba mamá podemos ir al parque preguntó con esa inocencia que solo los niños poseen Miré a mi alrededor notando por primera vez a la gente de polic De paisano que nos habían asignado como protección él asintió levemente indicándome que era seguro claro que sí mi amor respondí tomando su manita Vamos al parque mientras Sofía jugaba en los columpios yo me senté en un banco cercano observándola el agente se mantenía a una distancia discreta vigilante pero no intrusivo fue en ese momento viendo a mi hija reír y jugar despreocupadamente cuando realmente
sentí el peso de todo lo que estaba sucediendo habíamos pasado de ser víctimas a ser parte activa en la búsqueda de Justicia ya no estábamos huyendo estábamos plantando cara esa noche después de acostar a Sofía recib otra llamada de Gabriela Lucía tengo noticias dijo su voz cargada de emoción la investigación Está avanzando rápidamente los documentos que proporcionaste han llevado a la policía descubrir una red de corrupción mucho más grande de lo que imaginábamos no es solo Rodrigo y sus socios inmediatos hay políticos involucrados funcionarios de alto Rango escuché en silencio sintiendo una mezcla de asombro
y temor En qué nos habíamos metido Qué significa esto para nosotras pregunté finalmente significa que estás bajo la protección total del estado ahora respondió Gabriela eres una testigo clave en uno de los casos de corrupción más grandes de la historia reciente de España Rodrigo puede amenazar todo lo que quiera pero no podrá tocarte sus palabras deberían haberme tranquilizado pero solo sirvieron para hacerme más consciente del peligro en el que nos encontrábamos Gabriela dije mi voz apenas un susurro tengo miedo lo sé Lucía respondió ella con suavidad y Es normal tener miedo pero recuerda por qué
estamos haciendo esto por Sofía por ti por todas las personas que han sido Víctimas de hombres como Rodrigo estamos cambiando las cosas Lucía estamos haciendo historia después de colgar me quedé despierta durante horas Mirando por la ventana hacia las luces de Sevilla Pensé en todo lo que había pasado en los últimos meses en como mi vida había dado un giro tan dramático a la mañana siguiente desperté con El sonido del timbre al abrir la puerta me encontré cara a cara Con Rodrigo por un momento sentí que mi corazón se detenía Pero entonces noté las esposas
en sus muñecas y a los dos policías que lo flanqueaban Lucía dijo su voz una mezcla de rabia y desesperación por favor Tienes que ayudarme Diles que todo fue un malentendido que esos documentos no significan nada lo miré realmente lo miré y me di cuenta de que el hombre que una vez había amado el hombre que me había hecho tanto daño ahora parecía pequeño y patético Lo siento Rodrigo dije sorprendiéndome a mí misma con la calma en mi voz pero ya no puedo ayudarte ya no puedo protegerte de las consecuencias de tus acciones vi como
la comprensión se reflejaba en sus ojos por primera vez creo que realmente me vio no como su esposa sumisa no como la madre de su hija sino como como una mujer fuerte capaz de enfrentarse a él Vámonos Dijo uno de los policías tirando suavemente del brazo de Rodrigo mientras se lo llevaban sentí como si un peso enorme se levantara de mis hombros La pesadilla no había terminado lo sabía aún quedaba un largo camino por recorrer pero por primera vez en mucho tiempo sentí que podía respirar libremente cerré la puerta y me apoyé contra ella dejando
que las lágrimas fluyeran libremente eran Lágrimas de alivio de miedo de Esperanza mamá la voz somnolienta de Sofía me sacó de mis pensamientos me sequé rápidamente las lágrimas y me giré hacia ella con una sonrisa Buenos días mi amor dije acercándome para abrazarla Qué te parece si hoy hacemos tortitas para desayunar mientras Sofía sentía entusiasmada y corría hacia la cocina sentí que una nueva etapa de nuestras vidas estaba comenzando una etapa llena de desafíos sin duda Pero también llena de posibilidades la caída de Rodrigo no era el final de nuestra historia era solo el comienzo
de una nueva vida una vida en la que ya no seríamos víctimas sino supervivientes una vida en la que pasara lo que pasara Sofía y yo estaríamos juntas fuertes y libres los meses que siguieron a la caída de Rodrigo fueron un torbellino de emociones y cambios el juicio se prolongó durante semanas cada día trayendo nuevas revelaciones sobre la magnitud de la corrupción que había estado ocurriendo bajo nuestras narices yo tuve que testificar enfrentándome cara a cara Con Rodrigo en la sala del tribunal fue uno de los momentos más difíciles de mi vida pero también uno
de los más liberadores recuerdo el día que entré en la sala del juzgado mis pasos resonando en el silencio sepulcral que se hizo cuando me vieron Rodrigo estaba allí junto a su abogado su rostro una máscara de indiferencia pero cuando nuestros ojos se encontraron vi un Destello de algo en los suyos remordimiento ira o quizás por primera vez respeto con voz Clara y firme relaté nuestra historia hablé de los años de manipulación y abuso emocional de cómo me había echado a la calle con nuestra hija enferma de cómo había descubierto los documentos que revelaban sus
actividades ilegales mi voz tembló en algunos momentos pero no aparté la mirada de los miembros del Jurado cuando terminé mi testimonio sentí como si me hubiera quitado un peso enorme de encima ya no tenía que guardar secretos ya no tenía que fingir por primera vez en años me sentí verdaderamente Libre El veredicto llegó un frío día de noviembre Rodrigo y sus socios fueron declarados culpables de todos los cargos cuando el juez anunció la sentencia una pena de prisión de varios años sentí una mezcla de alivio y tristeza alivio porque finalmente se había hecho justicia y
tristeza por el hombre que una vez había amado el padre de mi hija que ahora tendría que pagar por sus crímenes salir el juzgado esa tarde sintiéndome como si hubiera despertado de un largo y oscuro sueño Gabriela estaba allí esperándome con una sonrisa de orgullo lo lograste Lucía dijo abrazándome fuertemente has sido tan valiente pero mi mente ya estaba en otro lugar tengo que ir por Sofía dije necesito estar con mi hija Gabriela asintió comprendiendo ve yo me encargaré de los periodistas mientras conducía hacia la guardería de Sofía las calles de Sevilla parecían diferentes más
brillantes más vivas o quizás era yo la que había cambiado cuando llegué Sofía corrió hacia mí con los brazos abiertos mamá gritó con alegría podemos ir al parque hoy la abracé fuertemente inhalando su Dulce aroma champú de fresa Y crayones claro que sí mi amor respondí sintiendo como las lágrimas se acumulaban en mis ojos podemos ir donde tú quieras esa tarde mientras veía a Sofía jugar en los columpios del parque María Luisa riendo despreocupadamente me di cuenta de que realmente estábamos empezando una nueva vida una vida en la que ya no tendríamos que vivir con
miedo en la que podríamos ser simplemente una madre y su hija libres para reír jugar y soñar los días se convirtieron en semanas y las semanas en meses poco a poco fuimos construyendo nuestra nueva normalidad me quedé con el trabajo en la editorial descubriendo que realmente disfrutaba ayudando a dar vida a las historias de otros Sofía comenzó la escuela primaria haciendo nuevos amigos y llenando nuestro pequeño apartamento con sus dibujos y risas una tarde de primavera mientras paseábamos por la orilla del Guadalquivir Sofía me hizo la pregunta que sabía que eventualmente llegaría mamá cuándo volveremos
a ver a papá me detuve agachándome para estar a su altura sus grandes ojos marrones me miraban con curiosidad y un toque de tristeza tomé sus pequeñas manos entre las mías buscando las palabras adecuadas cariño comencé suavemente papá papá hizo algunas cosas que no estaban bien y ahora tiene que pasar un tiempo lejos para pensar en lo que hizo Y tratar de ser una mejor persona Sofía sintió lentamente procesando mis palabras pero lo volveremos a ver algún día sentí un nudo en la garganta si tú quieres verlo y cuando él esté listo Sí podrás verlo
respondí pero pase lo que pase Quiero que sepas que yo siempre estaré aquí para ti de acuerdo ella asintió nuevamente abrazándome fuertemente Te quiero mamá susurró Yo también te quiero mi amor respondí sintiendo como las lágrimas se deslizaban por mis mejillas Más que a nada en el mundo a medida que pasaba el tiempo nuestra vida fue tomando un nuevo ritmo las pesadillas que me habían atormentado durante meses después del juicio fueron disminuyendo ya no me sobresaltado cada vez que sonaba el teléfono o alguien tocaba a la puerta poco a poco fui Aprendiendo a confiar de
nuevo no solo en los demás sino también en mí misma Gabriela siguió siendo una presencia constante en nuestras vidas más que una amiga se había convertido en parte de nuestra familia fue ella quien me animó a empezar a escribir mi propia historia tienes tanto que compartir Lucía me dijo una tarde mientras tomábamos café en nuestra terraza tu experiencia podría ayudar a tantas otras mujeres que están pasando por situaciones similares al principio la idea me aterrorizaba Cómo podía exponer mi vida de esa manera pero Cuanto más lo pensaba más me daba cuenta de que Gabriela tenía
razón si mi historia podía dar esperanza o fuerza aunque fuera una sola mujer valdría la pena Así que comencé a escribir al principio solo eran notas sueltas recuerdos fragmentados pero poco a poco las palabras comenzaron a fluir escribía por las noches después de acostar a Sofía reviviendo cada momento de miedo de duda Pero también de fortaleza y superación fue un proceso doloroso pero catártico cada palabra que escribía era como un paso más en mi camino de sanación y cuando finalmente terminé sentí como si hubiera cerrado un capítulo de mi vida y estuviera lista para comenzar
uno nuevo el libro se publicó un año después rompiendo el silencio mi viaje de supervivencia y empoderamiento se convirtió en un éxito inesperado recibí mensajes de mujeres de toda España e incluso de otros países contándome como Mi historia las había inspirado a buscar ayuda a dejar relaciones abusivas a luchar por sus derechos pero el verdadero cambio llegó cuando fui invitada a dar una charla en un centro de ayuda para mujeres Víctimas de violencia doméstica parada frente a esa audiencia de mujeres algunas con moretones visibles otras con cicatrices invisibles pero igual de profundas sentí que había
encontrado mi propósito no están solas les dije mi voz temblando de emoción sé que ahora todo parece oscuro y sin esperanza pero les prometo que hay luz al final del túnel son más fuertes de lo que creen y merecen una vida Llena de amor y respeto esa noche cuando volví a casa Sofía me estaba esperando despierta Cómo te fue mamá preguntó sus ojos brillando con curiosidad la abracé fuertemente inhalando su familiar aroma champú de fresa fue maravilloso mi amor respondí creo que realmente pude ayudar a algunas personas hoy Sofía sonrió esa sonrisa que iluminaba mi
mundo entero estoy orgullosa de ti mamá dijo eres mi heroína sus palabras me llenaron de una alegría indescriptible sí habíamos pasado por momentos terribles pero aquí estábamos más fuertes que nunca mi hija ya no era la niña enferma y asustada que había sido hace unos años ahora era una niña feliz segura de sí misma que veía a su madre no como una víctima sino como una heroína los años siguientes trajeron más cambios y desafíos pero los enfrentamos juntas Sofía y yo con la fuerza que solo el amor entre una madre y su hija puede dar
seguí trabajando en la editorial pero también dedicaba gran parte de mi tiempo a dar charlas y talleres para mujeres en situaciones vulnerables Rodrigo salió de prisión eventualmente Sofía decidió que quería verlo y aunque me costó respetémonos fácil que a veces nos enfrentamos a tormentas que parecen imposibles de superar pero también aprendí que somos más fuertes de lo que creemos que siempre hay esperanza y que con amor determinación y el apoyo adecuado podemos superar cualquier obstáculo hoy mientras miro por la ventana de nuestro Nuevo Hogar una pequeña casa con un jardín donde Sofía puede jugar me
siento en paz el camino ha sido largo y difícil pero cada paso nos ha llevado a donde estamos ahora libres tes y sobre todo felices la vida que una vez creí perdida No solo la recuperé sino que la transformé en algo aún mejor y Aunque sé que el futuro puede traer nuevos desafíos ya no les temo porque ahora sé que pase lo que pase Sofía y yo lo enfrentaremos juntas con la fuerza y el amor que nos une Esta es nuestra nueva vida una vida de libertad de esperanza y de infinitas posibilidades y No la
cambiaría por nada del mundo i