¿Por qué el machismo impide ejercer la paternidad con plenitud? | David Reyes | TEDxTukuyWomen

no [Música] soy un hombre que fue criado para no cambiar pañales como si tuviera una suerte de impedimento genético para hacerlo por eso la cara de terror de mi madre la primera vez que le dije que iba a cambiar uno como iba yo a limpiar eso que no tenía si una vagina era natural en una familia provinciana católica tradicional donde los roles de género siempre estuvieron super claros las mujeres en la cocina y los hombres del campo a trabajar luego emigraron a lima pero nada de esto cambió y entonces cinco décadas después estaba yo frente

a un pañal embarrado de caca solo en el mundo yo y todos mis temores y la verdad es que no había mucha ciencia en dos pega pegas que se abren y se cierran la técnica simple de limpiar de arriba hacia abajo y no es la inversa para evitar alguna infección futura mirad escrupulosamente que no haya mayores restos y cerrar soy un periodista y envié que dirige una revista especializada en negocios dirigida a altos ejecutivos y vivo en ese mundo el empresarial donde la mayoría de gerentes generales considera que no existe ningún problema de desigualdad de

hecho nueve de cada diez de ellos asegura que hay mucha o bastante equidad de género en sus organizaciones pero cuando tú le preguntas a estos mismos gerentes generales por qué en la alta dirección no hay mujeres las respuestas que te dicen son porque no hay talento capacitado y porque ellas no quieren aceptar mayores responsabilidades osea que la culpa es de ellas entonces vas y les preguntas a las mujeres de cualquier orden jerárquico qué es lo que pasa detrás de este fenómeno y ellas se encuentran otras dos respuestas los estereotipos de género y los prejuicios de

la alta dirección bingo vivo entre estos dos mundos por eso cuando descubrimos esta data y titulamos un artículo como la miopía de los hijos yo me pregunté por qué algo que era tan obvio en mi vida personal no lo era en la suya entonces empecé a indagar una respuesta en mi historia personal cuando nació julieta en abril del 2016 yo tenía 33 años y varios miedos el miedo a ser un mal padre el miedo a criarla en una burbuja de privilegios desde la cual ella asumiera que todos los beneficios que ya tienen son los beneficios

que tenemos todos y el tercero el miedo a que algo le pueda pasar y no era para menos la traía a un mundo que yo considero infame un mundo donde las piropean a diario donde las maltratan porque consideran que son de su propiedad donde las golpean para que escarmienten y donde las matan por que las matan un mundo o un país para ser más exactos donde ocurren catorce feminicidios al mes 2 feminicidios más que el promedio del año anterior y que en lo que va del año van 152 feminicidios sin contar las violaciones seguidas de

muerte a niñas y adolescentes porque no son llamados feminicidios un país donde el 63 por ciento de las mujeres tres de cada cinco asegura que han sido maltratadas por sus parejas o esposos y entonces venían mis amigos y me decían pero a julieta eso no le va a pasar y decía claro que le puede pasar porque ningún privilegio va a evitar que eso pueda suceder ni la educación que le pueda brindar en un colegio privado de lima ni tampoco el futuro profesional que le auguró porque en las oficinas la mitad de las mujeres reconoce que

en algún momento ha sido casada allí en la oficina no la voy a salvar de ese modo no la voy a salvar protegiendo la la voy a salvar tratando dándoles de las herramientas para que ella pueda distinguir esa masculinidad tóxica que desde niño nos han inoculado a todos y que está presente en nuestras acciones nuestros gestos y nuestras palabras quiero instalar en julieta un rol de hombre que le permita a ella seguir ese patrón a lo largo de su vida incluso cuando lo haga inconscientemente y entonces cuando te das cuenta de que la realidad va

a ser superarte a ti mismo y a la relación con tu hija empiezas a tomar consciencia de que de esa realidad está tan presente en ti que tienes que cambiar y decides cambiar todo lo que puedas por eso cuando nació julieta lo primero que hice fue enfrentarme a situaciones para las cuales me habían dicho que yo no era capaz como por ejemplo cambiar del pañal en los primeros días pero también bañarla cuando su cuerpo era indefenso pequeño y su seguridad de vida estaba instalada literalmente en la palma de mi mano y entonces tomé algunas decisiones

que a la luz del tiempo considero fundamentales la primera de ellas fue dañarla todos los días así de simple y durante los primeros dos años lo que hice fue meter el codo en el agua para detectar la temperatura adecuada para ella y compartir ese espacio privado y personal de a2 y creé una conexión hermosa pero para ello tuve que hacer algunas cosas en el trabajo unos pequeños cambios decirle que no a todos aquellos que me quisieran agendar una reunión a las 5 de la tarde porque porque soy bien pedir que yo salga a las seis

y que pueda ir a bañar a mi hija o decirles advertirles de que si me la agenda van pues bien 5 para las 6 a las 6 en puntos yo empezaba a empacar para irme y por supuesto que no fue fácil porque te enfrentas a todas las caras largas de gente que además de acusar te sin necesariamente decirlo te juzga porque no entienden qué proceso estás pero también era consciente en ese momento de mis propios privilegios el director de un medio de comunicación en una compañía es decir soy parte de la alta gerencia de la

compañía puedo decir que no cuántas mujeres madres profesionales y trabajadoras las organizaciones pueden decir que no siquiera tienen esa potestad seguramente la cantidad es íntima esa cantidad del privilegio lo segundo que hice fue hacer algunas modificaciones de lenguaje el lenguaje soy comunicador tengo un sesgo eso el lenguaje no sólo esconde significados sino también sesgos entonces con mi esposa decidimos eliminar una palabra ayudar yo no ayudo a mi esposa cumplo con mi rol de padre porque en el momento en el que yo le digo te voy a ayudar lo que estoy diciendo tácitamente es que la

responsabilidad no es mía sino suya y julieta está allí alrededor y está escuchando todo lo que decimos desde el primer día no subestimemos el entendimiento de los niños ahí está y allí estoy instalando este rol que quiero instalar el regalo finalmente es para mí también porque encuentro y empiezo a desarrollar esta relación que a 2 para mostrar cuál es ese momento y saber de qué se trata quiero compartirles una pequeña carta que le escribí a julieta cuando ella tenía un año un mes y diez días 14 de mayo del 2018 el ritual es sencillo cerca

de las nueve de la noche ambos sabemos que es hora de dormir hemos cenado lo mismo de preferencia para evitar que se disguste y señale a mí ya mi plato insistentemente con su dedo hemos jugado armado y desarmado los cubos infinitamente cada quien con su función yo construyo ella destruye la eba añado nadan patos pelotas y hasta libros hemos cantado y aplaudido el juego del puercoespín de colectivo animal mínimo 10 veces solo entonces ella bosteza por fin es hora de dormir lo sabemos entonces decía el ritual es sencillo apagamos juntos todas las luces de la

casa una por una señal de que vamos a dormir pero hoy le hemos agregado un último paso que ella misma con su dedo ya tiene la fuerza apague la última luz la del cuarto de esa manera le expliqué yo sabré que ya quiere dormir de esa manera le insistí ella decidirá si quiere hacerlo y mientras caminábamos juntos a oscuras su cabeza ya sobre mi hombro le hablé de la libertad hoy has apagado la luz mañana decidirá si prefieres la música el fútbol el voley o los libros luego si tienes novio o novia y más tarde

si quieres tener hijos o no casarte o ser soltera para siente no elegirás todo julieta como el caballo rojo o el globo de bach incluso si andas con el pelo suelto como te deja tu madre y aunque ellos siempre te quiera peinar el machismo nos quita está felicidad a los hombres nos la impide no es la castra y cuando yo recuerdo a mi propio padre un hombre duro ciertamente conservador y recuerdo el momento más feliz que viví con el recuerdo mi cabeza sobre su pecho cuando dormíamos la siesta era un espacio un momento y mi

padres sólo se permitía en el terreno privado jamás lo iba a hacer en el terreno público el machismo nos ataca por igual a hombres ya mujeres y entonces decido eliminar algunas escenas de mi vida que yo no quiero que se repitan en la vida de mi hija escena 1 mi abuela nos recibe en su casa a mí ya mi prima hermana yo tengo 10 ya tiene 8 años y entonces porque es tarde estamos cansados venimos de jugar toda la tarde y nos va a servir la comida pero un detalle le llama la atención a ella

por no servirme a mí le está reclamando porque no cumple su rol de mujer desde niña porque ella no está haciendo lo que en mi familia siempre llamamos acomedida escena 2 hace muy pocos meses y no la juzgo realmente mi tía en la mitad de una reunión familiar se da cuenta que en la mesa hay menos sillas de los presentes en la reunión entonces toma una decisión fácil los hombres a la mesa las mujeres a la sala y yo busco julieta en ese momento literal donde está porque quiero saber es escuchado eso no quiero que

ella asimile eso como una verdad no quiero que ella interprete que las cosas son así el machismo está presente y es el elefante blanco que no solo está en nuestras casas sino también en las oficinas donde las mujeres en promedio según la encuesta de semana económica 10 horas más y un poco más que los hombres en las labores de crianza y cuidado de los hijos diez horas más son al año porque suman un poco más 560 horas la cantidad de horas promedio de una maestría que se ejecute a lo largo de dos años o si

quieren 70 días laborables tres meses y medio de trabajo y en esas horas libres por supuesto nosotros los hombres podemos tener la ventaja de entregar de algunas de esas a la compañía y quedar bastante mejor como pretendemos que los jefes quieran contratar las a ellas que técnicamente son menos productivas como podemos asegurar que existe una cancha nivelada para nosotros como podemos hablar de esto extraño que llaman meritocracia el problema es que el trabajo de casa no es considerado un trabajo hasta que te das cuenta hasta que una mañana llegas tarde a la reunión con el

dueño de la compañía y le tienes que explicar que has tenido que dejar a tu hija en la guardería está hecho un berrinche de padre y señor mío durante media hora de camino entre tu casa y la guardería un llanto intenso que no sabías cómo diablos parar porque le sacaste todo lo que había en la mochila pero al final dijiste por qué no le doy este pan con queso que me iba a desayunar y que no me desayuné y cuando le tienes que explicar esto al dueño de la compañía y no sabes si le importa

una o no entonces te das cuenta yo no les quiero decir con esto de que hemos logrado una comparen talidad perfecta en mi casa que tenemos los roles compartidos perfectamente definidos para nada ha sido mi esposa la que ha hecho el mayor sacrificio en mi casa lo que sí les vengo a decir es que un día desperté y me di cuenta que era un papá pingüino los expertos en mercados no están definidos ya bajo ese nombre en relación a estos animales que crían a los hijos mientras las hembras van en busca de alimento afuera y

somos 253 mil papás pingüinos en el perú según ipsos y hay que decirlo con orgullo vamos en franco ascenso somos una pequeña legión de hombres que estamos dispuestos a trabajar más en casa y que a cambio logramos una mayor relación emocional con nuestros hijos el 91% de nosotros todavía trabaja contribuye económicamente a la casa no es verdad por supuesto que nos dedicamos enteramente a ella pero estamos iniciando un cambio un pequeño cambio significativo pues bien les decía al inicio de esta charla no sé si lo recuerdan que habíamos titulado un artículo como la miopía de

los tíos y que yo no entendía porque algo que en mi vida personal era tan obvio no lo era en la vida de ellos creo que ya tengo una respuesta no ven el problema porque no lo tienen que afrontar felizmente están sucediendo cosas somos muchos los que estamos luchando silenciosamente y saben qué faltan manos y cada uno de ustedes desde la posición en la que están desde sus momentos de vida pueden sumar con pequeñas acciones yo no quiero que mi hija sea golpeada maltratada violada o asesinada julieta tiene dos años y medio y le encantan

los perros y desde que descubrí que le encantan los perros que a mí nunca me han gustado los veo en todos lados y salimos con julieta al parque a buscar perritos y allí están por decenas yo nunca había visto esos perros y los perros no están allí para julieta yo los he empezado a ver la realidad es la realidad que cada uno quiere ver los hijos no son los únicos miopes los somos todos el elefante blanco está en medio de esta sala entre nosotros y sólo hay que abrir los ojos decidir abrir los ojos para

darse cuenta de que está aquí [Aplausos] [Música]