euristeo estaba pensativo como de costumbre buscando la manera de complicar la vida de Hércules con alguna tarea casi imposible pero esta vez la idea no salió de su propia cabeza fue su hija adete quien cansada de escuchar historias de bestias monstruosas y fieras salvajes se acercó con una propuesta mucho más práctica padre por qué no le pides que traiga algo más hermoso dijo mientras jugaba con una joya en sus manos Quiero el cinturón de oro de hipólita la reina de las amazonas euristeo intrigado por la sugerencia consideró la idea por un momento no era cualquier
cinturón hipólita La Poderosa líder de las amazonas no usaba una pieza de adorno común el cinturón había sido un regalo de Ares dios de la guerra y representaba su sobre su pueblo adete con su afán por obtenerlo no solo buscaba un accesorio sino un trofeo cons significado Aunque claro euristeo dudaba que su hija entendiera del todo lo que ese cinturón representaba para las amazonas Las amazonas eran mujeres de leyenda vivían en una tierra lejana al borde del mundo conocido en las orillas del mar Negro allí en sus bosques y praderas casaban y luchaban sin la
compañía de hombres adoraban a Artemisa La Diosa de la casa y se decía que eran hijas de Ares desde niñas Las amazonas se preparaban para la batalla se contaba que se quitaban el seno derecho para manejar mejor el arco y las flechas eran guerreras temidas por todos y su fama se extendía por el mundo griego a pesar de lo que significaba esa misión euristeo no podía resistirse la posibilidad de enviar a Hércules a una tierra tan remota y peligrosa Las amazonas no permitirían que un hombre pisara sus tierras sin consecuencias Pero para adete los detalles
guerreros eran lo de menos ella quería el cinturón y sabía que Hércules era el único que podría conseguirlo euristeo tras pensarlo aceptó la propuesta de su hija después de todo si Hércules lograba traer de vuelta el cinturón sería un éxito digno de la historia si no lo lograba sería el fin de un héroe que lo superaba en todo así la orden fue dada Hércules debía partir hacia el país de las amazonas su misión consistía en adentrarse en una tierra desconocida y traer consigo el Preciado cinturón de la reina hipólita Hércules sabía que este encargo era
diferente no se enfrentaría a una bestia o un monstruo sino a un ejército entero de guerreras hábiles y valientes por primera vez euristeo le permitió llevar compañeros la noticia se esparció rápido por toda Grecia muchos héroes y guerreros quisieron unirse a la aventura entre ellos estaba teseo El joven príncipe de Atenas ansioso por probar su valor junto al Gran Hércules prepararon un barco provisiones para el largo viaje armas escudos y armaduras se apilaban en la cubierta los remeros tomaron sus puestos listos para la travesía antes de zarpar Hércules miró al Horizonte Cómo convencería a las
amazonas de entregar su tesoro más valioso tendría que luchar contra ellas la incertidumbre no lo dejaba estar tranquilo pero su valentía no flaquea el viaje fue largo y lleno de peligros tormentas azotaron el barco y monstruos marinos acechaban en las profundidades pero Hércules y sus compañeros eran valientes y hábiles superaron cada obstáculo acercándose día a día a su destino por fin después de semanas en el mar vieron tierra las costas del país de las amazonas aparecieron en el Horizonte verdes Colinas y bosques frond dosos se alzaban a lo lejos en algún lugar de esa tierra
Misteriosa estaba temis ira la ciudad de las guerreras y el codiciado cinturón de oro Hércules y sus compañeros desembarcaron en la playa listos para la batalla esperaban ver un ejército de Amazonas Cabalgando hacia ellos con Arcos y lanzas pero la costa estaba tranquila y silenciosa avanzaron con cautela hacia el interior los bosques eran densos y oscuros perfectos para una emboscada cada crujido de ramas los ponía en alerta pero no hubo ataques sorpresa ni flechas silvando entre los árboles cuando llegaron a las puertas de tem yira Se llevaron Una gran sorpresa en lugar de muros cerrados
y guerreras en posición de ataque encontraron las puertas abiertas de par en par y en la entrada esperándolos estaba la propia reina hipólita la reina de las amazonas era una visión impresionante alta y fuerte con una melena negra que caía sobre sus hombros llevaba una armadura brillante y alrededor de su cintura el famoso cinturón de oro pero lo más sorprendente era su [Música] sonrisa bienvenidos Héroes de Grecia dijo hipólita los estábamos esperando Hércules y sus compañeros se miraron confundidos era una trampa o las amazonas realmente los recibían en paz gran Hércules continuó hipólita tu fama
ha llegado hasta nuestras tierras sabemos de tus hazañas de cómo has Librado al mundo de monstruos y peligros hemos preparado un gran banquete en tu honor entren y sean nuestros huéspedes los griegos no salían de su asombro donde esperaban encontrar enemigas feroces hallaron anfitrionas amables las calles de tem yira estaban decoradas con guirnaldas de flores el aroma de la comida y el sonido de la música les dio tranquilidad esa noche en el Gran Salón del Palacio de hipólita griegos y amazonas compartieron mesa y conversación Hércules se sentó junto a la reina cautivado por su inteligencia
y su belleza hipólita por su parte escuchaba fascinada las anécdotas del héroe mientras pasaban las horas Hércules se daba cuenta de que el verdadero desafío Sería más sutil y quizás más peligroso el corazón de una reina guerrera lejos de allí en el Olimpo la diosa era observaba la escena furiosa El recibimiento Pacífico de las amazonas no estaba en sus planes este nuevo reto que par ía resolverse de forma pacífica era una oportunidad que no podía dejar pasar la diosa descendió a la tierra ocultando su resplandor divino bajo la apariencia de una Amazona común se mezcló
entre las guerreras aprovechando los momentos de charla y los instantes de Soledad para sembrar dudas y miedos han visto como Mira ese griego a nuestra reina decía a unas dicen que viene a llevársela poco a poco el veneno de sus palabras se extendió entre las amazonas como una enfermedad silenciosa después de haber pasado algunos días Hércules y sus compañeros se preparaban para zarpar el Héroe no notaba las miradas recelos de las amazonas que se reunían en la playa hipólita ajena a los rumores llegó al barco de Hércules con una sonrisa extendió sus manos con el
cinturón este es el cinturón que buscas Llévalo contigo como prometí Hércules estuvo a punto de tomar el cinturón pero en ese instante vio como las amazonas se acercaban armadas y en posición de ataque Qué significa esto hipólita es una trampa preguntó confundido trampa Claro que no yo cumplo mi palabra respondió ella perpleja ante la pregunta era viendo que su plan daba frutos decidió dar el golpe final se acercó al grupo de griegos tensó su arco divino y con puntería certera atravesó el pecho de uno de los hombres de Hércules los griegos sorprendidos por el ataque
respondieron por instinto las flechas volaron en ambas direcciones Hércules confundido buscaba entender lo que sucedía sus ojos se encontraron con los de hipólita que parecía tan desconcertada como él las amazonas lideradas por melane hermana de hipólita combatían con ferocidad los griegos sorprendidos por la repentina agresión formaron una línea defensiva sus escudos chocando unos contra otros para crear una barrera el Héroe usando su fuerza apartaba a las atacantes cada golpe con su garrote derribaba a las amazonas pero por cada una que caía otras dos llegaban en medio del desorden hipólita intentaba detener a sus guerreras deténganse
gritaba pero nadie la escuchaba en medio del combate antes de que hipólita pudiera decir algo más Hércules sintiéndose traicionado tensó su arco y disparó una flecha envenenada con el veneno de la hidra la flecha alcanzó el pecho de la reina quien pereció al instante al ver morir a su líder Las amazonas comenzaron a retirarse desconcertadas por la pérdida Hércules con el cinturón de oro en sus manos se dio cuenta de lo que había hecho había matado a una mujer que quizás no había tenido la intención de traicionarlo y ahora llevaba consigo no solo el trofeo
que debía entregar a euristeo sino también el peso de una tragedia que él mismo Había desatado una vez más era había logrado causar que el Héroe dañara a quienes eran realmente importantes para él en este caso la reina hipólita mientras Hércules navegaba de regreso tras el incidente con las amazonas El destino lo llevó a las costas de Troya Allí se encontró con una escena que de inmediato captó su atención ione la hija del Rey laomedonte estaba encadenada a una roca Esperando ser devorada por un monstruo marino la ciudad de Troya en su desesperación Había decidido
ofrecer a la joven como sacrificio para calmar a la bestia que aterrorizaba las costas Hércules con el instinto de héroe que lo caracterizaba no podía permanecer indiferente se acercó al rey laomedonte y le ofreció una solución él mataría a al monstruo pero a cambio el rey debía pagarle una recompensa laomedonte sin pensarlo mucho accedió a la oferta del héroe y prometió compensarlo con unos caballos divinos regalo de Zeus Hércules siempre dispuesto a enfrentar criaturas peligrosas se preparó para la batalla El mar estaba agitado y una enorme criatura de dientes afilados se acercaba Hércules no esperó
y fue directo a la pelea sus flechas volaban con precisión tras una intensa lucha venció al monstruo y salvó a jes la victoria fue indiscutible Hércules esperaba la recompensa que le había prometido laomedonte sin embargo el rey arrogante y desagradecido decidió que no pagaría lo acordado creyó que como en tantas otras ocasiones podía romper su palabra sin sufrir consecuencias aún dolido por lo ocurrido con hipólita no tenía ánimos para vengarse en ese momento pero juró que volvería algún día para hacer pagar al rey su traición Poco después Hércules continuó su viaje de regreso a micenas
Aunque el cinturón de hipólita colgaba de su cintura el peso que sentía no venía del metal sino de todo lo que había ocurrido el mar golpeaba la embarcación pero el Héroe apenas notaba las olas su mente estaba en otro lugar recordando lo sucedido con hipólita había confiado en ella había visto en sus ojos algo más que una simple guerrera pero nada de eso importaba ahora euristeo lo esperaba ansioso por recibir el cinturón que tanto deseaba su hija al llegar a mis senas Hércules entregó el cinturón a euristeo sin decir una palabra más de lo necesario
cumpliendo con su deber pero sin orgullo alguno aú así euristeo recibió el cinturón con cierta desconfianza como si no pudiera creer que Hércules saliera victorioso una vez más Hércules se frotó la frente cansado sabía que euristeo ya estaba tramando su próximo trabajo qué será esta vez se preguntó a sí mismo había rumores sobre tierras lejanas al oeste Más allá de donde ningún griego había llegado antes se hablaba de bestias nunca vistas y riquezas inimaginables sería ese mi próximo destino pensó preparándose mentalmente para el desafío que estaba por [Música] venir i