El Pacto | ¿Cambiarías tu Alma por Riquezas?

Qué tan lejos llegarías con tal de obtener poder o riqueza uno puede encontrar por ahí muchas historias en las que se dice de alguien que vendió su alma con tal de obtener todo lo deseado estos acuerdos siniestros que pueden cambiar la vida de una persona para siempre están envueltos en misterio sin embargo siempre nos muestran que hay fuerzas en este mundo que van más allá de nuestra comprensión y que a veces nuestras decisiones pueden tener consecuencias Más allá de lo que podemos imaginar en ese contexto déjame contarte una historia corría la década de 1950 durante

ese tiempo explotaron varias huelgas a lo largo del país yo Te hablaré sobre la huelga de Mineros ellos exigían mejores condiciones de trabajo y salarios justos el conflicto se prolongó durante varios meses y durante ese tiempo los mineros se enfrentaron una dura represión por parte de las autoridades y de los dueños de las minas eran tiempos difíciles después del paro por la huelga algunos trabajadores se vieron obligados a buscar trabajos temporales en otras áreas o a depender de la ayuda de amigos y familiares Leonardo era un minero el vivía con su esposa y sus cuatro

hijos pequeños tiempo después de haber comenzado la huelga y tras haberse esta prolongado la escasez ya era crítica por un tiempo sobrevivieron de la venta de huevos de gallinas que tenían pero no era suficiente Y como la mayoría del pueblo vivía de la mina esta problemática era la misma para todos una mañana harto de esta situación Leonardo se levantó temprano y sin decirle a nadie tomó un Morralito como si fuera al campo para recoger la siembra tomó camino y avanzó hacia el monte caminando por alrededor de 4 horas llegó a un lugar donde algunos que

tenían terrenos decían ver a un hombre ahí andando por las noches algunos decían que era el maligno y que estaba esperando ahí a ver quién le ofrecía algo que le interesara a cambio de dinero Leonardo iba con la intención de hablar con ese hombre siguió avanzando hasta que llegó a una colina que estaba apartada de todo durante tres días y tres noches estuvo en ahí dando voces tratando de llamar como podía al hombre misterioso sin comer ni beber agua dormía un poco por las mañanas y por las noches se quedaba despierto tratando de comunicarse con

ese hombre al final de la tercera noche comenzó a llover fue en ese momento que Leonardo estaba a punto de Rendirse y regresarse a su casa con las manos vacías de pronto escuchó Detrás de él el sonido de las cerraduras de un caballo acercándose en la distancia pero él no podía ver nada giraba y buscaba de donde venía El sonido del caballo aproximándose como ya estaba oscuro la única luz con la que podía divisar el camino Era con la luz reflejada por la luna con la lluvia cayendo era difícil ver algo sin embargo cuando dirigió

su mirada hacia una huehuete que estaba a unos 20 pasos de él vio que debajo de la sombra estaba parado un caballo negro que se veía muy grande y recargado de espaldas al caballo estaba un hombre aún más alto Leonardo se acercó temeroso Pues a pesar de haber estado buscando hablar con él una cosa es buscar algo que sabes que no es de este mundo y otra encontrar eso que estás buscando para que me has estado buscando le dijo el hombre recargado en el caballo con una voz solemne profunda y que imponía respeto la verdad

lo busco porque ya me cansé de ser pobre no hay trabajo y ya no sé qué hacer contestó Leonardo bastante temeroso Y ese es motivo suficiente que tienes para darme que me pueda interesar le replicó el hombre misterioso la verdad no tengo nada pero he sabido que usted da dinero a cambio de la vida de las personas y estás dispuesto a dar tu propia vida tu vida no me interesa Te propongo algo más interesante antes de que Leonardo pudiera contestarle prosiguió Yo no te voy a dar el dinero tú lo debes de Buscar te diré

por donde debes ir encontrarás una cueva llena de oro tú lo debes de extraer ya sabes hacerlo ese oro solo lo podrás sacar tú si alguien te ve y lo quiere robar lo único que encontrará ahí serán piedras si aceptas serás inmensamente rico el oro no desaparecerá Mientras tengas vida pero cuando mueras vendré por ti Los ojos de Leonardo Se abrieron como platos su boca quedó abierta y su rostro se puso pálido sintió un nudo en el estómago y su respiración se aceleró su corazón latía tan fuerte que pensó que se le saldría del pecho

sus piernas temblaban y su cuerpo se paralizó mientras intentaba asimilar lo que acababa de escuchar después de eso el hombre misterioso le dio las instrucciones para llegar a la cueva en la que encontraría el oro le dijo algo más y desapareció por la mañana Leonardo llegó a la cueva y tal como le dijo el hombre misterioso era una cueva llena de oro tomó lo que pudo agarrar a mano limpia y lo metió en su Morralito cuando llegó a su casa lo primero que hizo fue decirle a su esposa que ya no tendría que esperar a

que la huelga terminara ya tenía la forma de solventar los gastos y más pero no le dijo que fue lo que hizo para conseguirlo No tardaron en irse del pueblo y compraron un terreno enorme en la ciudad era un lugar tan grande que Leonardo ya tenía empleados trabajando para él tenía ganado tierras para sembrar y tanto dinero como para ya nunca trabajar todo lo hacían sus trabajadores lo único que hacía era ir de vez en cuando a la cueva con algunos trabajadores de confianza él entraba a la cueva sa el oro y se los daba

ellos lo cargaban en costales lo subían en burros y se iban se cuenta que algunos trabajadores Iban por la noche a la cueva para robarle oro a Leonardo pero tal como le dijo el hombre misterioso no encontraban ni siquiera la cueva como hacendado siempre fue bueno con sus trabajadores demasiado bueno con la gente del pueblo lo mismo todo el pueblo lo conocía y lo saludaba con respeto contribuía económicamente con la ciudad y hacía donativos a la iglesia del pueblo El que hiciera todo esto tiene un motivo a sus hijos los mandó a estudiar a la

capital ellos hicieron carrera lejos el negocio que ponía prosperaba y con el tiempo dejó de sacar oro de la Cueva los años pasaron y como todos Leonardo envejeció una tarde mientras estaba Cabalgando solo en su propiedad Leonardo escuchó Detrás de él unos pasos de caballo que recordó inmediatamente al voltear sus ojos se llenaron de Lágrimas y su voz tembló al intentar hablar a unos 10 metros de él estaba el hombre misterioso montado en su caballo El sombrero le tapaba la cara Leonardo sentía como si estuviera viviendo una pesadilla de La que no podía despertar veo

que has estado dándole uso al oro que te di vine a decirte que te quedan pocos días prepárate porque voy a venir por ti sin esperar respuesta dio media vuelta y cabalgándose fue a paso tranquilo en tanto Leonardo se quedó sin aliento un escalofrío recorrió todo su cuerpo un grito ahogado escapó de su garganta sus manos empezaron a sudar y su corazón latía tan fuerte que sentía que iba a salirse del pecho el mundo se desmoronaba a su alrededor sus manos temblaban sin control y sus ojos se clavaron en el hombre montado a caballo que

se alejaba al ser noche y no llegar a su casa su esposa mandó a buscarlo después de un rato un trabajador lo encontró tirado en shock al llevarlo a casa este en todo el camino preguntaba por sus hijos por la mañana ya más tranquilo mandó Llamar a su hijo mayor este hizo un viaje desde la capital para ver a su padre junto a sus hermanos Leonardo después de la impresión que tuvo se la pasaba en cama tenía miedo de salir cuando sus hijos llegaron hizo salir a todo mundo de la casa incluida la esposa y

los hijos menos el hijo mayor ahí le confesó todo le dijo el pacto que hizo y cómo fue que se hicieron de riqueza el hijo escuchó atento las palabras de su padre sin embargo le contó lo último que el hombre misterioso le explicó luego de darle las instrucciones y antes de desaparecer me dijo que en el momento que tomara el oro de la Cueva el pacto estaría cerrado y el vendría por mí me llevaría con el quien sabe a dónde Pero había dos opciones de salvarme la primera es que este poder que tengo lo pase

a mi hijo mayor tú puedes seguir explotando la cueva y ser rico por siempre cuando estés a punto de irte debes pasarle este poder a tu hijo mayor Así te puede salvar la otra es que cuando me vaya deben velar mi cuerpo tres días y tres noches las mismas que pasé en el monte buscandolo durante el velorio debe haber mínimo tres personas no me pueden dejar en ningún momento solo no deben dormirse deben aguantar ahí junto a mi cuerpo Aunque escuchen cosas a lo lejos Aunque llueva Aunque caiga nieve no importa más nada siempre debe

haber al menos tres personas junto a mí me deben velar dos noches y al amanecer del Tercer día me deben enterrar ahí deben estar conmigo día y noche ahora en el panteón para que se cumpla el plazo acordado Si a las 12 de la noche de la tercera noche hay alguien Conmigo despierto sabrán inmediatamente que no me llevó para ayudarles en eso está todo el pueblo y los trabajadores por eso siempre fui bueno con ellos para que cuando me vaya este mucha gente en el velorio y no se queden con la carga ustedes solos terminó

de decirle esto a su hijo mientras este con la cabeza negaba y le decía que él no quería ese poder ni estar batallando con esas cosas por eso nos diste carrera para no depender de algo así le dijo su hijo de manera que buscarían la forma de salvarlo haciendo el velorio de tres días y tres noches al cabo de unas pocas semanas Leonardo se fue dejó todo preparado el velorio se haría en un salón grande en la propiedad que tenían el hijo de Leonardo solo le dijo a su mamá y a sus hermanos lo que

su padre le había dicho de manera que todo se prepararon para aguantar lo que vendría sin embargo nada los hubiera preparado para lo que vivieron Cuando comenzó el velorio el primer día había mucha gente casi todo el pueblo estaba ahí la tradición en el pueblo es que siempre debe haber música ellos al tener dinero contrataron varios músicos para que la música no dejara de sonar el hijo mayor habló con el encargado de la iglesia y le dijo que tenía que haber al menos alguien de ellos siempre en el velorio de manera que orquestó una suerte

de turnos para que estuvieran yendo y haciendo recambios al cierto tiempo a la gente del pueblo solo se les invitaba a quedarse con ellos durante la noche el primer día pasó sin contratiempos había personas del pueblo en la cocina preparando los alimentos para darle de comer a tanta gente la esposa había convencido a varias mujeres para hacer los mismos recambios para la cocinada en el día y para estar preparando café por la noche Lo único raro que notaron en el día fue la presencia de un perro grande que al parecer no era de nadie pero

se posicionó debajo de la mesa de la cocina y nadie podía sacarlo de ahí por la noche comenzó lo fuerte cerca de las 11 de la noche un grupo de tecolotes se posaban en la copa de los árboles cerca del salón donde estaba el velorio había mucho viento y a lo lejos se oían gritos no obstante fue todo por la primera noche por la mañana los que estuvieron por la noche le comentaban a los que no lo que habían visto ya en el día algunos del pueblo buscaban a la familia para darles el pésame mientras

eso pasaba uno de los hijos escuchó que alguien del pueblo mencionó que estaba un señor repartiendo mezcal entre ellos dialogaron y no sabían de alguien que vendiera Mezcal en el pueblo tampoco llevaron ellos de manera que quedó como algo extraño en el día no tenía ningún problema salvo por el perro que no quería salir de debajo de la mesa Cuando alguien se acercaba comenzaba a gruñir y mejor ni le movían Cuando comenzó la segunda noche uno de los hijos se quedó afuera del salón para buscar al tipo que estaba repartiendo mezcal Y si en la

parte de fuera había mucha gente en los lugares que estaban un poco oscuros donde estaban los carros estacionados se escuchaba a un viejo decir si no querían mezcal el hijo lo vio a lo lejos y alcanzó a ver la botella que tenía en la mano cuando se acercó entre la gente lo perdió de vista en eso estaba cuando escuchó el sonido de los tecolotes que se posaban nuevamente en la copa de alguno de los árboles cercanos y decidió meterse al salón yendo hacia allá escuchó ahora del otro lado de donde él estaba al viejo del

mezcal esta vez decidido haber quien era se juntó con otros del pueblo para buscarlo la situación es que cuando ya eran varios los que andaban buscándolo este desapareció lo que andaba ahora en el patio del salón era el perro que no quería salir de la cocina después de un rato dejaron de buscar al tipo del mezcal e hicieron caso omiso al perro dentro del salón algunos que estuvieron la noche anterior y que escucharon cosas raras llevaron copal y ahí lo tenían porque se sabía que alejaba las cosas malas afuera había comenzado a llover hacia mucho

viento adentro la música hacía que se les olvidara un poco el Cantar de los tecolotes no obstante a lo lejos Se oía el aullar de coyotes los hijos y la esposa como sabían todo le encomendaban a la gente dentro que rezaran oraran y todo lo que pudieran Pues todos estaban llenos de miedo por los ruidos externos amaneció y por la mañana fueron a enterrar el cuerpo en el panteón como ya estaba todo preparado había una carpa grande abarcando el lugar donde se enterró y había muchas sillas para acompañar cerca de ahí montaron una cocina improvisada

para estar haciendo la comida y para calentar café para la segunda noche ya tenían todo organizado por las mañanas iban unos otros se iban a dormir para estar listos y hacer guardia en la noche de forma que estuvieran todos descansados algunos del pueblo espantados por lo que oyeron ya no quisieron hacer compañía la tercer noche después de enterrar el cuerpo ya no vieron por ahí al perro que estaba molestando Así que en el día todo transcurrió con normalidad por la noche Es cuando comenzó el martirio y la noche más difícil de las tres aquí ya

tenían al encargado de la iglesia Ahí ya no lo dejaban ir a los músicos los tenían cantando Hasta que se cansaban y hacían cambio en las inmediaciones del panteón escuchaban como si hubiera un jinete Cabalgando y rodeando el panteón cada vez con más intensidad pero al buscarlo no veía nada Solo Se oía la carrera que llevaba escuchaban gritos a lo lejos los aullidos de los coyotes el canto de los tecolotes comenzó a llover esta vez con más fuerza que las noches anteriores había mucho viento muchísimo frío se oían llantos de mujeres algunos escuchaban canciones fuera

del panteón muy bonitas como para que quien escuchara se fuera detrás de la música por el viento se les hacía muy difícil prender fuego en la cocina montada para poner café luego de un rato al ya tenerlo caliente y llevarlo a los que estaban en el panteón el perro grande que había aparecido en la propiedad ahora se les ponía al paso a las mujeres y no las quería dejar pasar por el susto luego se les caía la olla del café y de nuevo a volver a ponerlo algunas mujeres habían encargado agua bendita y ahí estaban

aventándose la al perro muy asustadas los hombres dentro del panteón sentían Cómo se le cerraban los ojos por el sueño llegó un momento en que los músicos dejaron de tocar porque caían dormidos los hijos que estaban cerca del cuerpo enterrado sentían como se le cerraban los ojos el hijo mayor que escuchaba todo lo que sucedía en un momento se levantó para despertar a los músicos para que siguieran tocando cuando vio en la entrada del panteón a un hombre como se lo describió su papá montado en un caballo no dijo nada Solo tenía la mirada fija

en él se espantó y corrió a donde estaban sus hermanos y su mamá ya dormida Al despertar uno de ellos observó su reloj 1140 gritó el hijo mayor pensó que ya solo quedaban 20 minutos para ganar la batalla y se sentó cerca de sus hermanos que se codeaban entre ellos para no quedar dormidos de repente sintieron como si un polvo se hubiera levantado a pesar de la lluvia cuando lo olieron les agradó el olor Y cerraron los ojos para disfrutarlo un poco de pronto el sonido de tres latigazos seguidos se escuchó muy fuerte seguido del

sonido de madera quebrándose el hijo mayor que sintió que apenas había cerrado los ojos observó el reloj 12 1 se quedaron dormidos de pronto la lluvia paró todos los ruidos que se oían habían desaparecido los tecolotes ya no se miraban por ningún y por la parte de afuera del panteón se escuchó el sonido de un arriero que venía jalando a un toro con un látigo en la mano el fue quien dio los tres latigazos que escucharon este pasó y al mirarlos fijamente les dijo con una voz profunda Que pasen buena noche al decirles eso el

arriero avanzó y el toro se detuvo por un momento en la entrada del panteón con la mirada fija en los hijos y no queriendo siguió al arriero si el video te ha gustado te invito a regalarme un like y a suscribirte para más contenido como este nos vemos más adelante con un vídeo nuevo