UN MILLONARIO CON UNA ENFERMEDAD TERMINAL, COMPRÓ A UNA PEQUEÑA MENDIGA DE UNA FAMILIA POBRE...

un millonario sin hijos a punto de morir compró a una pequeña mendiga de una familia Pobre un día antes de que el millonario muriera la niña reveló un secreto sobre la esposa del millonario que lo dejó en shock deja tu like para seguir acompañando los próximos videos y no olvides suscribirte al Canal para recibir más historias increíbles como esta Enrique tenía los días contados su enfermedad silenciosa pero implacable le había robado la energía la esperanza y el tiempo Desde hacía meses vivía rodeado de lujos vacíos en su mansión pero el eco de su soledad parecía

resonar en cada Rincón de la casa sin Herederos ni amigos cercanos su único deseo era dejar algo significativo antes de morir algo que trascendiera más allá de las paredes doradas que lo rodeaban fue Entonces cuando tomó una decisión que desconcertó incluso a su círculo más cercano adoptar a una niña Su búsqueda lo llevó a un barrio empobrecido de la ciudad un lugar donde las calles estaban marcadas por el polvo las casas se alzaban con ladrillos expuestos y la vida parecía estar siempre Al filo de la supervivencia allí un intermediario lo guió hacia una familia que

desesperada por la miseria Estaba dispuesta a aceptar su oferta cuando Enrique llegó lo recibió un matrimonio joven con rostros desgastados por las preocupaciones pero llenos de una resignación que parecía decir que estaban acostumbrados a renunciar a todo la niña estaba sentada en un rincón de la pequeña sala sobre un colchón que apenas se mantenía entero Tenía el cabello castaño claro y los ojos grandes que observaban con una mezcla de curiosidad y cautela aunque su ropa estaba gastada y sus zapatillas tenían agujeros Había algo en ella que irradiaba una dignidad inesperada Enrique sintió un nudo en

la garganta esa niña pequeña y frágil parecía mucho más fuerte de lo que él había sido en toda su vida ella es Isabela dijo la madre con un tono que intentaba sonar firme pero que no lograba ocultar el temblor de su voz Es buena obediente siempre ha sido especial Enrique se arrodilló frente a Isabela sintiendo un peso en el pecho que no era el de su enfermedad sino el de la responsabilidad la miró a los ojos y por un instante tuvo la sensación de que esa pequeña podía ver algo en él que nadie más había

visto Isabela no dijo una palabra solo lo observó inclinando la cabeza levemente como si estuviera evaluándolo finalmente esbozó una tímida sonrisa una que apenas movió sus labios pero que iluminó su rostro Te gustaría venir conmigo preguntó Enrique intentando sonar calmado Aunque su corazón la tía con fuerza la niña dudó por un momento luego asintió lentamente sin apartar la mirada de él había algo en esa conexión silenciosa que pareció sellar un acuerdo que iba Más allá de las palabras el padre de Isabela intervino entonces hablando rápido y casi sin aire como si temiera que Enrique se

arrepintiera señor le prometemos que Isabela será una buena niña solo le pedimos que le dé la vida que nosotros no pudimos darle ella merece algo mejor Enrique asintió en silencio no necesitaba más palabras la transacción fue rápida casi mecánica un fajo de billetes pasó de sus manos a las de la pareja quienes con lágrimas en los ojos abrazaron a Isabela por última vez no hubo gritos no hubo escándalo solo un adiós silencioso que Isabela aceptó con la madurez de alguien que ha entendido Demasiado joven que la vida no siempre permite elecciones fáciles cuando salieron de

la casa El Sol del Atardecer iluminaba las calles polvorientas Enrique con su estado físico debilitado apenas pudo sostener la mano de Isabela mientras caminaban hacia el auto que los esperaba la niña por su parte caminaba tranquila sin mirar atrás como si supiera que esa despedida era definitiva una vez dentro del vehículo Isabela volvió a mirarlo esta vez con una expresión más suave cómo es tu casa preguntó con una voz delicada Enrique sonrió por primera vez en mucho tiempo esa pequeña pregunta tan tan simple parecía contener toda la esperanza del mundo es grande pero creo que

tú puedes hacerla sentir como un hogar Isabela no respondió solo miró por la ventana como si estuviera preparándose para lo que venía sin embargo mientras el auto avanzaba Enrique no pudo evitar pensar que tal vez era ella quien había llegado para darle un propósito y en sus ojos tan llenos de preguntas vio algo que lo inquietó y lo reconfortó a partes iguales Isabela no parecía ser una niña común Había algo en ella que prometía cambiarlo todo el auto frenó suavemente frente a la mansión Isabela bajó del vehículo aferrada a su pequeña mochila una de las

pocas pertenencias que había traído consigo frente a ella se alzaba una enorme casa de muros claros rodeada de un extenso jardín que parecía cuidadosamente diseñado pero sin rastro de calidez era un lugar que impresionaba por su tamaño pero que a los ojos de la niña se sentía vacío henrique aún algo fatigado por el viaje apoyó una mano en el hombro de Isabela mientras ambos se dirigían a la puerta principal la entrada fue abierta por Marta la empleada de la casa quien se apresuró a saludar a Enrique con respeto y una sonrisa leve al ver a

Isabela sus ojos reflejaron una mezcla de sorpresa y Curiosidad no le habían avisado que el señor de la casa regresaría acompañado mucho menos con una niña sin embargo su instinto maternal se activó al instante y le ofreció a Isabela una sonrisa cálida bienvenida pequeña soy Marta si necesitas algo no dudes en pedírmelo Isabela asintió tímidamente mientras su mirada recorría la Inmensidad del vestíbulo las paredes estaban decoradas con cuadros costosos y el piso de mármol reflejaba los pasos de todos los que caminaban por allí sin embargo antes de que pudiera responderle a Marta un sonido de

tacones se acercó desde el pasillo era clarice la esposa de Enrique apareció con un vestido impecable y una expresión seria sus ojos se detuvieron en Isabela por unos segundos pero no hubo ni rastro de bienvenida en su mirada clarice evaluó a la niña de arriba a abajo como si intentara entender qué hacía allí y ella preguntó dirigiéndose a Enrique con un tono seco Enrique consciente de que este momento sería como complicado se aclaró la garganta antes de responder es Isabela a partir de hoy vivirá con nosotros clariz levantó una Ceja claramente sorprendida pero no discutió

en ese momento solo soltó un leve Suspiro como si estuviera lidiando con algo incómodo y desvió la mirada hacia Marta llévala a la habitación de huéspedes que se instale ahí sin decir más claris giró sobre Sus tacones y se alejó por el mismo pasillo por el que había haba llegado henrique observó su reacción con decepción pero decidió No enfrentarla todavía sabía que clarice necesitaría tiempo para aceptar la situación por su parte Isabela no pareció sorprendida solo apretó un poco más su mochila contra el pecho como si estuviera acostumbrada a lidiar con miradas frías Marta tratando

de romper el silencio incómodo se acercó a la niña y le extendió la mano Ven conmigo cariño vamos a acomodarte en tu cuarto Isabela tomó la mano de Marta y la siguió por las escaleras mientras Enrique las observaba con una mezcla de gratitud y preocupación sabía que Martha era alguien en quien podía confiar Pero la actitud de clarice comenzaba a preocupar lo más de lo que quería admitir cuando llegaron a la habitación Marta dejó que Isabela explorara el espacio a su propio ritmo era un cuarto amplio con una cama grande muebles elegantes y una ventana

que daba al jardín trasero para cualquier otra persona habría haba sido un lugar impresionante pero Isabela Lo miró con una expresión neutra se acercó a la ventana y observó los árboles que se mecían suavemente con el viento te gusta preguntó Marta intentando leer los pensamientos de la niña Isabela tardó unos segundos en responder finalmente giró la cabeza hacia Marta y asintió levemente es bonito dijo en voz baja Marta sonrió y se inclinó un poco para estar a su altura si necesitas al Solo tienes que llamarme estoy aquí para ayudarte Isabela no respondió pero le dedicó

una pequeña sonrisa de agradecimiento antes de volver su atención al jardín Marta notando la introspección de la niña decidió no presionarla más y salió del cuarto con discreción esa noche durante la cena el ambiente en la casa fue tenso claris apenas dirigió la mirada a Isabela y cuando Enrique intentó Iniciar una conversación sobre la nueva dinámica familiar claris lo interrumpió crees que esto fue una buena idea preguntó Mirando a henrique directamente traer a una niña a esta casa sin consultarme sin siquiera prepararme para algo así Enrique dejó los cubiertos sobre la mesa con un leve

Suspiro sabía que este momento llegaría clarice Esta no es una decisión que tomé a la ligera Isabela necesita un hogar y creo que nosotros podemos dárselo claris soltó una leve risa sarcástica que sonó en la sala un hogar Enrique apenas nos entendemos tú y yo cómo planeas criar a una niña en estas condiciones Isabela sentada en silencio al final de la mesa observaba la interacción con atención sus manos jugaban nerviosamente con la servilleta pero no dijo nada Marta que estaba sirviendo el postre miró a Enrique con una expresión de apoyo silencioso no Espero que todo

sea perfecto desde el principio respondió Enrique con con calma Solo espero que le demos una oportunidad es lo mínimo que podemos hacer claris no respondió en cambio se levantó de la mesa con elegancia y salió del comedor dejando a los demás en un incómodo silencio durante los días siguientes Isabela intentó acercarse a clarice en varias ocasiones la seguía por la casa le ofrecía su ayuda con pequeñas tareas incluso intentaba hablarle de cosas simples como el jardín o los animales que veía desde la ventana pero claris siempre encontraba una excusa para apartarse a veces decía estar

ocupada otras simplemente la ignoraba Marta se dio cuenta de los esfuerzos de la niña y decidió intervenir No te preocupes cariño a veces las personas necesitan tiempo para acostumbrarse a los cambios le dijo una tarde mientras le preparaba una taza de chocolate caliente Isabela la miró con sus ojos grandes y sinceros crees que algún día le voy a gustar preguntó con voz queda Marta sintió un nudo en la garganta la niña no se quejaba no lloraba pero su voz reflejaba una tristeza que Marta no podía ignorar estoy segura de que sí solo tienes que ser

tú misma Eres una niña increíble y cualquiera que te conozca lo verá tarde o temprano esa noche mientras Isabela dormía Marta se acercó a Enrique lo encontró en su estudio revisando unos papeles señor tengo tengo que decirle algo comenzó con un tono serio Isabela es una niña fuerte pero no creo que pueda soportar mucho tiempo esta frialdad si claris no cambia su actitud esto podría afectarla Enrique asintió lentamente sabía que Marta tenía razón pero no sabía Cómo manejar a su esposa claris siempre había sido una persona difícil de leer pero su rechazo hacia Isabela era

más evidente de lo que él había anticipado por ahora lo único que podía hacer era asegurarse de que Isabela supiera que al menos para él ella ya era parte de la familia aunque no sabía cómo estaba decidido a encontrar una forma de romper las barreras que se interponían entre ellas la mansión con todos sus lujos no sería un lugar frío para siempre o eso esperaba los días en la mansión pasaron con un ritmo lento pero cargado de tensiones sutiles Isabela se esforzaba por adaptarse a su Nuevo Hogar explorando cada Rincón de la casa y acostumbrándose

a los hábitos de las personas que la habitaban Marta siempre atenta se aseguraba de que la niña tuviera lo que necesitaba desde ropa nueva hasta cuentos para leer antes de dormir sin embargo el vacío que dejaba La indiferencia de claris era imposible de ignorar una mañana mientras desayunaban en el comedor Isabela observó a Enrique con una expresión pensativa la niña no era alguien que hablara mucho pero cuando lo hacía sus palabras siempre llevaban un peso inesperado Enrique dijo rompiendo el silencio mientras empujaba suavemente un trozo de pan en su plato crees que claris puede ser

mi mamá la pregunta cayó como una piedra en un lago tranquilo Enrique que estaba leyendo el periódico dejó caer lentamente las páginas sobre la mesa miró a Isabela sorprendido mientras claris que estaba al otro lado de la mesa levantó la vista con una de incredulidad y molestia por qué piensas eso Isabela preguntó Enrique con suavidad intentando descifrar la intención detrás de esas palabras la niña encogió los hombros y miró su plato porque sería bonito tener una mamá de verdad y creo que ella podría hacerlo Enrique sintió un nudo en el pecho la inocencia de Isabela

contrastaba con la frialdad que claris había mostrado desde el principio decidido a manejar la situación con cuidado dirigió una mirada a su esposa clarice sin embargo no tardó en responder eso no es algo tan simple como parece dijo con un tono firme pero contenido mientras llevaba su taza de café a los labios Isabela levantó la mirada hacia ella con sus ojos grandes llenos de Esperanza clarice apartó la vista rápidamente incómoda con la intensidad de aquella mirada clarice podríamos intentarlo dijo Enrique después de un momento de silencio Solo sería cuestión de no Enrique ya discutimos esto

lo interrumpió dejando la taza sobre la mesa con un leve golpe tú tomaste la decisión de traerla aquí sin consultarme yo no pedí ser madre ni pienso fingir algo que no siento Isabela miró a Enrique buscando algún tipo de explicación Enrique que rara vez perdía la compostura respiró hondo y trató de mantener un tono calmado clarice no se trata de fingir Isabela es una niña no está pidiendo nada complicado solo quiere sentir que pertenece a esta familia claris Lo miró con una mezcla de frustración y cansancio Esta no es una familia Enrique tú decidiste llenar

esta casa con una niña pensando que eso resolvería algo pero no fue así y no voy a cambiar mi vida porque tú lo quieras Con esas palabras se levantó y salió del comedor Dejando a Enrique y a Isabela en un incómodo silencio Marta que había estado escuchando desde la cocina entró en la sala con una expresión de desaprobación No se preocupe señorita Isabela hay diferentes tipos de familias y a veces las cosas toman tiempo por qué no me ayudas a regar las plantas en el jardín Isabela asintió lentamente agradecida por la intervención de Marta sin

embargo Enrique no podía ignorar el peso de lo que acababa de suceder la actitud de clarice no Solo lo frustraba sino que comenzaba a revelarle algo que no había querido admitir su esposa no estaba interesada en construir nada ni con él ni con Isabela esa tarde mientras Marta e Isabela estaban en el jardín Enrique decidió confrontar a claris la encontró en la sala de estar revisando unos documentos claris levantó la vista Cuando lo vio entrar pero no dijo nada Tenemos que hablar dijo Enrique con firmeza clarice suspiró y dejó los papeles sobre la mesa otra

vez sobre esto Sí otra vez sobre esto respondió el Cruz los brazos clarice no puedo obligarte a querer a Isabela pero lo mínimo que puedes hacer es tratarla con respeto es una niña no merece esta indiferencia clarice se recostó en el sofá y lo miró con una mezcla de resignación y molestia Enrique Tú siempre has sido bueno para las grandes gestos adoptar a una niña pobre traerla aquí intentar salvarla de su destino todo Eso suena muy noble pero no significa que sea algo que yo deba aceptar sin cuestionar De qué estás hablando preguntó Enrique genuinamente

confundido de que esto no tiene nada que ver con ella y todo que ver contigo respondió claris señalándolo con un dedo tú estás haciendo esto para sentirte mejor contigo mismo para llenar un vacío que llevas arrastrando desde hace años pero eso no significa que yo deba cargar con las consecuencias las palabras de clarice golpearon a Enrique como una bofetada por un momento no supo que respond finalmente habló con un tono más bajo pero cargado de emoción tal vez tengas razón tal vez estoy intentando llenar un vacío pero qué tiene eso de malo si también estoy

ayudando a alguien que lo necesita no se supone que una familia es algo más que una obligación No deberíamos intentar ser mejores juntos claris no respondió de inmediato sus ojos siempre tan seguros parecían reflejar un Destello de algo que Enrique no podía descifrar pero en lugar de seguir discutiendo se levantó y salió de la sala sin decir una palabra más Enrique se quedó allí sintiendo el peso de la conversación en sus hombros no podía obligar a Clarisa a cambiar Pero sabía que no podía Rendirse Isabela merecía algo mejor que un hogar lleno de tensiones Y

silencios incómodos esa noche cuando fue a despedirse de Isabela antes de que se durmiera encontró a la niña sentada en su cama mirando por la ventana se sentó a su lado y le acarició suavemente el cabello estás bien le preguntó Isabela asintió pero no lo miró crees que clariz va a querer ser mi mamá algún día preguntó en voz baja Enrique sintió un nudo en la garganta pero decidió ser honesto No lo sé pequeña pero te prometo que voy a hacer todo lo posible para que te sientas querida y feliz aquí no estás sola de

acuerdo Isabela finalmente giró la cabeza para mirarlo y asintió lentamente Enrique le dio un beso en la frente antes de apagar la luz y salir del cuarto mientras caminaba por el pasillo tomó una decisión Haría todo lo que estuviera en sus manos para romper las barreras que clarice había levantado Isabela no solo necesitaba un hogar sino una familia y Enrique no permitiría que sus propios errores o los de claris le negaran esa oportunidad la relación entre Enrique y claris había llegado a un punto de frágil convivencia después de la ación sobre Isabela ambos habían evitado

el tema pero el ambiente en la mansión se había vuelto más pesado lleno de silencios que decían más que las palabras henrique acostumbrado a enfrentar los problemas con determinación empezó a notar ciertos comportamientos en su esposa que lo llenaron de inquietud una tarde mientras trabajaba en su despacho escuchó a claris hablar por teléfono en la sala contigua su Tono era bajo casi susurrante Pero había una urgencia en sus palabras que le llamó la atención Enrique dejó lo que estaba haciendo Y caminó en silencio hacia la puerta entreabierta No aún no decía claris con un tono

que rozaba la irritación te dije que necesito más tiempo no puedo actuar sin asegurarme primero hubo una pausa y luego añadió casi en un murmullo lo resolveré pronto pero necesitas confiar en mí henrique retrocedió antes de que ella pudiera notar su presencia algo en esa conversación lo inquietó profundamente pero decidió no mencionarlo en ese momento no quería precipitarse y causar un conflicto innecesario así que optó por observar con más atención con el paso de los días notó que esas llamadas eran frecuentes claris buscaba siempre un rincón alejado de la casa para hablar asegurándose de que

nadie pudiera escucharla a menudo salía dando excusas vagas sobre reuniones o encargos que no ían con sus hábitos habituales su humor era volátil por momentos parecía fría y distante y al siguiente mostraba una amabilidad inesperada que solo aumentaba la sospecha de Enrique una noche mientras cenaban Isabela rompió el silencio con una observación que dejó a henrique pensativo escuché a claris hablar por teléfono dijo la niña con naturalidad mientras jugaba con los guisantes en su plato dijo algo sobre hacer planes para el futuro Enrique levantó la vista de su plato y Marta que estaba sirviendo agua

detuvo sus movimientos Por un instante antes de continuar como si nada hubiera pasado cuándo fue eso Isabela preguntó Enrique intentando que su tono sonara despreocupado Ayer cuando estaba en el pasillo no sé con quién hablaba pero sonaba seria claris que hasta ese momento había permanecido en silencio levantó la mirada y observó a la niña con una expresión que mezclaba sorpresa y molestia Isabela no está bien escuchar las conversaciones de los demás dijo con un tono cortante pero sin levantar demasiado la voz no estaba escuchando respondió Isabela Con sinceridad solo lo oí porque estabas hablando fuerte

Enrique decidió intervenir antes de que la situación se tornara incómoda No te preocupes Isabela estoy seguro de que no fue intencional claris no dijo nada más pero su actitud durante el resto de la cena fue notablemente distante Enrique por su parte no podía ignorar lo que Isabela había mencionado las palabras de la niña combinadas con los comportamientos recientes de clarice formaban un patrón que no podía pasar por alto esa misma noche cuando clarice salió nuevamente con una excusa poco convincente Enrique aprovechó para hablar con Marta la encontró en la cocina limpiando los últimos platos del

día Marta necesito que me digas la verdad comenzó con un tono que dejaba Claro que no buscaba evasivas has notado algo extraño en clarice últimamente Marta se detuvo por un momento dudando si debía responder finalmente dejó el trapo sobre la mesa y se giró hacia él señor Enrique no me gusta meterme en asuntos que no me corresponden Pero sí he notado cosas que no parecen normales sus salidas esas llamadas algo no encaja Enrique asintió lentamente no era una una respuesta concreta pero confirmaba que sus sospechas no eran producto de su imaginación decidió que era hora

de tomar medidas más directas al día siguiente mientras clarice estaba fuera Enrique revisó discretamente sus cosas no encontró nada fuera de lugar en su escritorio ni en los armarios pero en su bolso halló un papel Doblado que parecía haber sido olvidado allí era una nota escrita a mano con una dirección y un nombre Lucio Enrique no reconoció el hombre pero la dirección no estaba muy lejos de la ciudad guardó la nota en su bolsillo decidido a averiguar más no podía seguir ignorando las señales pero tampoco quería acusar a claris sin pruebas esa tarde clarice regresó

más tarde de lo habitual su humor era inexplicablemente bueno como si algo en su día la hubiera puesto de buen ánimo Enrique la observó con atención tratando de descifrar sus gestos y palabras pero ella no dejó entrever nada fuera de lo común esa misma noche Enrique se sentó en su despacho con la nota frente a él decidió que al día siguiente iría a la dirección escrita en el papel necesitaba respuestas aunque no estaba seguro de lo que encontraría cuando llegó el momento Enrique tomó su auto y condujo hasta el lugar era un edificio pequeño y

discreto que no destacaba en el vecindario tocó el timbre y esperó un hombre de mediana edad abrió la puerta mirándolo con curiosidad es usted Lucio preguntó Enrique directamente el hombre asintió pero su expresión se tornó cautelosa quién pregunta Soy Enrique el esposo de clarice Quiero saber qué relación tiene con ella Lucio pareció dudar Por un instante antes de invitarlo a entrar lo llevó a una pequeña sala y lo invitó a sentarse el ambiente era tenso y Enrique no podía evitar sentir que estaba a punto de descubrir algo importante claris y trabajamos juntos en el pasado

comenzó Lucio escogiendo cuidadosamente sus palabras pero hace tiempo que no tenemos contacto frecuente Entonces por qué Siguen hablando preguntó Enrique mostrándole la nota con su nombre Lucio suspiró y se frotó las manos como si estuviera considerando qué decir finalmente habló no quiero problemas Señor solo le diré Esto claris está lidiando con asuntos que no siempre comparte con Con quienes la rodean no puedo decir más pero tenga cuidado a veces las cosas no son lo que parecen Enrique salió de allí con más preguntas que respuestas Qué tipo de asuntos podía estar manejando clarice por qué se

comportaba de manera tan reservada decidió que no enfrentaría a su esposa todavía necesitaba observar más esperar el momento adecuado para que las piezas encajaran Cuando regresó a casa encontró a Isabela ando con Marta en el jardín la risa de la niña era un contraste con el Torbellino de pensamientos en la mente de Enrique al verla se prometió que protegería a Isabela de cualquier cosa que pudiera ponerla en peligro Incluso si eso significaba enfrentar la verdad sobre claris por más dolorosa que fuera la mañana comenzó con una tranquilidad engañosa henrique estaba sentado en su despacho revisando

algunos documentos cuando Marta golpeó suavemente la puerta su expresión era más seria de lo habitual Y eso captó de inmediato la atención de Enrique puedo hablar con usted un momento señor preguntó con un tono que denotaba cierta preocupación henrique asintió dejando a un lado lo que estaba haciendo Marta rara vez pedía hablar en privado y su actitud sugería que lo que tenía que decir era importante Por supuesto Marta Qué sucede dijo indicándole que tomara asiento Martha cerró la puerta detrás de ella y se sentó frente a Enrique sus manos estaban entrelazadas como si estuviera buscando

las palabras adecuadas hay algo que necesito contarle algo que creo que no debería ignorar comenzó manteniendo la mirada fija en sus manos desde hace un tiempo he notado cosas extrañas relacionadas con la señora clarice no soy de las que se meten en la vida de los demás Pero hay algo que no me cuadra Enrique frunció el entrecejo inclinándose ligeramente hacia adelante qué tipo de cosas Marta Hace unos días mientras limpiaba el dormitorio Encontré unos documentos en uno de los cajones de la señora No suelo revisar las pertenencias de nadie pero estos papeles estaban fuera de

lugar como si alguien los hubiera dejado ahí por descuido Marta hizo una pausa su voz temblaba ligeramente eran documentos antiguos con nombres que no reconocí y uno de ellos mencionaba algo sobre un matrimonio anterior Enrique sintió que su corazón daba un vuelco nunca había escuchado a claris hablar de un matrimonio previo está segura de lo que vio preguntó tratando de No dejarse llevar por la sorpresa Sí señor no los leí detenidamente porque no me pareció correcto pero algo en ellos me dio mala espina lo extraño es que los documentos desaparecieron al día siguiente no sé

si la señora los encontró o si alguien más los tomó Enrique se reclinó en su silla procesando la información Aunque Marta siempre había sido una empleada confiable la idea de que clarice estuviera ocultando algo tan importante lo llenaba de dudas decidió no descartar nada y mantener la calma Martha agradezco que me lo hayas dicho notaste algo más Martha asintió lentamente la señora clarice Hay momentos en los que parece actuar como si estuviera esforzándose demasiado en mostrarse de cierta manera cuando usted está cerca no sé cómo explicarlo pero siento que no siempre es sincera Enrique se

quedó en silencio reflexionando sobre las palabras de Marta había sentido Algo similar en los últimos días una especie de desconexión en la manera en que clarice se comportaba decidió que aunque no tenía pruebas concretas era necesario investigar más esa misma tarde Enrique observó a claris Desde la distancia estaba en el jardín sentada bajo la sombra de un árbol con un libro en las manos parecía tranquila pero algo en su postura le resultaba forzado Isabela que estaba jugando cerca se detuvo por un momento y miró a clarice con curiosidad luego corrió hacia henrique quien estaba sentado

en una banca cercana Enrique dijo Isabela con ese tono directo que siempre lo sorprendía Por qué clarice siempre parece diferente contigo Enrique levantó la vista sorprendido por la pregunta A qué te refieres pequeña Isabel cogió de hombros cuando estás cerca ella sonríe más pero cuando no estás casi nunca lo hace es como si estuviera fingiendo Enrique se quedó en silencio sin saber cómo responder las palabras de Isabela se alineaban inquietantemente con lo que Marta había mencionado aunque no quería asumir lo peor No podía ignorar las señales que comenzaban a acumularse al día siguiente Marta lo

abordó nuevamente esta vez con más urgencia señor no quiero preocupar lo innecesario pero creo que deberíamos investigar más a fondo hay algo que no cuadra y Temo que pueda ser importante Enrique asintió decidió que era momento de enfrentar la situación con mayor seriedad sabía que clarice solía salir durante las tardes y planeó aprovechar su ausencia para revisar sus cosas más a fondo Aunque la idea de invadir la privacidad de su esposa lo incomodaba sentía que no tenía otra opción cuando clarice salió esa tarde y Marta comenzaron a buscar en su dormitorio revisaron los cajones el

armario y cualquier lugar donde pudiera haber escondido algo relevante finalmente en el fondo de un cajón encontraron una carpeta Que contenía varios papeles antiguos Marta Le entregó la carpeta a Enrique quien la abrió con cuidado los documentos confirmaron lo que Martha había mencionado claris había estado casada antes pero el matrimonio no estaba registrado en los papeles oficiales que Enrique conocía además había cartas dirigidas a alguien llamado Lucio en las que claris mencionaba algo sobre resolver asuntos pendientes Enrique sintió que su mundo comenzaba a tambalearse esto explica muchas cosas murmuró Enrique mientras examinaba las cartas Marta

lo observaba con preocupación qué va a hacer Señor por ahora nada Necesito tiempo para entender todo esto no quiero acusarla sin pruebas claras pero Definitivamente hay algo que no está bien esa noche Enrique intentó actuar con normalidad durante la cena pero no podía quitarse de la cabeza lo que había encontrado claris parecía ajena a su inquietud hablando de manera superficial sobre temas cotidianos Isabela por su parte lo observaba con esa mirada tranquila pero analítica que siempre la caracterizaba estás bien Enrique preguntó la niña mientras tomaba un sorbo de agua Enrique sonrió levemente tratando de no

Mostrar su preocupación estoy bien pequeña solo pensando en algunas cosas claris no dijo nada pero su mirada se desvió hacia Enrique por un breve instante como si supiera que algo estaba fuera de lugar aunque no mostró ninguna reacción evidente Enrique sintió que su esposa podía estar percibiendo que algo había cambiado después de acostar a Isabela Enrique se encerró en su despacho para analizar los documentos una vez más las cartas los registros del matrimonio anterior y los nombres que no reconocía formaban un rompecabezas que aún no podía resolver pero una cosa era segura claris No era

quien decía ser esa noche mientras La Mansión permanecía en silencio Enrique tomó una decisión no podía ignorar lo que había descubierto era momento de descubrir la verdad sin importar las consecuencias Pero primero debía asegurarse de proteger a Isabela la niña ya había viv ido suficientes cambios en su corta vida y Enrique no permitiría que nada la lastimara Una tarde nublada mientras Enrique revisaba unos papeles en su despacho el sonido de la puerta principal interrumpió El silencio de la casa Marta apareció en el umbral del despacho con un gesto serio pero respetuoso señor Enrique el doctor

Álvaro ha llegado está esperando en la sala Enrique levantó la vista un tanto sorprendido Aunque había estado esperando noticias del abogado la visita era inesperada se levantó con cierta lentitud sintiendo La debilidad que últimamente lo acompañaba en cada movimiento y se dirigió hacia la sala Álvaro estaba de pie junto a la ventana revisando unos documentos era un hombre de unos 50 años con un semblante serio y un comportamiento profesional que siempre había generado confianza en Enrique Cuando lo vio entrar dejó los papeles sobre la mesa y extendió la mano Enrique Espero no haber llegado en

un mal momento dijo Álvaro con voz tranquila Nunca es un mal momento para asuntos importantes respondió Enrique haciendo un esfuerzo por parecer más fuerte de lo que se sentía qué te trae por aquí Álvaro tomó asiento y Enrique lo imitó Marta siempre atenta apareció con un par de tazas de café antes de salir discretamente hay un par de temas que quería discutir contigo comenzó Álvaro ojeando los papeles que había había traído consigo el primero es el testamento creo que sería prudente revisarlo y actualizar algunos puntos dado que las circunstancias han cambiado Enrique asintió había considerado

Modificar el testamento desde que Isabela llegó a su vida pero aún no había tomado una decisión definitiva eso tiene sentido quiero asegurarme de que Isabela esté protegida si algo me ocurre Álvaro Lo miró con una mezcla de aprobación y precaución por supuesto pero también hay otro asunto que creo que necesitas conocer Enrique notó un cambio en el tono del abogado y su curiosidad se mezcló con una leve inquietud de qué se trata Álvaro hizo una pausa antes de responder como si estuviera considerando Cómo abordar el tema he estado revisando algunos registros de tus negocios y

propiedades y hay ciertas irregularidades que han llamado mi atención no quise alarmarte antes pero creo que es necesario que lo sepas Enrique se inclinó hacia adante sintiendo que su preocupación crecía Qué tipo de irregularidades pagos que no parecen estar registrados adecuadamente transferencias a cuentas que no están a tu nombre y contratos que no coinciden con los archivos que tenemos no quiero sacar conclusiones precipitadas pero podría tratarse de errores administrativos o en el peor de los casos de algo más serio Enrique sintió un peso en el pecho Aunque su salud ya no le permitía involucrarse en

los detalles de sus negocios como antes siempre había confiado en que todo estaba bajo control crees que alguien está intentando aprovecharse de mí preguntó con un tono que mezclaba incredulidad y molestia Álvaro Lo miró con seriedad Es una posibilidad que no podemos descartar pero necesito más tiempo para investigar antes de darte una respuesta definitiva antes de que Enrique pudiera responder clarice entró en la sala su presencia llenó el espacio de una tensión inmediata llevaba una sonrisa que parecía calculada y dirigió su atención al abogado Álvaro qué sorpresa verte por aquí dijo tomando asiento junto a

Enrique como si hubiera llegado casualmente solo asuntos legales claris respondió Álvaro con un tono educado pero distante Enrique observó el intercambio con atención aunque clarice intentaba mantener una fachada de interés Había algo en su postura que lo hizo sentir incómodo Álvaro por su parte para parecía analizar cada movimiento de clarice con una mirada cautelosa algo importante que deba saber preguntó claris Mirando a Enrique con una sonrisa estamos revisando algunos detalles del Testamento y algunos asuntos de los negocios respondió Enrique con un tono que no invitaba a más preguntas claris asintió pero Enrique notó como su

mirada se desviaba hacia los papeles que Álvaro sostenía aunque no dijo nada su interés era evidente si necesitan privacidad puedo dejarlos solos dijo claris pero no hizo ningún esfuerzo por levantarse no es necesario respondió Enrique antes de que Álvaro pudiera decir algo la conversación continuó pero el ambiente se volvió cada vez más tenso Álvaro parecía medir cada palabra que decía mientras que claris se mantenía en un segundo plano escuchando con atención pero sin intervenir cuando finalmente se despidió Álvaro estrechó la mano de Enrique con fuerza como si quisiera transmitirle algo más que un simple Adiós

me pondré en contacto contigo en cuanto tenga más información dijo Mirando brevemente a claris antes de salir cuando la puerta se cerró Enrique se quedó en silencio por un momento clarice en cambio tomó uno de los papeles que Álvaro había dejado sobre la mesa y lo miró con curiosidad por qué de repente tanto interés en el testamento preguntó con un tono que intentaba sonar casual Enrique tomó el papel de sus manos con calma Es un procedimiento normal nada de que preocuparse claris lo observó por un momento antes de levantarse Espero que así sea últimamente pareces

estar más preocupado de lo habitual henrique no respondió pero sus palabras resonaron en su mente mucho Después de que clarice se hubiera marchado Había algo en su tono que no podía ignorar una mezcla de curiosidad y desconfianza que lo hacía sentir aún más inseguro sobre sus intenciones esa noche mientras intentaba conciliar el sueño las palabras de Álvaro seguían rondando su mente las irregularidades en sus negocios las cartas encontradas por Martha y el comportamiento de claris parecían piezas de un rompecabezas que aún no podía resolver decidió que aunque su salud lo limitaba no podía quedarse de

brazos cruzados necesitaba respuestas Y estaba dispuesto a hacer lo que fuera necesario para encontrarlas la mansión estaba envuelta en un silencio que solo era interrumpido por el suave crujir de las ramas agitadas por el viento Enrique cansado pero incapaz de dormir se encontraba sentado en un sillón de su despacho el día había sido largo y las palabras del doctor Álvaro sobre las irregularidades en sus negocios seguían rondando su mente Por más que intentara distraerse El eco de sus propias dudas lo mantenía alerta cerca de la medianoche un golpecito tímido en la puerta interrumpió sus pensamientos

antes de que pudiera responder Isabela apareció con sus pies descalzos y abrazando su Osito de peluche la niña tenía una expresión seria algo poco común en ella qué haces despierta a esta hora pequeña preguntó Enrique sorprendido al verla no podía dormir respondió Isabela caminando despacio hacia él luego hizo una pausa antes de Añadir quería hablar contigo Enrique dejó el vaso de agua que tenía en la mano y le Indicó que se acercara Isabela subió al sillón junto a él y lo miró con esos ojos grandes y observadores que siempre parecían ver más de lo que

decían Qué pasa Isabela preguntó con suavidad inclinándose hacia ella la niña miró hacia la puerta Como asegurándose de que estaban solos y luego habló en un tono Apenas audible escuché a claris decir algo algo raro Enrique sintió que un escalofrío le recorría la espalda tró de mantener la calma para no asustar a Isabela pero su voz traicionó una ligera tensión qué fue lo que escuchaste Isabela juguete con las orejas del Osito antes de responder estaba hablando por teléfono dijo que todo sería más fácil después de que te mueras el corazón de Enrique pareció detenerse Por

un instante miró a la niña buscando alguna señal de que podría haber malinterpretado lo que escuchó pero la sinceridad en sus ojos era innegable estás segura de eso Isabela preguntó tratando de mantener la calma la niña asintió con firmeza lo dijo en la cocina esta tarde pensé que estaba sola Enrique apoyó la espalda contra el sillón procesando las palabras de Isabela sabía que la niña no mentiría sobre algo así pero la gravedad de lo que había escuchado era difícil de aceptar se tomó un momento antes de hablar nuevamente No te preocupes pequeña Yo me encargaré

de esto tú solo preocúpate por descansar de acuerdo Isabela asintió con un leve Buenas noches antes de salir del despacho Enrique se quedó allí inmóvil mientras un torbellino de pensamientos cruzaba por su mente las palabras de Isabela lo llenaban de dudas y temores que no podía ignorar sabía que debía confrontar a clarice pero también sabía que tenía que hacerlo con cuidado unos minutos después Enrique decidió no esperar más caminó hacia la habitación principal donde encontró a Clarisa acomodada en la cama leyendo un libro La mujer levantó la vista cuando él entró sorprendida por su repentina

aparición Qué haces despierto a estas horas preguntó con una mezcla de curiosidad y molestia Enrique cerró la puerta Detrás de él y se quedó de pie mirándola con una expresión seria Necesitamos hablar claris dejó el libro sobre la mesa de noche y se sentó con la espalda recta percibiendo la tensión en su voz sobre qué escuché algo preocupante respondió Enrique sin rodeos algo que me hace cuestionar muchas cosas clarice arósio Enrique Isabela me dijo que te escuchó hablar por teléfono diciendo que todo sería más fácil después de que yo muera es cierto claris abrió los

ojos con incredulidad y soltó una leve risa nerviosa de qué estás hablando desde cuándo tomas en serio las historias de una niña no estoy diciendo que Isabela inventó esto estoy preguntando si es verdad replicó Enrique con un tono más firme claris pareció tambalearse por un momento pero rápidamente recuperó su compostura eso Es ridículo Enrique nunca diría algo así de verdad crees que estoy esperando a que mueras Qué clase de persona piensas que soy Enrique la observó en silencio buscando algún indicio en su que confirmara o desmintieron su inocencia no sé qué pensar claris respondió finalmente

últimamente hay muchas cosas sobre ti que no entiendo las llamadas las salidas las inconsistencias todo esto está empezando a ser demasiado para ignorar claris se levantó de la cama claramente molesta Ahora resulta que soy sospechosa de algo esto es absurdo Enrique estoy lidiando con muchas cosas y tú no haces más que agregar presión Qué cosas clarice preguntó él acercándose un paso hacia ella Qué es tan importante como para que tengas que esconderlo de mí claris vaciló por un momento parecía que iba a responder pero en lugar de eso se giró hacia la ventana dejando escapar

un suspiro frustrado no tengo por qué justificar si no confías en mí ese es tu problema Enrique sintió que su paciencia se agotaba pero no quería escalar la discusión Había algo en la actitud de clarice que le parecía cada vez más desconcertante como si estuviera protegiendo un secreto demasiado grande para compartir Esto no se trata solo de confianza claris se trata de nuestra vida de lo que significa esta familia si no puedes ser honesta conmigo no sé cómo seguir adelante claris se volvió hacia él con una mirada que mezclaba desafío y algo que casi parecía

miedo haz lo que creas necesario Enrique pero te aseguro que no tengo nada que ocultar sin decir más claris salió de la habitación dejándolo solo con sus pensamientos Enrique se quedó allí sintiendo que algo crucial acababa de cambiar entre ellos por primera vez comenzó a preguntarse seriamente Quién Era realmente la mujer con la que había compartido tantos años de su vida y lo que era más importante qué Estaba dispuesta a hacer para proteger lo que fuera que estaba escondiendo las tensiones en la manón se habían convertido en un peso casi tangible Enrique aún afectado por

la confrontación con clarice se encontraba más decidido que nunca a descubrir la verdad su intuición le decía que las piezas comenzaban a encajar pero aún faltaba una clave que explicara el comportamiento de su esposa y el creciente misterio que la rodeaba una tarde mientras Marta realizaba sus tareas habituales encontró algo inesperado había estado ordenando los armarios de clarice como parte de su rutina de limpieza cuando un sobre cayó al suelo al mover una caja al principio pensó que era algo sin importancia pero al recogerlo y notar el nombre Lucio escrito con una caligrafía apresurada supo

que debía examinarlo con cuidado el sobre contenía una carta breve pero el contenido era suficiente para todas las alarmas claris Le escribía a Lucio refiriéndose a un secreto que debían mantener oculto y a la importancia de no cometer errores Marta sintió un escalofrío al leer aquellas palabras aunque no entendía del todo el contexto sabía que debía mostrárselo a Enrique esa noche esperó a que claris se retirara a su habitación antes de acercarse al despacho de Enrique tocó suavemente la puerta como siempre y entró con la en la mano señor Enrique creo que esto es algo

que necesita ver dijo extendiéndolo Enrique lo tomó con curiosidad pero al leer el contenido su expresión cambió primero fue sorpresa luego una mezcla de incredulidad y preocupación dónde encontraste esto preguntó con la mirada fija en la carta estaba en uno de los armarios de la señora clarice no lo estaba buscando simplemente cayó mientras ordenaba no sabía qu hacer pero pensé que debía decírselo Enrique asintió lentamente Agradecido por la lealtad de Marta Aunque la carta no era explícita estaba Claro que apuntaba a algo serio algo que clarice había estado ocultando el nombre Lucio no le sonaba

familiar pero la urgencia en el tono de la carta lo llenó de inquietud Gracias Marta has hecho bien al traerme esto por favor no digas nada a nadie por ahora necesito tiempo para ar Qué significa Marta asintió y salió del despacho Dejando a Enrique solo con sus pensamientos se sentó en su escritorio leyendo y releyendo la carta buscando algún indicio que pudiera guiarlo decidió que la única forma de avanzar era averiguar quién era Lucio y qué conexión tenía con clarice al día siguiente Enrique se puso en contacto con Álvaro su abogado bajo el pretexto de

discutir asuntos legales sabía que podía confiar en él y esperaba que su experiencia pudiera ayudarlo a investigar discretamente Álvaro Necesito que encuentres información sobre alguien llamado Lucio dijo Enrique cuando estuvieron en privado Álvaro levantó una Ceja sorprendido por la solicitud Lucio algún apellido No solo el nombre es alguien relacionado con clarice encontré una carta que sugiere que están manteniendo algo en secreto y necesito saber quién es Álvaro asintió percibi la seriedad en el tono de Enrique haré lo posible por averiguarlo puede llevar tiempo pero te mantendré informado Enrique agradeció su ayuda y regresó a casa

con una mezcla de anticipación y temor Durante los días siguientes intentó actuar con normalidad Aunque la tensión con clarice se hacía más evidente ella parecía más distante que nunca y Enrique no podía evitar preguntarse si sospechaba algo unos días después Álvaro llamó a para informarle que había encontrado algo Enrique descubrí Quién es Lucio es un hombre con un pasado turbio conocido por involucrarse en actividades cuestionables ha tenido problemas legales en varias ocasiones pero siempre logra salir limpio lo más interesante es que hace años trabajó con clarice en un negocio que según los registros terminó en

controversia Enrique sintió un nudo en el estómago Al escuchar esto aunque no tenía todos los detalles era evidente que Lucio era una figura clave en el misterio que rodeaba a clarice puedes encontrar más información sobre ese negocio preguntó estoy trabajando en ello pero ten cuidado Enrique si claris y Lucio están ocultando algo Es probable que no quieran que nadie lo descubra Enrique agradeció la advertencia y colgó decidido a seguir adelante con su investigación esa noche mientras claris dormía revisó nuevamente sus pertenencias buscando cualquier otra pista que pudiera arrojar luz sobre la situación aunque no encontró

nada más relacionado con Lucio descubrió un viejo álbum de fotos que parecía haber sido olvidado el álbum contenía fotos de clarice en su juventud algunas de ellas con un hombre que Enrique asumió que era Lucio Había algo en las imágenes que le llamó la atención la expresión en el rostro de clarice Aunque sonreía en las fotos sus ojos parecían reflejar una mezcla de incomodidad y cautela guardó el álbum y regresó a su despacho decidido a confrontar a clarice en cuanto tuviera más pruebas Mientras tanto Álvaro continuaba investigando descubriendo detalles que complicaban aún más la situación

según sus hallazgos el negocio en el que habían estado involucrados clarice y Lucio había terminado en un escándalo financiero pero los detalles habían sido enterrados con cada nueva pieza de información Enrique se sentía más traicionado la mujer con la que había compartido su vida no solo había ocultado un pasado oscuro sino que parecía estar dispuesta a cualquier cosa para protegerlo aunque aún no sabía Qué implicaciones tendría todo esto estaba Claro que su relación con clarice nunca volvería a ser la misma las noches en la mansión se habían vuelto Un refugio para los pensamientos de Enrique

aunque no precisamente un lugar de descanso mientras el reloj marcaba las horas silenciosamente su mente se seguía analizando Las piezas que tenía sobre clarice Lucio y los secretos que parecía ocultar fue en medio de ese insomnio habitual cuando Recibió la llamada de Álvaro Enrique tengo algo que necesitas saber dijo el abogado con un tono firme pero sin la frialdad profesional que solía caracterizarlo en mis investigaciones sobre claris encontré un detalle que cambia todo Enrique se tensó sosteniendo el teléfono con fuerza Dime qué encontraste hubo una pausa antes de que Álvaro continuara claris Tuvo una hija

hace varios años no hay demasiados registros pero lo poco que conseguí sugiere que la abandonó poco tiempo después de que naciera las razones no están claras pero parece que fue durante una época complicada de su vida Enrique sintió que el aire se volvía más pesado la revelación lo tomó por sorpresa aunque encajaba con el patrón de secretos que claris había estado ocultando sabes algo más algún detalle que pueda ayudarme a entender esto preguntó intentando mantener la calma Hay pocas pistas pero una de las fuentes mencionó que la niña fue enviada a un orfanato no hay

registros que indiquen qué pasó después pero es posible que fuera adoptada más tarde Enrique se quedó en silencio procesando las palabras de Álvaro su mente comenzó a conectar puntos que había pasado por alto Isabela la edad coincidía y el parecido físico Aunque sutil era innegable pero la idea de que Isabela pudiera ser hija de claris era casi demasiado impactante para as similar Álvaro Necesito que sigas investigando Esto no puede quedar como una suposición dijo finalmente lo haré Enrique pero quiero advertirte algo si esto Resulta ser cierto cambiará todo asegúrate de estar preparado Enrique colgó el

teléfono y permaneció sentado en su despacho perdido en sus pensamientos Cómo era posible que clarice hubiera ocultado algo tan importante y peor aún qué significaría para Isabela si la verdad salía a la luz sabía que no podía precipitarse antes de actuar necesitaba certezas los días siguientes transcurrieron con una tensión subterránea que parecía envolver la casa Enrique observaba a Isabela con una mezcla de ternura y preocupación la niña ajena a las dudas que lo atormentaban continuaba mostrándose como siempre curiosa perceptiva y sobre todo resiliente Una tarde mientras jugaban en el jardín Isabela se detuvo de repente

y lo miró con esa expresión analítica que siempre lo desarmaba Enrique Alguna vez has tenido miedo de no conocer toda la verdad preguntó con la inocencia de un niño pero con una profundidad que lo dejó sin palabras Enrique sonrió con suavidad Aunque su corazón se apretó a vez es pequeña pero creo que la verdad siempre encuentra la manera de salir a la luz Incluso si toma tiempo Isabela asintió como si estuviera reflexionando sobre sus palabras antes de volver a concentrarse en el juego Enrique la observó mientras corría entre los árboles y no pudo evitar preguntarse

si la niña sabía más de lo que decía aunque era poco probable no podía subestimar la intuición de Isabela esa noche Marta se acercó a él con una expresión que me clava inquietud y determinación señor Enrique hay algo que he estado pensando Isabela Hay algo en ella que me hace sentir que tiene una conexión más profunda con esta casa de lo que imaginamos Enrique se tensó pero decidió no revelar aún lo que había descubierto a través de Álvaro Qué te hace pensar eso Marta preguntó intentando sonar casual no lo sé con certeza Tal vez sea

la forma en que observa a clarice como si la conociera de antes o tal vez a mi imaginación pero siento que hay algo que no estamos viendo Enrique asintió Agradecido por el apoyo de Marta pero también consciente de que no podía compartir todas sus sospechas hasta tener pruebas sólidas esa misma noche mientras claris se encontraba en su habitación Enrique revisó nuevamente los documentos que Álvaro había enviado aunque no había pruebas definitivas los indicios eran cada vez más fuertes decidió que era hora de hablar con claris Pero sabía que tenía que abordar el tema con cuidado

a la mañana siguiente esperó a que clarice bajara para el desayuno la encontró en la sala ojeando una revista sin mucho interés Enrique se sentó frente a ella con los papeles en la mano clarice hay algo de lo que necesitamos hablar dijo con un tono que no admitía evasivas ella levantó la vista claramente desconcertada por su seriedad de qué se trata ahora Enrique colocó los papeles sobre la mesa señalando el nombre que aparecía en uno de ellos Lucio no es el único secreto que has estado ocultando Álvaro encontró información sobre una hija que tuviste hace

años Quiero saber la verdad claris se quedó en silencio por un momento como si estuviera evaluando sus opciones finalmente dejó la revista a un lado y lo miró directamente Sí tuve una hija pero no era algo de lo que quisiera hablar y ciertamente no era algo que debiera importarte enri sintió una mezcla de ación y tristeza por su respuesta claris Esto no se trata solo de mí se trata de Isabela es ella tu hija clarice lo miró fijamente Y por primera vez pareció perder un poco de su habitual control aunque no respondió de inmediato su

expresión lo dijo todo Enrique sabía que había tocado un punto crucial No tengo idea de dónde está esa niña Ahora la dejé en un orfanato porque no podía cuidar de ella Esa es la verdad y no hay más que decir respondió finalmente con un tono que intentaba sonar indiferente pero que no ocultaba del todo su incomodidad Enrique asintió lentamente sabiendo que había llegado al límite de lo que claris Estaba dispuesta a revelar decidió no presionarla más pero su determinación de descubrir la verdad no hizo más que fortalecerse esa noche mientras observaba a Isabela dormir Enrique

sintió una mezcla de esperanza y temor si Isabela Era realmente hija de claris eso significaba que la niña tenía un derecho legítimo a conocer su origen pero también significaba enfrentar una verdad que cambiaría todo para todos sabía que debía proceder con cautela por el bien de Isabela y por el futuro que ambos merecían los días en la mansión continuaban con una calma aparente que ocultaba una creciente tensión Enrique seguía observando cada movimiento de clariz cada palabra cada gesto intentando descifrar sus verdaderas intenciones Mientras tanto clarice parecía más Serena que nunca Aunque su comportamiento comenzaba a

mostrar un nuevo interés que no pasó desapercibido para Enrique una tarde mientras Enrique descansaba en su despacho clarice entró sin previo aviso llevaba una expresión calculada con una mezcla de simpatía y preocupación que a Enrique le pareció ensayada Cómo te sientes hoy preguntó tomando así ento frente a él un poco cansado pero nada fuera de lo normal respondió manteniendo la guardia alta claris hizo una pausa como si estuviera eligiendo cuidadosamente sus palabras estuve pensando con tu salud cómo está quizá deberíamos empezar a organizar ciertas cosas para que todo esté en orden Enrique levantó la mirada

de los documentos que estaba revisando y la observó con atención a qué te refieres exactamente a la herencia dijo claris con un tono que intentaba sonar casual no me malinterpretes solo quiero asegurarme de que todo se distribuya correctamente podríamos anticipar algunos trámites para evitar problemas más adelante Enrique sintió una punzada de desconfianza el tono de clarice era suave casi afectuoso Pero había algo en su postura en la forma en que lo miraba que no le resultaba sincero no veo por qué sea necesario apresurarse con eso respondió con calma todo está en orden Álvaro Ya revisó

los documentos y no hay nada que preocupe claris inclinó ligeramente la cabeza como si estuviera tratando de convencerlo pero piensa en lo práctico que sería así podrías estar tranquilo sabiendo que todos estaremos bien cuando hizo una pausa dejando la frase en el aire Bueno ya sabes Enrique dejó los papeles sobre el escritorio y cruzó las manos frente a él manteniendo su mirada fija en ella clar Por qué este repentino interés en la herencia nunca has mencionado nada al respecto antes claris soltó una pequeña risa nerviosa Solo estoy siendo responsable Enrique Alguien tiene que pensar en

estas cosas y como tu esposa creo que es mi deber la respuesta Aunque perfectamente lógica no logró calmar las sospechas de Enrique había aprendido a leer entre líneas cuando se trataba de clarice y su instinto le decía que Había algo más detrás de sus palabras agradezco tu preocupación pero no veo la necesidad de cambiar nada en este momento dijo con firmeza clarice sostuvo su mirada por un momento antes de esbozar una leve sonrisa de acuerdo solo quería ayudar se levantó y salió del despacho con una tranquilidad que a Enrique le pareció casi teatral cuando la

puerta se cerró detrás de ella Enrique se recostó en su silla sintiendo que acababa de esquivar una cuidadosamente tendida esa noche durante la cena claris volvió a tocar el tema aunque de manera más sutil esta vez intentó involucrar a Isabela quien estaba entretenida con su comida Isabela Cariño te imaginas qué te gustaría hacer en el futuro preguntó con una sonrisa que parecía genuina Isabela levantó la vista algo sorprendida por la pregunta No lo sé Tal vez ser doctora o profesora algo que ayude a las personas clarice asintió con entusiasmo Eso suena maravilloso estoy segura de

que con el apoyo adecuado podrás lograr lo que quieras Enrique observó la interacción con atención notando como clarice intentaba desviar la conversación hacia un terreno emocional finalmente decidió intervenir claris parece que tienes muchas ideas sobre el futuro últimamente quizá deberíamos hablar más a fondo de tus preocupaciones claris Lo miró Aparentemente confundida preocupaciones no estoy preocupada solo intento ser práctica Enrique dejó el tenedor sobre el plato y se inclinó ligeramente hacia ella Entonces por qué esta insistencia en cambiar cosas que ya están resueltas claris dejó escapar un suspiro como si estuviera perdiendo la paciencia Enrique No

estoy insistiendo en nada eres tú quien parece interpretar cada palabra mía como una amenaza quizá debería preguntarte por qué te sientes así la respuesta directa y desafiante sorprendió a henrique Aunque era consciente de que su salud le estaba pasando factura sabía que su mente seguía siendo Clara clarice sin embargo parecía estar jugando con la idea de que sus sospechas eran producto de su condición no se trata de mi salud claris se trata de la falta de Claridad en tus intenciones dijo con un tono firme claris se levantó de la mesa llevándose la servilleta consigo si

eso es lo que piensas Entonces no hay nada más que decir me disculpo si intenté ser útil salió del comedor Dejando a Enrique e Isabela en un silencio incómodo la niña siempre observadora miró a Enrique con curiosidad por qué siempre discuten preguntó con la inocencia que solo un niño puede tener Enrique le dedicó una pequeña sonrisa y acarició su cabello a veces las personas no se entienden del todo Pero eso no significa que no se pueda arreglar Isabela asintió Aunque parecía no estar del todo convencida más tarde en la soledad de su despacho Enrique repasó

los últimos días tratando de encontrar un patrón en el comportamiento de clarice sus acciones parecían cuidadosamente calculadas como si estuviera buscando el momento exacto para conseguir lo que quería sabía que debía ser cauteloso pero también sabía que no podía quedarse de brazos cruzados decidió ponerse en contacto con Álvaro nuevamente esta vez para discutir posibles medidas legales que lo protegieran en caso de que clarice intentara algo inesperado aunque no tenía pruebas concretas Enrique confiaba en su instinto y su instinto le decía que clarice Estaba preparando algo Mientras tanto clarice en su habitación revisaba un pequeño cuaderno

donde llevaba anotaciones su expresión era seria y sus ojos reflejaban una determinación que bordeaba la desesperación parecía estar considerando sus próximos pasos consciente de que Enrique ya no era tan fácil de manipular como antes la tensión en la mansión seguía creciendo y Enrique sabía que la confrontación definitiva con claris era solo cuestión de tiempo Mientras tanto decidió mantenerse alerta protegiendo No solo sus bienes sino también a Isabela quien se había convertido en el centro de su mundo la tormenta que se avecinaba prometía cambiarlo todo y Enrique estaba dispuesto a enfrentarlo sin importar las consecuencias el

clima en la mansión seguía cargado de tensión Enrique sabía que los días tranquilos habían quedado atrás y que cada decisión debía tomarse con cautela luego de la última conversación con claris donde su insistencia por la herencia había dejado entrever sus verdaderas intenciones henrique se convenció de que no podía posponer más la modificación de su Testamento una mañana mientras claris estaba fuera bajo el pretexto de hacer compras Enrique llamó al doctor Álvaro y le pidió que fuera a la mansión sabía que no podía permitirse esperar más no solo por su salud sino también porque Isabela necesitaba

estar protegida si algo le ocurría cuando Álvaro llegó Enrique lo recibió en su despacho con una mezcla de determinación y cansancio Álvaro Necesito que cambiemos El testamento quiero que que Isabela sea la principal beneficiaria de mi herencia el abogado lo miró con seriedad entendiendo la urgencia de la solicitud Enrique Esta es una decisión importante Estás seguro de que quieres dejar la mayor parte de tu fortuna a Isabela completamente claris no ha sido honesta conmigo y no puedo arriesgarme a que todo lo que he construido caiga en manos equivocadas Isabela merece un futuro seguro y Confío

en que Marta la cuidará si yo ya no estoy Álvaro asintió y sacó los documentos necesarios para comenzar a redactar las modificaciones mientras escribía Enrique explicó en detalle cómo quería que se distribuyeran sus bienes Isabela recibiría la mayor parte mientras que una pequeña porción sería destinada a clarice suficiente para garantizarle estabilidad pero no el control absoluto una vez que todo estuvo listo Enrique firmó los papeles con una mezcla de alivio y nerviosismo que esta decisión tendría repercusiones pero también sabía que era lo correcto horas después Cuando claris regresó notó la presencia de Álvaro y su

expresión cambió ligeramente Aunque intentó mantener una fachada de indiferencia Enrique percibió su incomodidad qué hacía Álvaro aquí preguntó claris mientras entraba al comedor asuntos legales respondió Enrique con calma sin entrar en detalles clar lo observó por un momento leer entre líneas aunque no dijo nada más Enrique sabía que su esposa sospechaba algo días después clarice encontró los documentos del testamento en uno de los cajones del despacho de Enrique Aunque estaban guardados bajo llave claris había aprendido a moverse con sigilo por la casa al leer las modificaciones su rostro se llenó de rabia contenida cerró los

puños pero se obligó a respirar hondo y mantener la calma sabía que perder el control solo levantaría sospechas esa misma noche durante la cena clarice decidió abordar el tema con sutileza he notado que has estado más ocupado últimamente Enrique algo importante en lo que esté trabajando Álvaro Enrique la miró con cautela consciente de que esta conversación era una trampa solo revisando algunos documentos nada fuera de lo común claris sintió lentamente pero sus ojos delataban que sabía más de lo que decía la tensión en la mesa era palpable y hasta Isabela normalmente despreocupada parecía notar que

algo no estaba bien al día siguiente Marta quien había estado observando a claris de cerca notó que la mujer actuaba de manera extraña pasaba largos periodos encerrada en su habitación hacía llamadas más frecuentes y parecía más distante de lo habitual Martha decidió vigilarla preocupada por lo que pudiera estar tramando una tarde mientras limpiaba cerca del dormitorio de claris escuchó a la mujer hablando en voz baja por teléfono No puedo creer que haya hecho esto sin consultarme Sí lo sé pero necesito tiempo para arreglarlo no pienso quedarme con los brazos cruzados marth se alejó antes de

que la descubrieran pero las palabras de clarice confirmaron sus sospechas decidió informar a Enrique esa misma noche señor creo que claris sabe lo del testamento dijo Marta en un susurro mientras servía el té en el despacho de Enrique Enrique levantó la mirada alarmado cómo lo supo no estoy segura pero la escuché hablando por teléfono estaba molesta y parecía estar planeando algo Enrique se quedó en silencio procesando la información Aunque había anticipado que clarice reaccionaría mal no esperaba que descubriera el cambio tan pronto sabía que ahora debía estar más alerta que nunca Mientras tanto Isabela quien

siempre parecía más perceptiva de lo que un niño de su edad Debería ser comenzó a hacer preguntas henrique Por qué clarice está tan enojada contigo preguntó una noche mientras lo ayudaba a recoger los platos Por qué piensas eso pequeña respondió Enrique intentando no alarmar la porque la escuché decir que las cosas no salieron como esperaba hiciste algo que no le gustara Enrique sonrió levemente y le acarició el cabello a veces las personas no están de acuerdo con las decisiones de los demás Pero no te preocupes todo estará bien Isabela asintió Aunque su expresión indicaba que

seguía reflexionando sobre el tema los días siguientes estuvieron marcados por el aumento de la tensión en la mansión claris evitaba a Enrique en la medida de lo posible pero cuando interactuaban lo hacía con un tono que bordeaba la hostilidad por su parte Marta continuaba vigilándome Enrique sabía que el enfrentamiento definitivo estaba cerca Mientras tanto se esforzaba por mantener la calma y proteger a Isabela de cualquier conflicto aunque no sabía exactamente qué estaba planeando claris estaba seguro de que Haría todo lo posible para frustrar sus intenciones y esta vez no estaba dispuesto a ceder la noche

era densa y silenciosa cuando Enrique se sentó en su despacho con un papel entre las manos que parecía pesar más de lo que realmente era el documento contenía la dirección y los detalles que Álvaro había conseguido sobre Lucio el hombre que cada vez se convertía en una pieza más central en el rompecabezas de clarice Enrique sabía que el tiempo de las especulaciones había terminado si quería descubrir la verdad debía enfrentarse a Lucio cara a cara al día siguiente Enrique decidió actuar sin decirle nada a clariz alegó que tenía una cita médica en la ciudad y

pidió a Marta que cuidara de Isabela mientras estaba fuera la mirada de Marta reflejaba preocupación pero no hizo preguntas sabía que Enrique llevaba demasiado peso sobre sus hombros y cualquier cosa que pudiera ayudar a resolver sus dudas debía hacerse cuando Enrique llegó a la dirección proporcionada por Álvaro encontró una Modesta casa en las afueras de la ciudad las paredes estaban desgastadas y el jardín delantero parecía haber sido abandonado hacía años tocó la puerta con un ligero temblor en las manos sintiendo que estaba a punto de abrir un capítulo que tal vez desearía no haber leído

Lucio abrió la puerta tras un momento su rostro mostrando una mezcla de sorpresa y desconfianza era un hombre de mirada aguda y postura relajada pero había algo en su forma de pararse que revelaba años de experiencia en situaciones complicadas Qué puedo hacer por usted preguntó sin invitarlo a entrar Soy Enrique el esposo de claris respondió con un tono directo Necesito hablar contigo sobre algo importante Lucio lo observó con detenimiento como evaluando si valía la pena dejarlo pasar Finalmente asintió y lo invitó a entrar señalando un pequeño sofá en la sala de estar qué quieres saber

preguntó Lucio sentándose frente a Enrique todo lo que puedas decirme sobre clarice su pasado su conexión contigo y sobre Isabela el nombre de la niña pareció causar un leve cambio en la expresión de Lucio Aunque rápidamente lo ocultó no sé cuánto sabes pero parece que ya has llegado bastante lejos dijo con un tono que era a la vez evasivo y desafiante sé que claris tuvo una hija Sé que hay muchas cosas que me ha ocultado y creo que tú tienes las respuestas que necesito Lucio suspiró inclinándose hacia delante y cruzando las manos sobre sus rodillas

claris y yo trabajamos juntos hace muchos años era una época complicada para ambos ó embarazada y decidió que no podí hacerse cargo de la niña fue su decisi levarla a un orfanato no est de acuerdo pero no pude detener las pal de Lucio cayon sobre Enrique como un peso imposible de ignorar too apunt hacia Isabela pero necesitaba confar sabes qué pasó con niñ después preguntó con un nudo en la garganta no estve involucrado pero escuché que fue adopt si estás pensando que Isabela podría ser esa niña no te equivocas Enrique sintió que el aire se

volvía denso como si la habitación se encogieron firmaba con cada palabra de Lucio por qué nunca intentaste contactarla preguntó intentando mantener la compostura porque no era mi lugar claris hizo su elección y yo bueno no era el tipo de persona que podía ofrecerle algo mejor Enrique se levantó amente procesando todo lo que acababa de escuchar miró a Lucio sintiendo una mezcla de gratitud y amargura gracias por decirme la verdad es más de lo que esperaba Lucio asintió pero no dijo nada más mientras Enrique salía de la casa el viaje de regreso a la mansión fue

silencioso con el peso de la revelación hundiéndose a claris todavía pero también sabía que esta verdad cambiaría todo al llegar a casa encontró a Marta en la cocina preparando la cena la llamó aparte y le contó lo que había descubierto Marta escuchó con atención su rostro reflejando una mezcla de sorpresa y preocupación esto lo cambia todo señor Enrique pero necesita tener cuidado claris no es alguien que acepte ser descubierta sin luchar lo sé Marta por eso no le diré nada al menos por ahora Quiero ver si ella misma se delata Marta asintió pero su preocupación

no desapareció sabía que el camino que Enrique estaba tomando era peligroso pero también entendía que la verdad debía salir a la luz esa noche Enrique observó a Isabela mientras jugaba con un rompecabezas en la sala la niña parecía tranquila ajena a las tormentas que se libraban a su alrededor Enrique sintió una oleada de ternura y protección hacia ella sabía que independientemente de lo que sucediera debía asegurarse de que Isabela estuviera a salvo y de que nunca sintiera el abandono que su madre le había impuesto años atrás claris por su parte parecía sospechar que algo había

cambiado aunque no había dicho nada directamente sus movimientos eran más cuidadosos y sus miradas hacia Enrique eran más largas y analíticas Enrique lo notó pero decidió no reaccionar sabía que la paciencia sería su mejor aliada en este momento Durante los días siguientes Enrique observó a clar con más atención que nunca buscando cualquier señal que revelara lo que ella sabía o planeaba Mientras tanto Martha continuaba vigilándome a la luz y Enrique sabía que la verdad completa estaba más cerca que nunca sin embargo también sabía que el enfrentamiento final con clarice sería Inevitable Y que cuando llegara

el momento nada volvería a ser igual la noche cayó sobre la mansión pero el ambiente dentro era más pesado que el oscuro cielo exterior Enrique armado con la verdad que había reunido sabía que era el momento de confrontar a claris la paciencia que había sostenido hasta ahora se había agotado y las piezas del rompecabezas finalmente encajaban la verdad ya no podía ser ignorada claris estaba en el salón leyendo un libro que parecía no captar su atención cuando Enrique entró dejó el libro a un lado y lo miró con una mezcla de curiosidad y cautela qué

sucede preguntó con una sonrisa tensa que no alcanzaba sus ojos Enrique no respondió de inmediato caminó hacia la ventana observando el exterior como si buscara en la oscuridad la claridad para las palabras que necesitaba pronunciar he estado pensando mucho últimamente claris sobre nosotros sobre esta casa y sobre Isabela claris mantuvo su expresión tranquila pero Enrique notó como sus manos se tensaba sobre los brazos del sillón Y qué has estado pensando dijo con un tono que intentaba parecer indiferente Enrique se giró para mirarla directamente he hablado con Lucio el color pareció abandonar el rostro de clarice

Por un instante pero rápidamente recuperó La compostura Lucio no sé por qué lo mencionas ahora es alguien del pasado no tiene nada que ver con nosotros Enrique dio un paso hacia ella manteniendo su mirada firme tiene todo que ver con nosotros clarice Me contó lo que hiciste me contó sobre tu hija sobre cómo la abandonaste el silencio que siguió fue ensordecedor clarice intentó responder pero las palabras parecían atascarse en su garganta finalmente se levantó del sillón con una expresión que mezclaba ira y defensa Qué derecho tienes a juzgar no conoces las circunstancias no sabes lo

que estaba pasando en ese momento Entonces explícame claris Dime por qué decidiste abandonar a tu hija y seguir con tu vida como si nada hubiera pasado Dime por qué nunca mencionaste nada ni siquiera cuando Isabela llegó a esta casa claris comenzó a caminar de un lado a otro como si buscara las palabras correctas para defenderse no fue una decisión fácil estaba sola sin recursos Lucio no fue de ayuda y yo simplemente no podía pensé que era lo mejor para ella que en un orfanato tendría una oportunidad que yo no podía darle y por eso decidiste

olvidarla Enrique la interrumpió su voz más firme que nunca por eso nunca intentaste buscarla no la olvidé respondió clarice con los ojos llenos de Lágrimas contenidas pero sí intenté seguir adelante qué querías que hiciera que arruinara mi vida por algo que no podía cambiar Enrique sintió una mezcla de incredulidad y rabia ante sus palabras no se trata de arruinar tu vida clarice se trata de asumir la responsabilidad y no me digas que no podías cambiarlo porque ahora sé que todo lo que has hecho desde que Isabela llegó aquí ha sido para protegerte a ti misma

no a ella claris lo miró fijamente como si estuviera considerando sus próximas palabras con extremo cuidado sí la abandoné pero no fue como tú crees Lucio insistió en que la llevara al orfanato yo yo nunca estuve de acuerdo pero no tuve elección Enrique negó con la cabeza sin apartar la mirada de ella siempre hay una elección claris y tú elegiste el camino más fácil para ti no para ella claris dio un paso hacia él con los ojos llenos de una mezcla de Súplica y desafío Y qué esperas que haga ahora que me arrodille y pida

perdón nada de lo que diga cambiará lo que pasó No espero que camb el pasado Pero sí espero que admitas tus errores y dejes de vivir esta mentira claris permaneció en silencio por un momento y luego dejó escapar un suspiro profundo está bien henrique Sí Isabela es mi hija la dejé porque pensé que sería lo mejor pero si ella está aquí ahora no significa que las cosas de alguna manera se resolvieron la frialdad en sus palabras hizo que Enrique sintiera un peso aún mayor en el pecho Esto no se trata de ti claris esto se

trata de ella y a partir de este momento tú no tendrás nada que ver con su vida claris lo miró incrédula qué quieres decir con eso quiero decir que este matrimonio ha terminado quiero que recojas tus cosas y te vayas de esta casa hoy mismo las palabras de Enrique cayeron como una sentencia Clarisa abrió la boca para protestar pero algo en la firmeza de su mirada la hizo callar no puedes hacer esto Dijo finalmente con un tono que que intentaba sonar desafiante pero que estaba lleno de miedo sí puedo y lo haré Porque Isabela merece

estar rodeada de personas que la valoren y la protejan algo que tú no has hecho clarice se quedó en silencio como si finalmente entendiera que había perdido sin decir una palabra más salió de la habitación Dejando a Enrique solo con sus pensamientos esa noche Enrique le explicó a Marta lo sucedido la mujer aunque sorprendida lo apoyó en su decisión es lo mejor señor Enrique Isabela necesita estabilidad y claris nunca iba a ofrecérsela Mientras tanto Isabela ajena a lo que había ocurrido dormía plácidamente en su habitación Enrique la observó desde la puerta sintiendo una mezcla de

alivio y tristeza sabía que el camino no Sería fácil pero estaba decidido a darle a la niña el futuro que merecía el aire en la mansión se sentía más ligero tras la partida de clarice pero para Enrique el tiempo se había convertido en un reloj constante que marcaba su Inevitable final Cada día que pasaba su cuerpo le recordaba que la enfermedad avanzaba implacable aún así su espíritu no estaba dispuesto a Rendirse hasta que todo estuviera en orden había una tarea que debía completar una última acción que aseguraría el futuro de Isabela y le daría la

paz que tanto necesitaba una noche mientras la casa dormía en que se sentó en su escritorio la luz de la lámpara proyectaba una cálida penumbra en el despacho donde los recuerdos y los años acumulados parecían observarlo en silencio frente a él un papel en blanco esperaba ser llenado con las palabras que su corazón llevaba meses acumulando tomó la pluma con manos temblorosas pero con una determinación que no flaqueaban la carta dirigiéndose a Isabela sintiendo que cada palabra debía ser tan precisa como honesta querida Isabela si estás leyendo esto significa que ya no estoy contigo pero

quiero que sepas que donde sea que esté mi amor por ti sigue siendo tan fuerte como lo fue en cada día que compartimos escribir estas palabras No es fácil pero siento que es necesario para que comprendas lo importante que eres y siempre serás para mí Enrique hizo una pausa respirando profundamente miró por la ventana donde la luna iluminaba el jardín que tantas veces había compartido con Isabela y continuó Cuando llegaste a mi vida yo era un hombre perdido lleno de arrepentimientos y cargado con una soledad que parecía interminable Pero tú con tu inocencia y tu

luz transformaste mis días me diste una razón para sonreír de nuevo algo que pensé que nunca volvería a hacer eres mi mayor regalo y por eso quiero que sepas toda la verdad Incluso si duele Enrique tomó un s de agua antes de seguir escribiendo sabía que lo que estaba a punto de revelar cambiaría todo para Isabela pero también sabía que ella merecía conocer su origen la verdad es que clarice la mujer que vivió contigo y conmigo es tu madre biológica durante años ocultó este hecho probablemente porque enfrentar el pasado le resultaba demasiado doloroso o complicado

ella tomó decisiones que no puedo justificar ni perdonar pero que espero que tú con el tiempo pued entender te abandonó cuando era solo un bebé creyendo que sería lo mejor para ti Y aunque sus acciones fueron crueles Quiero que sepas que tú nunca fuiste culpable de nada todo lo que ocurrió fue el reflejo de las decisiones de los adultos que debían protegerte y no lo hicieron se detuvo dejando que el peso de esas palabras se asentara en la hoja antes de continuar sin embargo lo que importa ahora es el futuro te he dejado todo lo

que tengo no solo porque creo que es lo correcto sino porque Confío en que sabrás cómo usarlo para construir una vida llena de alegría amor y propósito esta herencia no es solo material es un símbolo de la confianza que tengo en ti y de lo que creo que puedes lograr henrique se inclinó hacia atrás en su silla recordando cada momento que había compartido con Isabela los paseos por el jardín las tardes jugando a juegos de mesa las noches en las que ella le leía cuentos por porque a veces la enfermedad no le permitía hacerlo cada

recuerdo lo llenaba de una mezcla de tristeza y gratitud Quiero que sepas Isabela que fuiste la luz en mis últimos años me diste esperanza cuando ya no quedaba nada y por eso te estaré Eternamente agradecido Marta quien siempre estuvo a nuestro lado será tu guía y apoyo confío plenamente en ella para ayudarte a navegar esta nueva etapa de tu vida Enrique sintió que sus manos temblaban más pero no se detuvo Había algo más que debía decir algo que llevaba en su corazón desde el día en que Isabela llegó a su vida siempre recuerda esto la

familia no siempre está definida por la sangre sino por el amor y la conexión que compartimos aunque claris te dio la vida quiero que sepas que para mí siempre serás mi hija una parte de mí vivirá siempre contigo en Tus recuerdos y en las decisiones que tomes sé fuerte sé valiente y sobre todo sé feliz las lágrimas comenzaron a rodar por sus mejillas mientras firmaba la carta con un pulso tembloroso pero firme con todo mi amor Enrique dobló cuidadosamente la carta y la colocó en un sobre con el nombre de Isabela escrito en letras claras

lo guardó en un cajón especial de su escritorio con instrucciones claras para Marta de entregárselo cuando fuera el momento a la mañana siguiente Enrique encontró a Marta en la ca preparando el desayuno la llamó aparte y le entregó el sobre Marta esta carta es para Isabela quiero que se la des cuando yo ya no esté es importante que la reciba y Confío en que sabrás cuándo sea el momento adecuado Marta tomó el sobre con manos firmes aunque su expresión reflejaba la tristeza que sentía lo haré señor Enrique lo prometo Enrique asintió Agradecido por su lealtad

mientras Isabela entraba coro la cocina con una sonrisa Enrique sintió que a pesar de todo había logrado lo que se había propuesto asegurar que el amor y la verdad prevalecian Incluso en su ausencia los días posteriores a la muerte de Enrique trajeron consigo un silencio pesado a la mansión Isabela Aunque Demasiado joven para comprender completamente la magnitud de la pérdida sentía un vacío que nada parecía llenar Enrique había sido su refugio su faro en un mundo que a menudo le había parecido confuso y difícil ahora con su ausencia todo parecía más grande y abrumador Marta

se encargó de organizar los asuntos pendientes asegurándose de que todo estuviera en orden según los deseos de Enrique era un trabajo que realizaba con una mezcla de dolor y determinación sabía que su responsabilidad con Isabela iba Más allá de los deberes habituales ahora era su tutora la figura que debía guiarla y protegerla la lectura del testamento fue un evento sobrio realizado en el despacho de Enrique el abogado el drct Álvaro explicó con cuidado los detalles de la herencia dirigiéndose principalmente a marha quien estaba allí para representar los intereses de Isabela henrique dejó todo perfectamente organizado

dijo Álvaro con un tono que intentaba ser reconfortante Isabela es la heredera principal la fortuna las propiedades incluso los negocios han sido puestos bajo un fideicomiso que usted Marta administrará hasta que ella sea mayor de edad Marta asintió Aunque la magnitud de la responsabilidad la hacía sentirse pequeña miró a Isabela que estaba sentada en un sillón cercano abrazando a su inseparable Osito de peluche señor Álvaro puede estar seguro de que cumpliré con todo lo que Enrique deseaba Isabela será mi prioridad el abogado asintió con aprobación Enrique confiaba plenamente en usted y yo también cuando la

reunión terminó Marta llevó a Isabel al jardín donde solían pasear con Enrique se arrodilló frente a la niña y le tomó las manos con delicadeza Isabela Quiero que sepas que no estás sola Enrique me pidió que cuidara de ti y voy a hacerlo con todo mi corazón esta será nuestra casa y juntos encontraremos una manera de hacer que la cosas mejoren Isabela con su mirada sabia y profunda asintió lentamente extraño a Enrique pero sé que él quería que estuviéramos bien yo también voy a hacer lo mejor que pueda Marta las palabras de la niña conmovieron

a marha profundamente en ese momento se prometió a sí misma que Haría todo lo posible para honrar el legado de Enrique y darle a Isabela la vida que él había imaginado para ella mientras tanto clar desapare sin previo aviso las pocas pertenencias que había dejado en la mansión Fueron retiradas por un mensajero sin explicación alguna Aunque nadie sabía exactamente a dónde había ido las especulaciones eran inevitables algunos decían que se había mudado a otra ciudad para comenzar de nuevo mientras que otros creían que su culpa la había llevado a aislarse del mundo Isabela nunca preguntó

por clariz y Marta decidió no mencionarla pensando que lo mejor era dejar el pasado atrás con el tiempo La Mansión comenzó a transformarse en un lugar de Esperanza Marta organizó pequeños proyectos para mantener a Isabela ocupada y ayudarla a adaptarse a su nueva realidad juntas plantaron un jardín en memoria de Enrique lleno de flores que representaban los momentos felices que compartieron con él un día mientras revisaban algunos documentos antiguos Marta encontró la carta que Enrique había dejado para Isabela sabía que había llegado el momento de entregársela llevó a la niña al despacho y le explicó

con cuidado Isabela Enrique dejó esto para ti quería que lo leyeras cuando estuvieras lista creo que ahora es el momento la niña tomó el sobre con manos temblorosas pero con una expresión de determinación en el rostro se sentó en el sillón favorito de Enrique y abrió la carta con cuidado mientras leía las lágrimas comenzaron a rodar por sus mejillas Pero no eran de tristeza sino de una mezcla de amor y gratitud cuando terminó miró a Marta con una sonrisa llena de resolución Enrique quería que usara lo que me dejó para ayudar a otros como él

me ayudó a mí eso es lo que voy a hacer Marta la abrazó con fuerza sintiendo un profundo orgullo por la niña que estaba criando en los meses siguientes Isabela comenzó a trabajar en pequeños proyectos comunitarios con la ayuda de Marta y el apoyo del fideic que Enrique había establecido transformaron una parte de la mansión en un centro para niños necesitados ofreciendo clases alimentos y un lugar seguro para jugar La sonrisa de Isabel al ver a otros niños encontrar felicidad en lo que una vez había sido su hogar era el reflejo del legado de Enrique

los años pasaron e Isabela creció para convertirse en una joven fuerte y decidida nunca olvidó las lecciones que Enrique le enseñó ni el sacrificio que hizo para asegurarse de que ella tuviera un futuro mejor la promesa que le hizo a Marta aquel día en el jardín se convirtió en la guía de su vida honrar el amor y la bondad que recibió transformando las vidas de quienes la rodeaban Aunque Enrique ya no estaba físicamente presente su espíritu vivía en cada acción de Isabela en cada niño que sonreía gracias a sus esfuerzos y en cada flor que

florecía en el jardín que plantaron en su memoria La Mansión que una vez fue un símbolo de Soledad ahora era un faro de esperanza y amor