DOS HERMANOS HUÉRFANOS ESCAPAN DEL ORFANATO Y AYUDAN A UNA ANCIANA, ¡LO QUE PASA CAMBIARÁ SUS VIDAS!

en un rincón apartado de Guadalajara donde las calles empedradas se llenaban de charcos durante la temporada de lluvias vivía Doña dolores a sus 76 años su cabello plateado brillaba bajo la tenue luz del sol que entraba por las ventanas de su pequeña casa Era una construcción Modesta de paredes pintadas con cal que ya mostraban grietas y un techo de Tejas rojizas que resistía valientemente el paso del tiempo dolores pasaba la mayor parte de sus días en completo sileno Con excepción del Tic Tac de un viejo reloj de pared y el ruido ocasional de los pájaros

que se posaban en el patio trasero la soledad había invadido su vida años atrás cuando sus hijos Miguel y Leticia comenzaron a alejarse lentamente lo que empezó con visitas cada domingo se convirtió en llamadas esporádicas y finalmente en un silencio prolongado que dolía más que cualquier palabra en la víspera de Navidad mientras las demás casas de la vecindad vibraban con el bullicio de risas y canciones dolores preparaba su propia cena en la pequeña cocina el aroma de frijoles recién cocidos y tortillas calientes llenaba el aire encima de la mesa de madera que mostraba marcas de

los años había colocado un par de velas y un plato con tamales que había comprado en el mercado aquella mañana aunque los tamales eran deliciosos para dolores carecían del sabor que solo la compañía de seres queridos podía dar al otro lado de la calle los vecinos organizaban una posada las luces de colores adornaban las ventanas y los niños corrían con bengalas en las manos sus risas iluminaban el ambiente tanto como las velas dolores se acercó a la ventana de su sala y observó el espectáculo pero pronto apartó la mirada Ellos tienen a quien celebrar pensó

mientras se dirigía al Rincón más acogedor de su casa donde tenía su silla de madera con un cojín gastado allí con un suéter tejido que la abrigaba del frío de diciembre se sentó a contemplar la única decoración navideña que mantenía una pequeña figura del Niño Jesús dentro de un pesebre de cerámica ese pesebre había sido un regalo de su difunta madre y era uno de los pocos objetos que todavía le traían Consuelo dolores recordó las navidades de antaño cuando Miguel y Leticia eran niños su esposo Julián solía llegar con piñatas y bolsas llenas de dulces

para los pequeños en esas épocas la casa rebosaba de vida el aroma del ponche con canela y guayaba llenaba cada Rincón y los cantos de villancicos resonaban hasta altas horas de la noche dolores cerró los ojos aferrándose a esos recuerdos sin embargo su realidad era otra su esposo había muerto hacía más de 15 años dejando un vacío que nunca pudo llenar sus hijos aunque agradecidos en su niñez parecían haberse olvidado de ella con el paso del tiempo Miguel el mayor vivía en la Ciudad de México y trabajaba como ingeniero cuando la llamaba lo hacía con

prisa hablando más de sus problemas que preguntando por los de ella Leticia la menor se había mudado a Los Ángeles donde se dedicaba a la venta de bienes raíces sus mensajes eran breves casi como si fueran una obligación esa noche dolores decidió salir al patio trasero buscando un poco de aire fresco en el centro del patio había un viejo árbol de naranjo que Julián había plantado cuando se casaron Aunque ya no daba frutos su sombra seguía siendo un refugio en los días calurosos se sentó en una silla de hierro oxidado envolviéndose en un chal que

tejió hace años el frío de la noche parecía abrazarla pero no de la manera cálida que necesitaba levantó la vista al cielo estaba despejado y las estrellas brillaban con una intensidad que no recordaba haber visto en mucho tiempo por qué sigo aquí murmuró en voz baja casi como si hablara consigo misma sus ojos se llenaron de Lágrimas y aunque intentó contenerlas terminaron deslizándose por sus mejillas dolores se sentía como una hoja olvidada por el viento atrapada en un rincón donde nadie la veía Si tan solo alguien me recordara pensó mientras las lágrimas seguían cayendo no

esperaba que nadie la buscara esa noche ni siquiera sus hijos pero el destino tenía otros planes esa misma noche mientras dolores miraba al cielo en busca de respuestas dos pequeños caminaban sin rumbo por las calles cercanas enfrentando su propia batalla sus caminos estaban a punto de cruzarse y nada volvería a ser igual en la misma ciudad no muy lejos de la casa de dolores Santiago de 11 años y su hermana Isabela de nue caminaban descalzos por una calle oscura y empedrada la noche era fría y el viento helado parecía colarse por entre los agujeros de

sus chaquetas desgastadas ambos sostenían una pequeña mochila que apenas contenía un par de mudas de ropa y un Osito de peluche al que Isabela se aferraba con todas sus fuerzas sus rostros estaban marcados por la desesperación y el cansancio habían escapado del orfanato hacía unas horas pero las palabras de advertencia de los encargados todavía resonaban en sus mentes intentan huir los encontraremos no tienen a donde ir a pesar de esto Santiago sabía que quedarse no era una opción El orfanato que a simple vista parecía Un refugio para niños desamparados era en realidad un lugar de

sufrimiento los encargados una pareja de mediana edad con rostros fríos y miradas calculadoras trataban a los niños como si fueran una carga las comidas eran escasas y los castigos excesivos Santiago aún tenía marcas en las piernas de la última vez que se atrevió a hablar en defensa de su hermana aquella noche después de que Isabela recibiera una bofetada injusta por derramar un vaso de agua Santiago tomó la decisión mientras los demás niños dormían en Camas chirriantes dentro de un cuarto oscuro y sin calefacción Santiago despertó a su hermana Isabela Tenemos que irnos la pequeña Lo

miró con ojos llenos de miedo A dónde Santiago no tenemos a nadie él apretó los labios tratando de parecer más fuerte de lo que se sentía No lo sé pero no puedo permitir que nos sigan lastimando con cuidado recogieron lo poco que tenían y escaparon por una ventana que daba al patio trasero corrieron entre sombras con el corazón latiendo a toda velocidad temiendo que alguien los descubriera ahora mientras avanzaban por las calles silenciosas Santiago sentía el peso de la responsabilidad sobre sus hombros Isabela Aunque era valiente comenzaba a mostrar señales de agotamiento Santiago Tengo frío

dijo con voz temblorosa abrazando El peluche que solía pertenecer a su madre lo sé Isa encontraremos un lugar donde podamos calentarnos Te lo prometo pero las promesas eran difíciles de cumplir cada esquina parecía más desolada que la anterior y las luces de las casas apenas eran un recordatorio de lo lejos que estaban de un hogar Isabel tropezó y cayó al suelo soltando un pequeño gemido Santiago se apresuró a ayudarla pero al hacerlo notó que tenía lágrimas en los ojos si te gustan las historias interesantes deja tu like suscríbete a nuestro canal y activa las notificaciones

para estar al tanto de toda nuestra programación y cuéntanos en los comentarios desde donde estás viendo este video nos encantaría saber de ti no puedo más Santi me duele todo él se arrodilló frente a ella sujetándola por los hombros escucha Isa no podemos rendirnos mamá siempre decía que somos fuertes recuerdas aunque pronunciaba las palabras con determinación sus propios ojos brillaban con lágrimas que se esforzaba por contener Isabel asintió limpiándose la nariz con la manga de su chaqueta juntos continuaron caminando guiados únicamente por las luces lejanas que parecían prometer algo mejor a lo lejos Santiago divisó

una casa diferente a las demás su apariencia Modesta no era lo que llamó su atención sino la figura de una mujer sentada en el patio trasero ella miraba al cielo con una expresión que Santiago reconoció al instante era tristeza una tristeza que aunque no lo entendía del todo le resultaba familiar visa Ven vamos a acercarnos y si se enoja y si nos corre No lo sé pero vale la pena intentarlo con pasos lentos y cautelosos los dos niños se aproximaron a la cerca de madera que rodeaba la casa Santiago respiró hondo Antes de hablar señora

está bien dolores se sobresaltó ligeramente Al escuchar la voz de un niño se giró y vio a los dos pequeños de pie sus siluetas apenas visibles bajo la tenue luz de un poste cercano por un momento su corazón se detuvo Había algo en sus ojos especialmente en los del niño mayor que la conmovió profundamente Quiénes son ustedes preguntó su voz reflejando más curiosidad que desconfianza somos Santiago titubeó sin saber cómo explicar su situación solo tenemos frío y hambre interrumpió Isabela con el Osito de peluche apretado contra su pecho dolores los observó en silencio su mente

llenándose de preguntas finalmente se levantó de su silla y les hizo una señal con la mano vengan entren aquí no hace tanto frío Santiago y Isabela dudaron intercambiando miradas pero el olor a café recién hecho que salía de la casa Fue suficiente para convencerlos esa noche en medio de una situación inesperada el destino comenzaba a tejer un vínculo entre tres almas solitarias que cambiaría sus vidas para siempre Santiago e Isabela entraron tímidamente a la casa de dolores sus pasos resonaban en el suelo de madera vieja dolores aún tratando de entender la repentina aparición de los

niños cerró la puerta tras ellos protegiéndolos del frío que se colaba desde la calle la sala estaba iluminada por una lámpara tenue y el aroma del café llenaba el aire mezclándose con el olor a leña que venía de una pequeña estufa siéntense niños dolores señaló un sofá desgastado Pero limpio cubierto con una manta tejida a mano Santiago y Isabela se miraron con algo de incertidumbre antes de sentarse ambos con las manos apretadas en sus regazos dolores los observó en silencio por un momento algo en ellos le recordaba a sus propios hijos cuando eran pequeños Pero

había un diferencia estos niños tenían una tristeza que iba Más allá de lo que sus edades deberían cargar de dónde vienen preguntó mientras vertía café caliente en dos tazas pequeñas no tenemos a dónde ir respondió Santiago evitando los ojos de la mujer su voz era firme Pero había un rastro de miedo en ella dolores dejó las tazas en una mesita frente a ellos y se sentó en una silla cercana la luz cálida de la lámpara ilumin sus rostros revelando las marcas de fatiga en los niños y la preocupación en la mujer y sus padres continuó

dolores con una voz suave pero cargada de curiosidad Isabela bajó la mirada aferrándose aún más fuerte al Osito de peluche Santiago tragó saliva antes de responder murieron hace un año en un accidente desde entonces vivimos en un orfanato hizo una pausa como si las palabras fueran pesadas para salir pero ese lugar no era bueno dolores sintió un nudo en el estómago sus manos arrugadas por los años se entrelazaron sobre su regazo mientras intentaba procesar lo que acababa de escuchar qué quieren decir con no era bueno Santiago miró a Isabela quien asintió lentamente dándole permiso para

hablar nos trataban mal nos pegaban nos gritaban nos dejaban sin comer si hacíamos algo mal no podíamos quedarnos ahí más tiempo dolores cerró los ojos por un momento sintiendo una oleada de indignación y tristeza al imaginar a los niños soportando semejantes cosas Lo siento mucho niños nadie debería pasar por algo así un silencio incómodo llenó la sala por unos momentos dolores se levantó y fue a la cocina regresando con un plato de pan dulce y leche caliente coman necesitan recuperar fuerzas los niños se lanzaron sobre la comida con una mezcla de hambre y agradecimiento dolores

los observó mientras comían sus pensamientos giraban a toda velocidad no sabía qué haría con ellos pero lo que tenía claro era que no podía dejarlos regresar a ese lugar cuando terminaron de comer Isabela habló por primera vez desde que entraron a la casa señora Gracias por todo esto pero no tiene miedo de que alguien nos busque Dolores frunció El ceño preocupada pero determinada si vienen hablaremos no dejaré que nadie les haga daño Mientras estén aquí las palabras de dolores fueron como un bálsamo para Santiago e Isabela quienes sintieron por primera vez en mucho tiempo una

chispa de seguridad Santiago sin embargo sabía que no podían quedarse indefinidamente no queremos causarle problemas nos os pronto lo prometo dolores Lo miró con una mezcla de compasión Y firmeza no van a ir a ningún lado esta noche descansen mañana veremos qué hacer Ella les indicó una habitación pequeña al final del pasillo había dos camas individuales cubiertas con colchas de colores vibrantes tejidas a mano los niños entraron y miraron alrededor como si nunca hubieran visto un lugar tan acogedor es esto pero está limpio duerman bien Santiago e Isabela se acostaron Aunque el cansancio físico no

era suficiente para calmar la tormenta de pensamientos en sus mentes Mientras tanto dolores se quedó sentada en su silla en la sala mirando el pequeño pesebre sobre una repisa qué voy a hacer con ellos pensó sintiendo una mezcla de responsabilidad y miedo por primera vez en años su soledad había sido interrumpida pero con esa interrupción también llegaban riesgos que no podía ignorar dolores sabía que el destino no había traído a esos niños a su puerta Por casualidad ahora le tocaba decidir qué haría con este nuevo giro en su vida el sol apenas comenzaba a despuntar

en el Horizonte cuando dolores abrió los ojos había dormido poco atormentada por pensamiento sobre los dos pequeños que descansaban en la habitación al final del pasillo la mujer que llevaba años enfrentando la soledad ahora se encontraba con una inesperada responsabilidad se levantó con cuidado evitando hacer ruido y se dirigió a la cocina mientras encendía la estufa para calentar agua sus pensamientos se entrelazaban entre la compasión que sentía por Santiago e Isabela y el temor de las posibles consecuencias de mantenerlos en su casa Poco después los niños aparecieron en la puerta de la cocina Santiago tenía

los ojos hinchados de cansancio mientras que Isabela aún abrazando su Osito de peluche mostraba una expresión mezcla de curiosidad y timidez dolores sonrió suavemente Buenos días Espero que hayan dormido bien Isabela asintió tímidamente mientras Santiago respondió con una voz apenas audible Sí gracias Señora Dolores sirvió café para sí misma y leche caliente para los niños colocó pan sobre la mesa y los animó a comer mientras lo hacían los observaba con atención Santiago comía rápido como si estuviera acostumbrado a que le quitaran la comida Isabela en cambio mordía el pan lentamente mirando alrededor como si aún

no pudiera creer que estaban en un lugar seguro después de un rato dolores rompió el silencio anoche me contaron algo de su historia pero quiero entender Más Por qué nadie los Busca Santiago dejó su taza sobre la mesa sus manos temblaban ligeramente porque no les importamos en El orfanato no se preocupan por nosotros solo quieren que sigamos sus reglas Isabela con una voz más suave agregó y si nos encuentran nos castigará nos harán cosas peores por haber escapado dolores sintió un nudo en el pecho las palabras de los niños resonaban con una tristeza y un

miedo que no podía ignorar aquí nadie les hará daño dijo con firmeza Mientras estén conmigo están seguros Santiago la miró directamente a los ojos buscando señales de duda en sus palabras pero no encontró ninguna Por qué nos ayuda ni siquiera nos conoce dolores respiró hondo antes de responder tal vez no los conozco pero sé lo que es estar sola he pasado muchos años sintiéndome olvidada como si ya no era un propósito ustedes ustedes me recuerdan que todavía puedo hacer algo bueno las palabras de dolores dejaron a los niños en silencio Había algo en su voz

que los hacía sentirse entendidos como si por primera vez en mucho tiempo alguien realmente se preocupara por ellos más tarde mientras los niños ayudaban a recoger la mesa Santiago observó a través de la ventana y se tensó y hay un auto estacionado afuera dijo en un susurro urgente apartándose de la vista dolores se acercó con rapidez y miró discretamente por la cortina era un auto negro estacionado al otro lado de la calle no parecía pertenecer a ninguno de los vecinos tal vez solo es alguien que se detuvo por un momento dijo Aunque su voz No

sonaba tan convincente como quería Santiago negó con la cabeza no Ellos nos buscan estoy seguro dolores sintió una oleada de preocupación pero trató de mantener la calma escuchen no haremos nada que llame la atención quédense aquí adentro y no se acerquen a las ventanas voy a hacer una llamada fue al teléfono fijo que tenía en la sala y marcó un número que no había usado en años Carmen Soy dolores necesito tu ayuda Carmen era una vieja amiga de dolores una asistente social retirada que solía ar con casos de niños en situaciones difíciles aunque no habían

hablado en mucho tiempo dolores sabía que podía confiar en ella dolores Qué pasa preguntó Carmen con Tono preocupado tengo dos niños conmigo escaparon de un orfanato donde los maltrataban creo que los están buscando Pero no puedo dejar que los encuentren hubo un Silencio en la línea antes de que Carmen respondiera entiendo No te preocupes Voy a ayudarte puedes mantenerlos seguros por ahora sí pero no sé Por cuánto tiempo tengo una amiga que vive en una zona rural lejos de aquí se llama Jacinta es una mujer confiable y tiene espacio en su casa pueden quedarse allí

mientras resolvemos esto dolores agradeció la ayuda y colgó pero su mente seguía llena de inquietud tendrían que planear cuidadosamente su partida Y eso significaba que la tranquilidad que habían encontrado en su hogar sería breve regresó a la cocina donde los niños la esperaban con ojos llenos de preguntas vamos a irnos esta noche tengo un lugar seguro para ustedes pero necesitamos ser cuidadosos Santiago asintió con seriedad mientras Isabela agarraba su osito con más fuerza dolores les dio un abrazo rápido algo torpe pero lleno de cariño y los tres comenzaron a prepararse para la próxima etapa de

su inesperada travesía el peligro acechaba pero dolores sabía que no podía Rendirse por primera vez en años sentía que tenía una razón para luchar la noche cayó sobre Guadalajara trayendo consigo un silencio inquietante que parecía envolver la casa de dolores afuera el auto negro seguía estacionado sus ventanas oscuras ocultaban cualquier señal de quienes estaban dentro Santiago pegado a la ventana apenas respiraba mientras intentaba observar sin ser visto siguen ahí susurró con un tono de alarma dolores lo apartó suavemente de la ventana y corrió la cortina para ocultarlos Mejor tranquilo hijo no dejaremos que nos encuentren

pero su corazón l tía con fuerza Aunque intentaba mantenerse firme sabía que la situación era peligrosa quienes buscaban a los niños no eran personas dispuestas a retroceder fácilmente en ese momento el teléfono sonó rompiendo el silencio de la casa dolores se apresuró a contestar antes de que el ruido pudiera alertar a los ocupantes del auto Hola dijo en voz baja dolores Soy Carmen respondió la voz al otro lado de la línea Jacinta está lista para recibirlos pero necesitan salir cuanto antes Esos hombres no se Irán hasta que los encuentren dolores suspiró agradecida por la ayuda

de su amiga pero consciente de que la fuga no sería sencilla entendido Nos iremos esta noche dolores ten mucho cuidado estas personas pueden ser peligrosas la advertencia de Carmen Se quedó grabada en su mente mientras colgaba miró a los niños que estaban sentados juntos en el sofá con expresiones de miedo y cansancio vamos a empacar Lo esencial dijo con una calma que apenas podía sostener solo llevaremos lo necesario Santiago asintió con determinación y ayudó a Isabela a guardar su Osito de peluche y algunas prendas en la mochila dolores por su parte llenó una bolsa con

comida y un botiquín básico sabía que el viaje no Sería fácil pero no podían permitirse perder tiempo afuera el motor del auto negro rugió brevemente haciendo que todos se taran dolores apagó las luces de la casa dejando solo una lámpara pequeña en la sala para no llamar la atención escuchen niños comenzó en voz baja saldremos por la puerta trasera caminaremos sin hacer ruido hasta la esquina donde tomaremos un taxi tienen que ser fuertes y seguirme sin dudar entendido Sí señora respondió Santiago con firmeza tomando la mano de Isabela que apretó su osito contra el pecho

con fuerza el aire frío de la noche los envolvió al salir al patio trasero dolores llevaba una linterna apagada confiando en la tenue luz de la luna para guiarlos cada paso crujía ligeramente en la grava del suelo y el miedo a ser descubiertos hacía que el trayecto pareciera interminable cuando finalmente llegaron a la esquina dolores levantó una mano para detener un taxi el vehículo un modelo viejo con pintura desgastada se detuvo frente a ellos y el conductor bajó la ventana A dónde señora preguntó mirándolos con curiosidad a la terminal de autobuses por favor el conductor

asintió y todos subieron al vehículo mientras se alejaban dolores miró por la ventana trasera viendo como el auto negro seguía estacionado frente a su casa su pecho se apretó pero decidió enfocarse en el siguiente paso la terminal estaba casi vacía cuando llegaron las luces fluorescentes iluminaban el lugar con un brillo frío y El eco de sus pasos resonaba en el suelo de baldosas dolores se acercó a la taquilla y pidió boletos para el primer autobús que saliera hacia las afueras de la ciudad el próximo sale en 15 minutos informó el empleado mientras imprimía los boletos

dolores agradeció y condujo a los niños hacia un rincón donde podían esperar sin ser notados Santiago alerta observaba a su alrededor buscando cualquier señal de peligro cree que nos sigan hasta aquí preguntó en voz baja No lo sé hijo pero si lo hacen estaremos preparados cuando finalmente abordaron el autobús los tres se acomodaron En los asientos traseros dolores colocó la bolsa con provisiones a sus pies y se aseguró de que los niños estuvieran bien cubiertos con las mantas que había traído el vehículo comenzó a moverse dejando atrás las luces de la terminal y sumergiéndolos en

la oscuridad de la carretera Isabela agotada se quedó dormida con la cabeza apoyada en el hombro de Santiago quien permanecía despierto Mirando por la ventana con el ceño fruncido dolores por su parte cerró los ojos por un momento tratando de calmar la tormenta de pensamientos en su mente sabía que lo más difícil aún estaba por venir pero también sentía una chispa de esperanza al pensar en Jacinta y su refugio A pesar del peligro que los acechaba había algo en estos niños que le daba fuerzas para seguir adelante por primera vez en mucho tiempo dolores sentía

que tenía un propósito Aunque ese propósito venía acompañado de incertidumbre y miedo el autobús continuó su camino dejando atrás la ciudad y adentrándose en un destino desconocido donde el destino de dolores Santiago e Isabela cambiaría para siempre el autobús avanzaba lentamente por la carretera oscura su motor rugía mientras subía una colina que ofrecía vistas de las luces lejanas de Guadalajara dentro el silencio reinaba entre los pasajeros muchos de ellos dormitando o absortos en sus propios pensamientos sin embargo en los últimos asientos dolores Santiago e Isabela estaban lejos de relajarse dolores miraba por la ventana su

rostro iluminado por el reflejo de las luces del autobús cada sombra en el el camino le parecía sospechosa cada curva un posible lugar donde Alguien podría estar esperando a su lado Isabela dormía profundamente todavía aferrada a su Osito de peluche mientras Santiago se mantenía alerta observando con atención cada movimiento en el interior del autobús Santiago intenta descansar un poco susurró dolores Aunque sabía que sus palabras no tendrían efecto no puedo señora y si nos están siguiendo respondió él en voz baja con el ceño fruncido dolores puso una mano en su hombro tratando de tranquilizarlo estamos

lejos ahora nadie nos encontrará pero en el fondo ella también sentía la misma incertidumbre que el niño A pesar de que el autobús los alejaba de la ciudad no podía ignorar la sensación de que el peligro seguía parada en una pequeña estación para que los pasajeros pudieran estirarse o comer algo Santiago miró a Dolores con preocupación deberíamos bajar dolores dudó por un momento pero finalmente negó con la cabeza no nos quedaremos aquí es mejor no llamar la atención desde su asiento dolores observó como los demás pasajeros descendían del autobús algunos caminando hacia un puesto de

comida que ofrecía café caliente tamales el conductor también bajó dejando el vehículo momentáneamente desierto el silencio en el interior del autobús era casi opresivo Santiago seguía vigilando por la ventana y Dolores notó que su respiración se aceleraba Qué pasa hijo ese auto murmuró señalando discretamente hacia un vehículo estacionado al otro lado de la carretera dolores siguió su mirada y sintió un escalofrío recorrer su esp era un auto negro similar al que habían visto frente a su casa aunque no podía estar completamente segura el simple hecho de verlo la llenó de inquietud Tal vez es solo

una coincidencia dijo intentando calmarlo aunque ella misma no estaba convencida el tiempo parecía detenerse mientras observaban el auto sus ventanas estaban tan oscuras que no podían distinguir si había alguien dentro de repente la puerta del doctor se abrió y un hombre bajó Dolores contuvo El aliento al ver su figura era alto y corpulento con un abrigo oscuro que se movía con el viento miró hacia el autobús por unos segundos que parecieron eternos antes de girarse y caminar hacia el puesto de comida dolores aprovechó el momento para tomar una decisión vamos niños bajaremos ahora qué pero

no íbamos a quedarnos aquí preguntó Santiago alarmado ves mejor no arriesgarnos despertó a Isabela con suavidad quien la miró con confusión pero no dijo nada tomaron sus pertenencias y se dirigieron hacia la puerta trasera del autobús saliendo sin ser notados dolores los guió hacia un lado de la estación donde las sombras eran más profundas y ahora qué hacemos preguntó Santiago su voz llena de urgencia Dolores miró a su alrededor buscando una solución a lo lejos vio un camión estacionado con las puertas traseras abiertas su conductor un hombre de edad avanzada estaba fumando un cigarrillo junto

a otros dos hombres subiremos ahí dijo con firmeza señalando el camión en serio Isabel aparecía asustada confíen en mí no es seguro quedarnos aquí esperaron Hasta que el conductor y sus compañeros se distrajeron antes de acercarse al camión con cuidado subieron por las puertas traseras y se escondieron entre las cajas de lo que parecía ser frutas y verduras el olor a tierra y madera impregnaba el aire Pero al menos estaban fuera de la vista quédense quietos y no hagan ruido ordenó dolores en un susurro el tiempo transcurría lentamente cada sonido desde los pasos del conductor

hasta el cierre de las puertas del camión hacía que el corazón de dolores latiera más rápido finalmente el motor rugió y el camión comenzó a moverse mientras avanzaban por la carretera dolores sintió un ligero alivio al saber que estaban alejándose aún más de Guadalajara sin embargo sabía que el peligro no había desaparecido por completo Santiago que estaba sentado junto a ella finalmente relajó los hombros señora cree que estaremos bien Dolores Lo miró a los ojos y por primera vez en mucho tiempo encontró en ellos una chispa de Esperanza Sí Santiago estaremos bien aunque sus palabras

eran un intento de tranquilizarlo en el fondo dolores sabía que el camino hacia la seguridad aún estaba lleno de incertidumbre Sin embargo mientras el camión los llevaba hacia lo desconocido decidió aferrarse a la pequeña posibilidad de un futuro mejor La travesía en el camión se extendió por horas que parecieron días cada curva y bache en la carretera hacía que Santiago e Isabela se sujetaran con más fuerza a las cajas de madera que los rodeaban dolores sentada entre ellos intentaba mantener la calma pero la incertidumbre de lo que encontrarían al llegar le pesaba en el pecho

el amanecer comenzó a iluminar el Horizonte pintando el cielo con tonos naranjas y rosados a través de una pequeña abertura en la lona del camión Santiago pudo ver que est dejando atrás la carretera principal y adentrándose en un camino más estrecho flanqueado por Campos que se extendían hasta donde alcanzaba la vista finalmente el camión se detuvo el motor se apagó y el silencio que siguió fue casi ensordecedor dolores hizo un gesto a los niños para que permanecieran quietos mientras escuchaba los pasos del conductor alejándose del vehículo ahora bajemos con cuidado susurró uno a uno salieron

del camión y se encontraron en un pequeño claro rodeado de campos de maíz a lo lejos se divisaba una casa Modesta pero acogedora con un techo de Tejas rojas y paredes de adobe junto a la casa había un granero y un Corral donde algunas gallinas picoteaban el suelo Esta es la granja de Jacinta preguntó Santiago observando el lugar con cautela sí debe ser aquí respondió dolores ajustándose el chal mientras avanzaba hacia la casa con los niños siguiéndoles golpeó suavemente apenas pasaron unos segundos antes de que una mujer robusta de cabello canoso recogido en un moño

y manos callosas abriera la puerta sus ojos Aunque cansados irradiaban una calidez que inmediatamente hizo que dolores se sintiera un poco más tranquila dolores exclamó Jacinta con una sonrisa extendiendo los brazos para abrazarla Carmen me contó todo pasen deben estar agotados los invitó a entrar en su hogar una casa sencilla pero llena de vida el aroma del café recién hecho y del pan horneado llenaba el aire y en la mesa de madera había un plato con tortillas y frijoles siéntense siéntense deben tener hambre dijo Jacinta Mientras colocaba más comida en la mesa Isabela que había

permanecido en silencio durante an todo el viaje finalmente habló gracias señora Jacinta Jacinta le sonrió y acarició su cabello con ternura Aquí están a salvo niña nadie los encontrará en este lugar mientras comían dolores le contó a Jacinta los detalles de lo ocurrido desde la aparición de los niños en su casa hasta la amenaza del auto negro Jacinta escuchaba con atención asintiendo de vez en cuando estos hombres no no se darán por vencidos fácilmente dolores si ya los estaban buscando en Guadalajara es cuestión de tiempo antes de que amplíe en su búsqueda qué podemos hacer

preguntó dolores preocupada por ahora quedarse aquí es lo mejor yo hablaré con algunos conocidos para vigilar los caminos cercanos Si vemos algo sospechoso los alertar de inmediato la determinación en La Voz de Jacinta le dio a Dolores un poco de Esperanza pero también le recordó que el peligro seguía presente más tarde mientras Jacinta mostraba a los niños El pequeño cuarto donde dormirían dolores salió al patio y se sentó en un banco de madera junto al granero el canto de los gallos y el suave susurro del viento entre los campos de maíz le daban a lugar

una sensación de paz que contrastaba con el caos que habían dejado atrás Santiago la encontró allí llevando un vaso de agua que Jacinta le había dado seor Señora Dolores cree que ellos nos encontrarán aquí dolores tomó el vaso y lo sostuvo entre sus manos mirando el Horizonte No lo sé hijo pero sé que Jacinta es una mujer fuerte y que hará todo lo posible por protegernos Santiago asintió Aunque la duda seguía reflejada en su rostro esa noche Mientras todos dormían dolores permaneció despierta sentada junto a la ventana del cuarto que Jacinta le había asignado su

nada se perdía en la oscuridad vigilando cualquier movimiento extraño en el camino Aunque la granja Parecía un refugio seguro no podía dejar de pensar en el auto negro y en los hombres que los perseguían de repente el ladrido de un perro rompió el silencio de la noche dolores se tensó su corazón comenzó a latir con fuerza se levantó y abrió la ventana intentando distinguir algo en la penumbra todo parecía tranquilo pero el sonido de ladrido existía decidió no despertar a Jacinta ni a los niños pensando que tal vez solo era un animal salvaje merodeando cerca

del corral pero su instinto le decía que debía estar preparada para cualquier cosa volvió a su cama Aunque apenas logró dormir sabía que su papel ahora era proteger a esos niños a toda Costa y Estaba dispuesta a hacer lo que fuera necesario para mantenerlos a salvo el amanecer trajo consigo una nueva Esperanza pero también una inquietud latente que dolores no podía ignorar El Amanecer en la granja de Jacinta llegó con un aire frío y un cielo pintado en tonos pastel el canto de los gallos anunció un nuevo día pero dolores no encontró Consuelo en la

tranquilidad aparente había pasado gran parte de la noche en vela observando la ventana como si sus ojos fueran un escudo capaz de protegerlos de cualquier amenaza en la cocina Jacinta preparaba el desayuno con manos hábiles rompiendo huevos frescos En un sartén mientras revisaba mentalmente las tareas del día los niños estaban sentados a la mesa con Isabela dibujando garabatos en un trozo de papel que Jacinta le había dado y Santiago mirando hacia la ventana Siempre alerta Santiago Ven a comer lo llamó dolores sirviendo un plato de frijoles y tortillas él dudó por un momento pero finalmente

se sentó Señora Dolores cree que ya dejaron de buscarnos preguntó con voz baja dolores le dio una sonrisa tranquilizadora Aunque en su interior sentía la misma incertidumbre aquí estamos bien hijo Jacinta conoce este lugar mejor que nadie y no dejaremos que nos encuentren pero mientras pronunciaba esas palabras no podía ignorar la sensación de que algo oscuro se avecinaba el día transcurrió con relativa calma Jacinta les mostró a los niños Cómo alimentar a las gallinas y recoger los H hos frescos actividades que lograron arrancar algunas sonrisas de Isabela Santiago Aunque más reservado parecía encontrar algo de

paz en el trabajo manual ayudando a Jacinta a mover fardos de heno en el granero dolores por su parte ayudaba en la cocina y en las pequeñas tareas de la casa Aunque su mente no dejaba de divagar El Recuerdo del auto negro seguía presente como una sombra que se negaba a desaparecer Cuando el sol comenzó a ponerse Jacinta sugirió que todos se reunieran en la sala para cenar juntos había preparado un estofado de pollo con papas que llenó la casa con su aroma reconfortante dolores se sentó junto a los niños observándolos comer con más apetito

que en días anteriores este lugar es bueno para ustedes dijo Jacinta sirviendo un poco más de comida en el plato de Santiago aquí podrán recuperarse y nadie los encontrará pero justo cuando esas palabras salieron de su boca un ruido en el exterior rompió la tranquilidad era el sonido de motores acercándose seguido por el crujido de neumáticos sobre la grava del camino dolores y Jacinta intercambiaron miradas de alarma Santiago se levantó de la mesa de inmediato y dolores lo detuvo con una mano en su brazo Quédate aquí con tu hermana ordenó su voz firme pero temblorosa

Jacinta corrió hacia la ventana y apartó ligeramente la cortina para fuera dos camionetas negras se detenían frente a la granja de las camionetas bajaron varios hombres todos vestidos con ropa oscura y con expresiones severas uno de ellos sostenía un bate de madera mientras que otro llevaba algo que parecía una pistola escondida Bajo su chaqueta Dios mío exclamó Jacinta volviendo la mirada hacia dolores sabía que no se rendían dolores sintió un nudo en el pero no permitió que el miedo La paralizara dónde podemos esconder a los niños Jacinta señaló hacia el suelo donde una trampilla apenas

visible estaba oculta bajo una alfombra el sótano mételos ahí dolores tomó a los niños de las manos y los condujo hacia la trampilla Santiago intentó resistirse no quiero quedarme y ayudar escúchame Santiago Esto no es un juego Necesito que protejas a tu hermana por favor hazlo por mí dijo dolores su voz cargada de emoción Santiago Finalmente asintió y ayudó a Isabela a bajar por la escalerilla antes de cerrar la trampilla Dolores les dio una última mirada No hagan ruido pase lo que pase cerró la trampilla y colocó la alfombra sobre ella justo cuando los hombres

comenzaron a golpear la puerta sabemos que están ahí gritó una voz masculina desde el otro lado no queremos lastimarlos solo entreguen a los niños Jacinta con una valentía que impresionó a Dolores abrió la puerta qué quieren preguntó fingiendo indiferencia venimos por los niños sabemos que están aquí respondió El hombre del bate avanzando un paso hacia la entrada no sé de qué niños hablan replicó Jacinta cruzándose de brazos aquí Solo vivimos mi amiga y yo el hombre no pareció convencido señaló a uno de sus compañeros Quien comenzó a rodear la casa mientras otro abría la puerta

del granero dolores con el corazón latiendo con fuerza decidió intervenir Por qué no los dejan en paz son solo niños beso no es asunto suyo señora respondió el hombre acercándose a ella con una risa amenazante antes de que la situación pudiera escalar el sonido de sirenas policiales rompió el aire los hombres se detuvieron de inmediato intercambiando miradas nerviosas alguien llamó a la policía gritó uno de ellos Vámonos ordenó el líder Y en cuestión de segundos todos subieron a las camionetas y desaparecieron en la noche cuando las sirenas se acercaron más Jacinta suspiró aliviada fue Carmen

debió haber avisado a las autoridades dolores rápidamente abrió la trampilla y ayudó a los niños a salir ambos estaban pálidos y temblorosos Pero al menos estaban a salvo dolores los abrazó con fuerza sintiendo el peso de su responsabilidad como nunca antes sabía que habían ganado una pequeña batalla pero la guerra estaba lejos de terminar la calma que siguió al ataque en la granja era engañosa aunque los hombres habían huido dolores sabía que no estaban a salvo Jacinta permanecía junto a la ventana vigilando el camino con un machete en la mano mientras Santiago e Isabela estaban

en la sala tratando de procesar el miedo que acababan de experimentar Carmen llegó Poco después acompañada por dos oficiales de policía su presencia ofrecía un leve respiro pero las noticias que traía no eran alentadoras dolores esto es más grande de lo que imaginábamos comenzó Carmen su rostro serio mientras miraba a los niños El orfanato no es solo un lugar donde maltratan a los niños hay reportes de que están involucrados en actividades ilegales y esos hombres no se detendrán fácilmente dolores sintió que el suelo bajo sus pies se tambaleaba qué podemos hacer no puedo permitir que

los encuentren otra vez Carmen se inclinó hacia ella bajando la voz para no alarmar a los niños necesitamos un testimonio algo contundente que obligue a las autoridades a actuar quieres que los niños hablen preguntó dolores horrorizada son solo niños ya han pasado por demasiado lo sé dolores pero es nuestra mejor oportunidad si ellos explican lo que vivieron en El orfanato podríamos cerrarlo para siempre dolores miró hacia Santiago que estaba sentado junto a Isabela en el sofá Aunque era solo un niño había en sus ojos una madurez que no debería existir a su edad con un

suspiro dolores se acercó a él Santiago Necesito hablar contigo El niño asintió y la siguió hasta la cocina donde Carmen y los oficiales esperaban Santiago necesitamos tu ayuda comenzó Carmen con suavidad los hombres que te buscaron hoy no solo te pers a ti y a tu hermana hay otros niños en ese orfanato que también están sufriendo Santiago frunció el seño apretando los puños lo sé hay otros que quieren escapar pero tienen miedo exactamente continuó Carmen Si hablas con la policía y les cuentas lo que pasó podríamos detener a esas personas Santiago miró a Dolores en

busca de apoyo qué piensas Señora Dolores dolores se inclinó Y puso una mano en su hombro creo que eres muy valiente Santiago pero también Creo que esto debe ser tu decisión si no estás listo lo entenderemos el niño permaneció en silencio por un momento mordiéndose el labio inferior finalmente levantó la mirada con determinación quiero hacerlo quiero que ellos paguen por lo que nos hicieron Carmen sonrió con alivio y ó bien Vamos a prepararte los oficiales colocaron una grabadora sobre la mesa y empezaron a hacer preguntas con un tono gentil Santiago Aunque nervioso al principio comenzó

a hablar su voz era firme y cada palabra que pronunciaba parecía liberar parte del peso que había estado cargando describió El orfanato con detalles precisos los castigos injustos las largas noches Sin comida y las veces en que el mismo se interpuso entre los encargados y su hermana para protegerla habló de otros niños de como sus llantos llenaban los pasillos por la noche y de los rumores de que algunos simplemente desaparecían sin dejar rastro Por qué crees que desaparecían preguntó uno de los oficiales con cautela Santiago bajó la voz como si temiera que alguien más pudiera

escucharlo decían que los vendían que los llevaban a otros lugares pero nadie sabía A dónde dolores sintió que el aire abandonaba sus pulmones no era solo maltrato era algo mucho peor Carmen apretó los labios claramente afectada por lo que estaba escuchando cuando Santiago terminó de hablar los oficiales apagaron la grabadora y lo miraron con seriedad eres un niño muy valiente Santiago esto nos ayudará mucho para detener a esas personas el niño asintió pero su rostro refle el cansancio de haber revivido todo lo que había pasado dolores lo llevó de regreso a la sala donde Isabela

lo esperaba con una expresión preocupada Qué pasó Santi preguntó acercándose a él solo hablé con ellos no tienes que preocuparte Isa dolores los observó mientras se abrazaban la conexión entre ellos era inquebrantable un vínculo que les daba la fuerza para enfrentar cualquier adversidad esa noche mientras los niños dormían Carmen y Jacinta se reunieron con dolores en la cocina esto es suficiente para que las autoridades actúen pero llevará tiempo explicó Carmen sirviendo una taza de café para cada una necesitamos mantenernos alerta esos hombres podrían regresar si sospechan que hemos hablado Jacinta sintió su expresión severa aquí

estamos listos no permitiré que les hagan daño mientras estén bajo mi techo dolores agradeció el apoyo de ambas mujeres pero no pudo evitar sentirse inquieta Aunque Santiago había dado un paso importante el peligro todavía los rodeaba como un Depredador al acecho miró hacia el cuarto donde los niños dormían y prometió en silencio que no permitiría que nada les pasara ya había perdido demasiadas cosas en su vida y no iba a perderlos a ellos la batalla apenas comenzaba y dolor Estaba dispuesta a luchar con todo lo que tenía el amanecer trajo un breve respiro a la

granja de Jacinta los rayos del sol atravesaban las cortinas iluminando la Modesta sala donde Santiago e Isabela jugaban con un par de bloques de madera que Jacinta les había dado dolores sentada junto a la ventana con una taza de café en la mano intentaba disfrutar del momento de calma Aunque su mente seguía atrapada en la incertidumbre de lo que vendría después a media mañana llegó con una expresión seria que borró cualquier atisbo de tranquilidad en el ambiente dolores fue la primera en notar su rostro preocupado y la condujo rápidamente a la cocina seguida por Jacinta

Qué pasó preguntó dolores en voz baja mientras Santiago e Isabela seguían distraídos en la sala Carmen dejó su bolso sobre la mesa y sacó un sobre lleno de documentos tenemos un problema El orfanato está usando todas conexiones para desacreditar a Santiago y a Isabela están diciendo que los niños eran problemáticos que intentaron huir varias veces porque no aceptaban disciplina y que todo lo que dicen son mentiras dolores sintió que el aire se le escapaba del pecho qué eso no tiene sentido estos niños han sufrido más de lo que cualquier persona podría imaginar lo sé respondió

Carmen su voz llena de frustración pero El orfanato tiene amigos poderosos gente con dinero e influencia están usando esos recursos para protegerse Jacinta golpeó la mesa con el puño su rostro endurecido por la ida y qué hay de las pruebas el testimonio de Santiago no significa nada lo hace pero no es suficiente por sí solo necesitamos más evidencia Si no encontramos algo que los incrimine directamente podrían no solo seguir operando sino también intentar recuperar a los niños por la fuerza dolores sintió que su corazón se rompía Al escuchar esas palabras había hecho todo lo posible

para proteger a Santiago e Isabela pero parecía que el sistema estaba en su contra qué podemos hacer preguntó tratando de controlar la desesperación en su voz lo primero es mantenernos firmes dijo Carmen tomando la mano de dolores en un gesto tranquilizador no podemos dejar que se salgan con la suya Yo seguiré buscando más pruebas pero necesito que ustedes sean fuertes por los niños dolores asintió lentamente Aunque la preocupación no abandonaba su rostro más tarde ese día mientras los niños jugaban en el patio bajo la supervisión de Jacinta dolores se sentó con Carmen para discutir posibles

estrategias Qué tipo de pruebas necesitamos preguntó dolores algo que conecte fanato con actividades ilegales como la venta de niños de la que Santiago habló si logramos encontrar un registro un documento o incluso otro testimonio que lo confirme podríamos cerrar ese lugar para siempre dolores se quedó en silencio pensando en las palabras de Carmen no podía evitar Sentirse impotente pero también sabía que no podía Rendirse al caer la tarde Santiago que había estado ayudando a Jacinta a recoger el heno se acercó a Dolores con el ceño fruncido Señora Dolores Por qué dicen que no estamos diciendo

la verdad dolores Lo miró con tristeza luchando por encontrar las palabras adecuadas porque hay personas que no quieren que el mundo sepa lo que hacen Santiago tienen miedo de que alguien los detenga Santiago apretó los puños su mirada reflejaba más determinación que miedo no me importa lo que digan Yo sé lo que pasó y no voy a dejar que me callen las palabras del niño llenaron a Dolores de Orgullo y tristeza al mismo tiempo no era justo que tuviera que cargar con tanto peso A su corta edad pero su valentía era innegable esa noche mientras

los niños dormían dolores se sentó junto a Jacinta en la sala ambas estaban rodeadas por el silencio de la granja roto solo por el ocasional canto de un grillo me preocupa que no sea suficiente Jacinta que no podamos erlos como merecen Jacinta puso una mano firme sobre la de dolores haces más de lo que cualquiera haría dolores estos niños tienen suerte de haberte encontrado Y pase lo que pase yo estaré contigo dolores asintió agradecida por el apoyo de su amiga sin embargo mientras la noche avanzaba el peso de la situación seguía aplastándolo igos poderosos pero

en lo profundo de su corazón dolores sabía que el amor y la verdad eran armas Igualmente poderosas a la mañana siguiente cuando los rayos del sol comenzaron a iluminar la granja dolores se levantó con una nueva resolución no permitiría que Santiago e Isabela regresaran al infierno del que habían escapado lucharía con cada fibra de su ser sin importar lo que costara el sol de la mañana bañaba la granja con una luz cálida pero en el interior de la casa de Jacinta la tensión era palpable dolores Carmen y Jacinta discutían en la cocina tratando de encontrar

una solución al nuevo revés Santiago estaba en el patio practicando con Jacinta como alimentar a las gallinas pero Isabela permanecía sentada en la sala en silencio la pequeña abrazada a su Osito de peluche parecía ajena a lo que ocurría a su alrededor sin embargo su mente estaba llena de pensamientos había escuchado partes de las conversaciones de los adultos y entendía más de lo que ellos creían sabía que estaban peleando contra personas malas y aunque sentía miedo también quería ayudar dolores salió de la cocina y la vio allí sentada con el ceño fruncido se acercó y

se arrodilló frente a ella tomando sus pequeñas manos disisa Estás bien cariño le preguntó con dulzura y Isabel asintió Aunque evitó mirarla a los ojos después de unos segundos levantó la mirada y preguntó Señora Dolores por qué estas personas son tan malas dolores suspiró buscando la forma más sencilla de explicarlo hay personas que Solo piensan en sí mismas Isa no les importa a quien lastiman mientras consigan lo que quieren Isabela apretó su osito con más fuerza pero si todos saben lo que hicieron no se detendrán dolores sonrió con tristeza eso es lo que estamos intentando

Isa queremos que todo el mundo Sepa la verdad Para que estas personas no puedan lastimar a nadie más la niña asintió procesando las palabras de dolores luego como si algo dentro de ella hubiera cambiado dejó su osito a un lado y tomó la mano de dolores con fuerza yo también quiero ayudar dolores la miró con sorpresa disa cariño no tienes que preocuparte por eso Santiago y yo estamos trabajando en esto pero Isabela sacudió la cabeza con determinación mamá siempre decía que no debemos rendirnos incluso cuando todo parece difícil quiero ayudar Señora Dolores no quiero que

esas personas sigan haciendo cosas malas las palabras de la niña resonaron en Dolores como un eco de algo que necesitaba Escuchar Aunque su instinto le decía que debía protegerla también sabía que Isabela tenía derecho a ser escuchada más tarde cuando Santiago regresó del patio Isabela lo tomó del brazo y lo llevó a un rincón de la sala Santi quiero ayudarte con lo del orfanato qué Isa no tienes que hacer eso yo me encargo no Santiago también es mi historia pasé por lo mismo que tú mamá siempre decía que éramos fuertes juntos recuerdas Santiago se quedó

en silencio sabía que su hermana tenía razón pero la idea de que ella enfrentara ese tipo de cosas lo llenaba de preocupación Finalmente suspiró y asintió está bien Isa pero si en algún momento te sientes mal Me avisas sí Isabela sonrió y lo abrazó con fuerza esa tarde Carmen preparó una nueva sesión con los de policía para recopilar más información esta vez Isabela se sentó junto a Santiago y comenzó a hablar su voz era suave al principio Pero a medida que narraba lo que vivió en El orfanato se volvió más firme a veces no nos

dejaban salir al patio si no terminábamos toda la comida Aunque estuviera podrida una vez a mí y a otro niño nos dejaron sin comer por dos días porque rompimos un plato los oficiales tomaban notas rápid pero ninguno de ellos podía ocultar la indignación en sus rostros Isabela continuó recordando detalles que incluso Santiago había olvidado habló de las noches en que los encargados llegaban tarde llevando consigo a otros adultos que se reunían en una oficina aunque no entendía de qué hablaban recordaba los gritos de los niños que eran llevados a esa habitación y no volvían hasta

horas después con rostros llenos de Lágrimas una vez escuché a uno de los cargados decir que nos iban a cambiar por algo mejor no entendí qu significaba pero me dio mucho miedo cuando terminó Isabela se acurrucó junto a Santiago quien la abrazó para consolarla dolores que había estado escuchando desde la puerta se acercó y los abrazó a ambos estoy tan orgullosa de ustedes mis pequeños valientes dijo con teniendo las lágrimas Carmen recogió los documentos y apagó la grabadora Esto será de gran ayuda ustedes son más fuertes de lo que creen sin embargo la tranquilidad de

haber logrado un avance no duró mucho Esa noche Mientras todos cenaban Jacinta recibió una llamada Era uno de sus vecinos que vivía a unos kilómetros de distancia Jacinta vi un auto negro cerca de la entrada del camino hacia tu granja me pareció sospechoso Así que pensé en avisarte Jacinta agradeció la llamada y colgó su expresión seria alertó a Dolores quien inmediatamente preguntó qué pasa creo que nos encontraron el ambiente en la sala cambió de inmediato Santiago e Isabela miraron a los adultos con miedo en sus ojos pero también con una determinación que no había estado

allí antes dolores tomó aire y se puso de pie si vienen por ellos no será fácil estamos listos para pelear Jacinta asintió y Carmen comenzó a hacer llamadas la batalla estaba lejos de terminar pero esa noche dolores y los niños supieron que no estaban solos la fuerza que Isabela había mostrado era el impulso que todos necesitaban para seguir adelante sin importar cuán oscuros fueran los días que venían la noche había caído completamente sobre la granja y aunque el lugar estaba envuelto en un silencio aparente dentro de la casa de Jacinta la tensión era casi palpable

dolores Jacinta y Carmen habían creado un plan de emergencia en caso de que los hombres regresaran mientras Santiago e Isabel la observaban desde un rincón con ojos Inquietos pero atentos dolores había que no podían seguir huyendo indefinidamente Cada día que pasaba el peligro crecía y aunque Jacinta había ofrecido su hogar como Refugio no era justo que los niños vivieran en constante temor esa noche después de asegurarse de que Santiago e Isabela estuv eran dormidos dolores se sentó con Carmen en la sala Carmen ya no podemos seguir así estos niños necesitan algo más que esconderse necesitan

una familia estabilidad alguien que los proteja legalmente Carmen que llevaba días pensando lo mismo asintió con seriedad tienes razón pero sabes lo complicado que es el sistema de adopción especialmente para alguien de tu edad dolores apretó las manos sobre su regazo sus dedos temblaban ligeramente pero su voz fue firme cuando respondió no me importa lo complicado que sea si hay algo que todavía puedo hacer en esta vida es cuidar de estos niños Carmen la miró por un momento admirando la determinación en los ojos de dolores entonces lucharemos por eso haré todo lo posible para ayudarte

pero tienes que estar preparada si estás disfrutando de esta historia deja tu like suscríbete a nuestro canal y activa las notificaciones para estar al tanto de toda nuestra programación habrá personas que intentarán impedirlo dolores asintió consciente de lo que estaba enfrentando a la mañana siguiente mientras los niños ayudaban a Jacinta en el corral dolores se sentó con ellos bajo un árbol el sol iluminaba sus rostros jóvenes pero marcados por las dificultades que habían vivido Santiago Isabela Quiero hablar con ustedes sobre algo importante comenzó dolores su Tono era suave pero serio ambos niños dejaron de jugar

y se acercaron a ella sentándose en la hierba Qué pasa Señora Dolores preguntó Santiago siempre protector con su hermana dolores respiró hondo antes de continuar sé que han pasado por cosas muy difíciles sé que han perdido mucho y que la vida no ha sido justa con ustedes pero también Sé que son fuertes y que tienen un futuro brillante por delante Santiago e Isabela intercambiaron miradas sin saber a dónde iba esa conversación he estado pensando mucho en esto y quiero que sepan que si ustedes están de acuerdo me gustaría adoptarlos las palabras quedaron suspendidas en el

aire por un momento que pareció eterno Santiago parpadeó como si no pudiera creer lo que acababa de escuchar mientras Isabela abrió los ojos de par en par adoptarnos repitió Santiago con un tono de asombro y Esperanza dolores asintió tomando las manos de ambos niños entre las suyas no puedo prometerles una vida perfecta soy vieja y no tengo mucho dinero pero tengo amor y quiero que tengan un hogar donde siempre se sientan seguros Isabela se lanzó hacia dolores abrazándola con fuerza mientras las lágrimas caían por su rostro Yo quiero quedarme con usted no quiero ir a

ningún otro lugar Santiago Aunque menos efusivo miró a Dolores con una seriedad que no correspondía a su edad si usted nos adopta Seremos una familia verdad una familia de verdad Santiago y nunca los abandonaré el niño asintió y aunque no dijo nada más sus ojos brillaban con una emoción que hablaba por sí sola las semanas que siguieron estuvieron llenas de trámites entrevistas y reuniones con trabajadores sociales Carmen utilizó todos sus contactos para acelerar el proceso pero las dificultades No tardaron en aparecer dolores hay quienes creen que tu edad es un problema le explicó Carmen después

de una reunión con las autoridades dicen que sería mejor que los niños fueran adoptados por una familia más joven dolores sintió como si le clavaran una daga en el corazón más joven y qué en ellos del amor replicó su voz temblaba de indignación estos niños no necesitan juventud necesitan alguien que esté dispuesto a luchar por ellos Carmen tomó su mano con suavidad lo sé dolores pero ellos solo ven estadísticas no el corazón dolores se levantó de la mesa con una determinación renovada Entonces les mostraré mi corazón una tarde mientras Jacinta y los niños recogían manzanas

del Pequeño huerto detrás de la casa llegó un auto dolores salió al porche un tanto preocupada pero se sorprendió al ver a una mujer joven bajar del vehículo era una trabajadora social que había visitado la granja días antes para evaluar la situación Señora Dolores quería venir personalmente para hablar con usted dijo acercándose con una sonrisa dolores la invitó a sentarse Aunque estaba llena de nervios después de mi última visita hablé con mis superiores sobre usted y los niños quiero que sepa que estoy de su lado creo que es la mejor opción para Santiago e Isabela

dolores no pudo contener las lágrimas gracias gracias por creer en mí la trabajadora social asintió Pero también advirtió esto no será fácil El orfanato tiene poder y conexiones pero creo que con paciencia y perseverancia lograremos que se haga justicia dolores sabía que el camino sería largo pero esa pequeña chispa de Esperanza era todo lo que necesitaba para seguir adelante esa noche mientras Santiago e Isabela dormían juntos en el cuarto que compartían dolores se sentó en la sala mirando el fuego en la chimenea Jacinta se unió a ella llevando dos tazas de té No es fácil

pero sé que lo lograrás dolores estos niños merecen estar contigo Dolores sintió sus ojos fijos en las llamas lo lograré Jacinta por ellos lo lograré el día de la audiencia llegó con un aire de tensión que parecía envolver la granja y a todos sus ocupantes dolores despertó antes del amanecer sentándose junto a la ventana mientras el cielo comenzaba a clarear el peso de la responsabilidad la mantenía Despierta Pero en su corazón sabía que no podía flaquear Carmen llegó temprano con con un sobre lleno de documentos había pasado las últimas semanas recopilando pruebas testigos y todo

lo necesario para demostrar que Santiago e Isabela estarían mejor con dolores que en cualquier otro lugar sin embargo ambas sabían que el caso no sería sencillo estás lista preguntó Carmen colocando una mano en el hombro de dolores no tengo otra opción estos niños necesitan una familia y no voy a dejar que los paren de mí respondió dolores su voz firme pero llena de emoción Santiago e Isabela estaban vestidos con ropa limpia y sencilla Santiago llevaba una camisa blanca y pantalones oscuros mientras Isabela Lucía un vestido azul claro que Jacinta había ajustado especialmente para ella aunque

trataban de mantenerse tranquilos era evidente que ambos estaban nerviosos Qué pasa si no nos dejan quedarnos contigo preguntó Isabela en un susurro mientras subían al auto dolores se giró desde el asiento delantero y les dio una sonrisa tranquilizadora no vamos a pensar en eso ahora Isa vamos a dar lo mejor de nosotros y confiar en que todo saldrá bien el tribunal era un edificio frío y lleno de Ecos con paredes blancas que reflejaban cada sonido dolores Santiago Isabela Carmen y Jacinta se sentaron en una sala de espera junto a otros casos que aguardaban su turno

cada minuto parecía estirarse como una eternidad finalmente llamaron su caso dolores tomó la mano de Isabela mientras Santiago caminaba junto a ellas con la barbilla alzada decidido demostrar su fortaleza la sala del tribunal era imponente con un juez sentado detrás de un gran escritorio de madera observándolos con una mezcla de curiosidad y seriedad en un lado estaban dolores y su grupo mientras que del otro lado estaban los representantes del orfanato uno de ellos un hombre de traje oscuro y mirada arrogante se levantó para presentar su caso su señoría estos niños tienen un historial de comportamiento

problemático han sido difíciles de manejar en El orfanato y creemos que su bienestar estaría mejor asegurado en un entorno más estructurado dolores apretó los puños conteniendo su indignación el juez asintió y luego miró hacia Carmen quien se levantó para hablar con todo respeto señoría esos argumentos no tienen fundamento lo que estos niños necesitan no es estructura sino amor y cuidado cosas que El orfanato evidentemente no ha proporcionado Carmen presentó pruebas incluyendo el testimonio grabado de Santiago e Isabela fotos del orfanato y declaraciones de otros niños que habían pasado por situaciones similares a medida que hablaba

la expresión del juez cambiaba pasando de neutral a visiblemente preocupado señoría estos niños no solo fueron maltratados sino que también estuvieron en riesgo de ser explotados las autoridades están investigando las conexiones del orfanato con actividades ilegales y creemos que es imperativo que se les ofrezca un hogar seguro concluyó Carmen el juez asintió lentamente y luego pidió escuchar a los niños Santiago quieres pasar al estrado preguntó el juez con un tono amable el niño asintió subiendo al estrado con pasos decididos miró al juez directamente a los ojos antes de comenzar a hablar mi hermana y yo

solo Queremos un lugar donde podamos estar juntos y sentirnos seguros en El orfanato nos trataron como si no [Música] luego fue el turno de Isabela quien subió al estrado con su Osito de peluche en la mano la Señora Dolores siempre nos cuida nos hace sentir como si fuéramos importantes no queremos irnos con nadie más dijo con lágrimas en los ojos cuando terminó dolores no pudo contenerse más y las abrazó ignorando las miradas de los presentes cuando fue el turno de dolores se levantó con el peso de los años en sus hombros pero con con la

fuerza de alguien que sabe que está luchando por algo más grande que ella misma señoría no soy una mujer rica ni joven No puedo prometerles a estos niños una vida llena de lujos pero puedo prometerles amor seguridad y un hogar donde siempre serán bienvenidos ellos no son una carga para mí son mi esperanza la sala quedó en silencio Después de sus palabras el juez se recostó en su silla reflexionando por unos momentos Antes de hablar Este es un caso difícil pero después de escuchar a todas las partes Considero que lo más importante es el bienestar

de los niños hizo una pausa que pareció eterna antes de mirar directamente a Dolores Señora Dolores le concedo la adopción de Santiago e Isabela las palabras del juez resonaron como un rayo en la sala dolores dejo escapar un soso de alivio mientras los niños corrían hacia ella para abrazarla Carmen y jac sonrieron aliviadas y emocionadas por el resultado del otro lado de la sala los representantes del orfanato salieron en silencio conscientes de que habían perdido de regreso en la granja la atmósfera era completamente diferente los rostros de Santiago e Isabela brillaban con una alegría que

dolores no había visto en ellos antes esa noche mientras cenaban juntos Jacinta propuso un Brindis por una nueva familia y un nuevo comienzo dolores levantó su taza de café con una sonrisa por el amor que encontramos cuando menos lo esperábamos los niños rieron y brindaron con sus vasos de leche Aunque todavía había desafíos por delante ese momento marcó el inicio de una vida llena de posibilidades para los tres el sol iluminaba la granja de Jacinta al día siguiente de la audiencia pero en el corazón de dolores el día parecía más brillante que nunca había pasado

la noche casi sin dormir sentada junto a la cama de Santiago e Isabela observándolos mientras dormían por primera vez en mucho tiempo sus expresiones reflejaban Paz Carmen llegó temprano trayendo documentos finales y explicaciones sobre el proceso legal que aún faltaba pero nada de eso parecía importar demasiado en ese momento lo esencial ya estaba asegurado Santiago e Isabela eran oficialmente sus hijos Dolores lograste dijo Carmen con una sonrisa que reflejaba tanto alivio como admiración no no logré sola Carmen Sin tu ayuda y la de Jacinta no habría sido posible pero el corazón que lo sostuvo fue

el tuyo dolores Nunca lo olvides dolores asintió sus ojos brillaban con lágrimas de gratitud Santiago e Isabela corrían por el patio jugando a perseguirse con risas que resonaban en el aire Jacinta los observaba desde el porche con una expresión cálida mientras dolores preparaba un desayuno especial en la cocina Señora Dolores dijo Santiago mientras entraba a la cocina con Una ramita de flores silvestres en la mano Esto es para usted dolores tomó la ramita con una sonrisa Gracias hijo es la flor más bonita que he recibido Santiago se quedó en silencio por un momento mirando el

suelo y luego levantó la vista cree que mamá y papá estarían orgullosos de nosotros dolores sintió que su corazón se apretaba ante la pregunta se inclinó hacia él Y puso una mano en su hombro estoy segura de que lo están Y sé que ellos querían que fueran felices y aquí ustedes pueden serlo Isabela apareció detrás de su hermano abrazando su Osito de peluche y llevando una pequeña muñeca que Jacinta le había regalado y vamos anti y Jacinta dice que hay huevos frescos en el corral lo llamó con entusiasmo dolores los vio correr juntos hacia el

patio y su corazón se llenó de una calidez que hacía mucho tiempo no sentía esta era su familia ahora y por ellos haría lo que fuera necesario Aunque la adopción había sido probada dolores sabía que el peligro no había desaparecido por completo Carmen les había advertido que El orfanato seguía bajo investigación pero sus directores aún tenían influencia y podrían intentar vengarse una tarde mientras dolores regresaba de comprar provisiones en el pueblo cercano notó un auto negro estacionado al otro lado de la calle cerca de la tienda sintió que su cuerpo se tensaba al instante pero

decidió no Mostrar miedo caminó lentamente hacia el auto y cuando estaba lo suficientemente cerca vio a un hombre que le resultaba familiar uno de los empleados del orfanato él con una sonrisa fría antes de arrancar el motor y alejarse esa noche dolores reunió a Jacinta y Carmen para discutir lo sucedido no podemos bajar la guardia dijo Carmen con el seño fruncido si están merodeando puede significar que aún tienen algo en mente qué sugieres que hagamos preguntó Jacinta mantenernos en contacto con la policía y asegurarnos de que no puedan acercarse a los niños también podríamos pensar

en mudarnos temporalmente Dolores negó con la cabeza su voz firme no voy a seguir huyendo Esta es nuestra casa ahora y no permitiré que nos la quiten Jacinta sonrió ante la determinación de su amiga entonces nos quedaremos y pelearemos juntas si es necesario con el paso de las semanas Las investigaciones sobre El orfanato avanzaron y poco a poco comenzaron a salir a la luz los horrores que se escondían detrás de sus muros reportajes en la televisión local mencionaban los testimonios de varios niños que habían sufrido abusos y pronto las autoridades comenzaron a arrestar a los

responsables una tarde mientras dolores y los niños estaban en el patio Carmen llegó con una noticia que iluminó el rostro de todos El orfanato ha sido clausurado oficialmente no podrán lastimar a más niños dolores se llevó una mano al pecho aliviada finalmente Santiago y Isabela celebraron abrazándose y dolores se unió a ellos sus ojos llenos de Lágrimas de alegría esa noche Mientras todos cenaban juntos en la mesa grande de Jacinta Santiago levantó su vaso de leche por nuestra familia dijo con una sonrisa tímida pero genuina por nuestra familia repitió Isabela chocando su vaso con el

de su hermano dolores los miró a ambos su rebosaba de gratitud y por los nuevos comienzos agregó levantando su taza de café jacinte y Carmen aplaudieron y el sonido de las risas llenó la sala un recordatorio de que a pesar de todo lo que habían enfrentado la esperanza y el amor habían prevalecido El Amanecer en la granja de Jacinta marcaba el comienzo de una nueva rutina para dolores Santiago e Isabela el hogar que antes parecía envuelto en una constante sensación de peligro ahora vibraba con risas conversaciones y los sonidos de la vida cotidiana Santiago se

levantaba temprano para ayudar a Jacinta con las tareas del campo había desarrollado un interés particular por los animales Especialmente las gallinas y las cabras y disfrutaba alimentarlas mientras escuchaba las historias que Jacinta compartía sobre su vida en el campo por su parte Isabela había encontrado un rincón en el patio donde pasaba horas dibujando Aunque usaba papeles reciclados y lápices viejos cada trazo reflejaba su imaginación y su amor por su nuevo entorno dolores Aunque consciente de sus limitaciones físicas hacía todo lo posible por contribuir pasaba las mañanas en la cocina preparando desayunos que llenaban la casa

con aromas cálidos y familiares también dedicaba tiempo a cuidar el jardín de Jacinta plantando flores que según ella eran un símbolo de Renacimiento una tarde mientras iago regresaba del corral con una canasta llena de huevos frescos se detuvo junto a Dolores en el jardín Señora Dolores cree que puedo aprender a manejar el tractor de Jacinta dolores levantó la vista de las flores que estaba podando Y sonrió si Jacinta está de acuerdo no veo por no eres un niña inteligente Santiago estoy segura de que puedes aprender cualquier cosa que te propongas Santiago asintió con orgullo antes

de correr hacia Jacinta para compartir su nueva ambición dolores lo observó mientras se alejaba su corazón se llenaba de alegría al ver como el niño comenzaba a soñar y planear un futuro Isabela por otro lado había hecho amigos entre los hijos de los vecinos que vivían cerca de la granja cada vez que escuchaba una bicicleta acercarse por el camino salía corriendo con su Osito de peluche para unirse a las risas y juegos de los demás niños una noche mientras cenaban juntos Isabela anunció con entusiasmo hoy enseñé a Julia a dibujar flores dolores le acarició el

cabello con ternura eres una niña muy generosa Isa estoy orgullosa de ti un día mientras dolores lavaba ropa junto a Jacinta un auto se detuvo frente a la granja ambas mujeres se tensaron al instante recordando los días en que la llegada de un vehículo podía significar peligro Pero esta vez cuando la puerta del auto se AB vieron a Carmen bajando con una sonrisa en el rostro Carmen exclamó dolores dejando a un lado el balde para recibir a su amiga Carmen las abrazó a ambas antes de sacar un sobre de su bolso tengo algo especial para

ustedes dolores tomó el sobre con manos temblorosas al abrirlo encontró un documento oficial el acta de adopción definitiva de Santiago e Isabela esto significa que todo está completo legalmente Ellos son tus hijos dolores las lágrimas comenzaron a rodar por las mejillas de dolores mientras miraba el documento había luchado tanto por este momento que ahora al tenerlo frente a ella le parecía casi irre gracias Carmen no sé cómo agradecerte todo lo que has hecho no tienes que agradecerme nada dolores esto es el resultado de tu valentía y tu amor cuando Santiago e Isabela regresaron de sus

actividades y dolores les mostró el documento ambos se abrazaron a ella con fuerza Entonces ya somos tu familia para siempre preguntó Isabela con ojos llenos de Esperanza siempre lo han sido Isa pero ahora también lo es el mundo entero con el tiempo la granja se convirtió en un lugar lleno de vida no solo para dolores y los niños sino también para la comunidad Jacinta con la ayuda de Santiago comenzó a ofrecer talleres para enseñar a los vecinos a cuidar de sus animales y sus tierras Isabela con su talento para el dibujo decoró las paredes de

una escuela rural cercana con murales que narraban historias de esperanza y fortaleza dolores encontró un nuevo propósito al compartir su experiencia con otras familias que enfrentaban desafíos similares con el apoyo de Carmen comenzó a visitar orfanatos y a hablar con padres adoptivos alentándolos a no Rendirse el amor puede superar cualquier obstáculo decía sus palabras resonaban con la sinceridad de alguien que había vivido esa verdad un día mientras el sol se ponía detrás de los campos de maíz Santiago e Isabela se sentaron junto a Dolores en el porche de la granja Señora Dolores comenzó Santiago con

un tono más serio de lo habitual Sí hijo No creo que debamos seguir llamando la Señora Dolores podemos la mamá dolores sintió que las lágrimas llenaban sus ojos se inclinó hacia ellos y los abrazó con fuerza nada me haría más feliz mis niños esa noche mientras se preparaban para dormir dolores se quedó despierta un poco más mirando el cielo estrellado desde su ventana en su corazón sabía que había encontrado la verdadera plenitud la soledad que la había acompañado durante tantos años había desaparecido reempl Ada por el amor de una familia que nunca había esperado encontrar

el tiempo en la granja transcurría con una tranquilidad que dolores nunca imaginó que volvería a experimentar Santiago e Isabela se adaptaban cada día más a su nueva vida y dolores sentía como su corazón que durante años había estado cargado de Soledad ahora estaba lleno de alegría una tarde mientras dolores preparaba tamales en la cocina con Jacinta llegó el cartero con una carta oficial al al verla Dolores frunció El seño preocupada de que fuera alguna notificación judicial o un asunto del pasado Que volviera a atormentar losos qué crees que sea preguntó Jacinta secándose las manos en

el delantal mientras observaba la carta solo hay una forma de saberlo respondió dolores con una ligera risa nerviosa rompiendo el sello al abrir la carta y leer las primeras líneas sus manos comenzaron a temblar Jacinta a la mada se acercó Qué pasa dolores dolores levantó la vista sus ojos llenos de incredulidad y emoción es el gobierno quieren agradecer a Santiago e Isabela por su valentía dice que sus testimonios ayudaron a cerrar No solo El orfanato sino a descubrir una red de adopciones ilegales Jacinta dejó escapar una exclamación de asombro eso es increíble estos niños son

más fuertes de lo que cualquiera hubiera imaginado dolores asintió todavía procesando la noticia quieren que asistamos a un evento en la ciudad donde les entregarán un reconocimiento Aunque la noticia llenaba de orgullo a Dolores también despertaba una preocupación latente Santiago e Isabela habían luchado tanto por escapar de su pasado que tenía que regresar a la ciudad y enfrentar a extraños pudiera traer recuerdos dolorosos dolores reunió a los niños esa noche para hablarles de la carta los tres se sentaron en la sala junto al fuego mientras Jacinto observaba desde la cocina Santiago Isabela recibimos una carta

muy especial hoy comenzó dolores sosteniendo el sobre entre sus manos los niños la miraron con curiosidad inclinándose hacia adante es del Gobierno quieren agradecerles por su valentía y reconocer todo lo que hicieron Para que El orfanato cerrara Santiago frunció el seño mientras Isabela abrazaba su Osito de peluche con fuerza tenemos que ir preguntó Santiago con un tono que reflejaba más inquietud que emoción dolores se inclinó hacia él tomando su mano solo si ustedes quieren nadie los obligará a hacer algo que no quieran pero creo que este reconocimiento no es solo para ustedes es para todos

los niños que ayudaron con su valentía Isabela que había estado en silencio levantó la vista si vamos podemos hablar sobre lo que nos pasó dolores la miró con sorpresa claro Isa pero no tienes que hacerlo si no te sientes lista Isabel la negó con la cabeza su rostro mostraba una determinación que dolores no había visto antes quiero hacerlo quiero que sepan que los niños no deben sufrir como nosotros sufrimos Santiago miró a su hermana y asintió lentamente si Isa quiere ir yo también iré el día del evento Carmen llegó temprano para ayudarlos a prepararse había

traído ropa nueva para los niños un vestido blanco sencillo para Isabela y una camisa azul con pantalones oscuros para Santiago dolores también usía un vestido limpio Aunque su sencillez reflejaba su carácter humilde el viaje a la ciudad fue silencioso al principio Santiago e Isabela miraban por las ventanas del auto observando como los campos verdes se transformaban en calles pavimentadas y edificios altos dolores sentada entre ellos les apretaba las manos de vez en cuando recordándoles que estaban juntos en esto al llegar al lugar del evento una sala de conferencias en un edificio gubernamental fueron recibidos por

periodistas y funcionarios los flases de las cámaras intimidaron a los niños pero dolores los sostuvo con firmeza guiándolos hacia el interior el evento comenzó con discursos de funcionarios que agradecían a todas las personas involucradas en la clausura del orfanato después llamaron a Santiago e Isabela al escenario dolores observó desde su asiento mientras los niños caminaban hacia el frente Aunque sus pasos eran tímidos había una fuerza en sus expresiones que la llenaba de orgullo Santiago fue el primero en hablar su voz era firme Aunque cargada de emoción mi hermana y yo vivimos cosas muy difíciles pero

siempre supimos que no era justo nadie debería pasar por lo que nosotros pasamos queremos que otros niños tengan una vida mejor Isabela tomó el micrófono después aunque su voz era más suave cada palabra que pronunciaba llegaba al corazón de todos los presentes Yo solo quiero decir que aunque a veces sientan miedo siempre hay personas que quieren ayudarlos nosotros encontramos a la Señora Dolores y ella nos salvó cuando terminaron la sala estalló en aplausos dolores no pudo contener las lágrimas mientras observaba a los niños regresar a su lado estoy tan orgullosa de ustedes dijo abrazándolos con

fuerza después del evento varios periodistas se acercaron a Dolores para entrevistarla pero ella rechazó con gentileza sus preguntas explicando que lo único que quería era una vida tranquila para su familia en el auto de regreso a la granja Isabela se quedó dormida con su osito en brazos mientras Santiago miraba por la ventana con una expresión de satisfacción dolores sentada entre ellos sabía que este reconocimiento era más que un momento de Gloria era un recordatorio de lo lejos que habían llegado juntos y de la fortaleza que habían encontrado como familia cuando llegaron a la granja Jacinta

los esperaba con un pastel que había horneado especialmente para celebrar esa noche mientras comían juntos dolores miró a su alrededor y supo que habían alcanzado algo más valioso que cualquier premio habían encontrado un hogar lleno de amor y esperanza El regreso a la granja después del evento en la ciudad marcó un cambio en la dinámica de la familia Santiago e Isabela habían dado un paso importante al compartir su historia pero ahora parecía que algo en ellos había sanado ya no cargaban con la misma tristeza en sus miradas y sus risas eran más frecuentes llenando Rincón

de la granja con vida dolores sin embargo sabía que aún quedaban cicatrices una noche mientras revisaba una pila de ropa limpia en la sala escuchó pasos suaves acercándose levantó la vista y vio a Isabel parada en la puerta abrazando su Osito de peluche pisa qué haces despierta tan tarde preguntó dolores con una sonrisa cálida La niña se acercó y se sentó junto a ella con una expresión seria en su rostro Señora Dolores quiero decir mamá dolores sintió un nudo en la garganta Al escuchar esa palabra salir de los labios de Isabela Qué pasa cariño Isabela

jugueteo con las orejas del Osito Antes de hablar a veces todavía tengo miedo de que nos encuentren o de que nos separen otra vez dolores puso un brazo alrededor de la pequeña y la acercó a su pecho bisa no tienes que preocuparte por por eso nadie va a separarnos ya somos una familia y yo siempre voy a cuidarte a ti y a tu hermano Siempre preguntó Isabela levantando la vista con ojos llenos de Esperanza dolores acarició su cabello con ternura siempre Isa esa es una promesa a la mañana siguiente mientras dolores servía café en la

cocina Santiago entró con algo escondido detrás de su espalda su rostro reflejaba una mezcla de nerviosismo y emoción mamá comenzó usando la palabra por primera vez dolores dejó la taza en la mesa y lo miró sorprendida y emocionada Qué pasa hijo Santiago sacó de detrás de su espalda una pequeña maceta con una planta joven Jacinta me ayudó a plantar esto es un regalo para ti dolores tomó la maceta con cuidado observando las pequeñas hojas verdes que sobresalían del suelo es hermosa Santiago Muchas gracias quiero que crezca fuerte como nuestra familia dijo él con un tono

de voz que reflejaba toda la madurez que había adquirido en los últimos meses dolores sintió que sus ojos se llenaban de Lágrimas mientras lo abrazaba eres un niño muy especial Santiago estoy muy orgullosa de ti unos días después Jacinta sugirió que toda la familia fuera al pueblo para hacer algunas compras y pasar tiempo juntos era la primera vez que dolores accedía a salir con los niños después del evento en la ciudad y aunque todavía sentía cierta inquietud sabía que era importante para ellos disfrutar de momentos normales y felices caminaron por las calles empedradas deteniéndose en

pequeños puestos donde los vendedores ofrecían frutas frescas artesanías y dulces típicos Santiago insistió en comprar una pulsera para Isabela con el poco dinero que Jacinta le había dado y la niña no pudo contener su alegría al recibirla Mientras tanto dolores se detuvo en un puesto de flores y compró un ramo de girasoles cuando Santiago le preguntó por qué había elegido esas flores ella sonrió porque los girasoles siempre buscan la luz Incluso en los días más oscuros me recuerdan a ustedes dos esa noche de regreso en la granja Jacinta preparó una cena especial para celebrar los

pequeños triunfos que habían alcanzado como familia la mesa estaba decorada con velas y las flores que dolores había comprado en el pueblo mientras cenaban Isabela miró a Dolores con una expresión pensativa mamá crees que algún día podamos ayudar a otros niños como nosotros dolores dejó su tenedor Y tomó la mano de su hija creo que ya lo están haciendo Isa con su historia han inspirado a muchas personas Pero si si en el futuro quieren hacer más yo estaré aquí para apoyarlos Santiago asintió Mirando a su hermana quiero ser alguien que ayude a los demás como

Carmen y Jacinta quiero hacer algo importante con mi vida dolores sintió que su corazón se llenaba de orgullo ya están haciendo algo importante mis niños están construyendo una vida Llena de amor y esperanza Y eso es lo más valioso que cualquiera puede hacer esa noche después de que los niños se fueron a dormir dolores salió al porche y miró el cielo estrellado Jacinta se unió a ella llevando dos tazas de té pensando en algo en particular preguntó Jacinta mientras se sentaba a su lado en lo lejos que Hemos llegado respondió dolores con una sonrisa tranquila

y en lo mucho que aún quiero hacer por ellos Jacinta asintió mirando las estrellas tienes un gran corazón dolores esos niños tuvieron suerte de encontrarte pero creo que tú también tuviste suerte de encontrarlos dolores no pudo evitar reír suavemente tienes razón Jacinta ellos me dieron una nueva vida un propósito mientras el viento fresco de la noche acariciaba sus rostros dolores cerró los ojos y agradeció en silencio por la familia que había encontrado Aunque el camino había sido difícil cada paso valía la pena La promesa de amor que había hecho a Santiago e Isabela era ahora

su razón de ser y sabía que el futuro les traería aún más momentos felices y memorables el amanecer sobre la granja marcaba el inicio de otro día lleno de Vida y Esperanza dolores ahora con una vitalidad que desmentía su edad despertó temprano y se dirigió a la cocina para preparar el desayuno mientras batí huevos frescos y calentaba tortillas escuchó las risas de Santiago e Isabel provenientes del patio estos niños me han devuelto más de lo que yo podría haberles dado murmuró para sí misma sonriendo mientras colocaba los platos sobre la mesa la vida en la

granja había adoptado un ritmo cálido y constante Santiago seguía ayudando a Jacinta con las tareas del campo y su interés por aprender a manejar el tractor lo había convertido en un aprendiz entusiasta Isabela por otro lado se había convertido en el alma artística del hogar Decorando paredes y escribiendo pequeños cuentos que compartía durante la cena dolores sabía que aunque habían encontrado estabilidad el viaje que les esperaba estaba lleno de nuevos desafíos pero también de oportunidades un día mientras dolores revisaba el buzón de la granja encontró una carta con un membrete oficial al abrirla su expresión

pasó de sorpresa a emoción era una invitación para asistir a un evento comunitario en el pueblo donde querían reconocer a Dolores Santiago e Isabela por su valentía y su impacto positivo en la comunidad esa noche durante la cena dolores compartió la noticia con los niños y Jacinta quieren que hablemos en el evento que contemos nuestra historia para inspirar a otros explicó dolores mientras colocaba el documento sobre la mesa Santiago levantó la vista de su plato pensativo crees que deberíamos hacerlo mamá dolores tomó su mano con suavidad solo si ustedes quieren hijo pero creo que es

una oportunidad para demostrar que incluso en los momentos más oscuros siempre hay esperanza Isabel asintió con entusiasmo Yo quiero ir quiero que sepan que somos una familia y que estamos bien Durante los días previos al evento Jacinta y dolores ayudaron a los niños a prepararse Isabela eligió un vestido amarillo brillante que reflejaba su personalidad alegre mientras Santiago decidió usar la misma camisa azul que había llevado al evento en la ciudad Dolores por su parte seleccionó un sencillo vestido verde que Jacinta había ajustado para ella mientras se miraba en el espejo pensó en cu había cambiado

desde el día en que Santiago e Isabela aparecieron en su vida ya no era la mujer solitaria y resignada que solía ser ahora era una madre una luchadora alguien que había encontrado un propósito el evento se llevó a cabo en la plaza principal del pueblo donde las familias locales se reunieron para celebrar las historias de superación y fortaleza el lugar estaba decorado con flores y banderas y un escenario simple había sido colocado en el centro cuando llegó el turno de dolores y los niños un silencio expectante Se extendió por la multitud dolores tomó el micrófono

primero Mirando a las caras que la observaban con curiosidad mi nombre es dolores Y esta es mi familia Santiago e Isabela hace unos meses nuestra vida era muy diferente todos habíamos perdido algo importante y estábamos buscando una razón para seguir adelante hizo una pausa su voz se quebró ligeramente pero continuó con valentía Fue entonces cuando nos encontramos y juntos descubrimos que el amor puede curar las heridas más profundas estos niños me enseñaron que la vida siempre tiene algo hermoso que ofrecer Incluso en los momentos más difíciles Santiago e Isabela también hablaron compartiendo su historia con

una madurez que conmovió a todos los presentes Isabela con su usual dulzura concluyó diciendo no importa cuánto miedo tengas siempre habrá alguien que quiera ayudarte nosotros encontramos a nuestra mamá y ahora somos felices la multitud aplaudió con entusiasmo y muchas personas se acercaron después para felicitar a Dolores y los niños algunas madres abrazaron a Dolores mientras que otros niños jugaban con Isabela y Santiago quienes ahora eran vistos como un ejemplo de valentía después del evento la vida en la granja continuó pero algo había cambiado dolores Santiago e Isabela ahora eran reconocidos no solo como una

familia sino como un símbolo de Esperanza para toda la comunidad Jacinta con su usual sentido práctico aprovechó la oportunidad para invitar a más vecinos a visitar la granja y participar en sus talleres dolores por su parte comenzó a escribir cartas a otros orfanatos ofreciendo apoyo y compartiendo su historia quería asegurarse de que ningún niño tuviera que pasar por lo que Santiago e Isabela habían vivido un día mientras Santiago e Isabela jugaban en el campo cercano dolores los observó desde el porche con una taza de té en la mano Jacinta se unió a ella llevando una

bandeja de galletas recién horneada nunca pensé que tendría tanto ruido y vida en esta casa comentó Jacinta con una sonrisa Yo tampoco pero no lo cambiaría por nada respondió dolores mirando a los niños con ternura Santiago corrió hacia ellas jadeando después de una intensa carrera mamá mira Isabela dibujó algo para ti dolores tomó el dibujo que él le entregó y lo observó detenidamente era trato de los tres Santiago Isabela y ella de pie frente a la granja con el sol brillando sobre ellos es hermoso Isa Gracias cariño dijo dolores abrazando a su hija mientras las

lágrimas llenaban sus ojos esa noche mientras las estrellas iluminaban el cielo dolores se sentó en el porche con Santiago e Isabela miraron juntos el firmamento hablando de sueños y planes para el futuro mamá crees que Siempre seremos felices aquí preguntó Isabela con su voz suave dolores acarició su cabello y respondió con una sonrisa mientras estemos juntos Isa siempre encontraremos la felicidad los niños se acurrucaron a su lado y dolores mirando las estrellas supo que habían llegado al lugar que siempre habían buscado un hogar lleno de amor esperanza y promesas de un futuro brillante Y si

te gustó esta historia segar encantará la próxima que está apareciendo en tu pantalla No olvides suscribirte a nuestro canal dejar tu like y activar las notificaciones hasta la próxima