escucha con atención esta increíble historia un día un monje zen decidió dejar su templo en las montañas y viajar por el mundo para difundir su enseñanza llevaba consigo solo una túnica un bol y un bastón no tenía dinero ni posesiones ni familia solo tenía su fe su sabiduría y su compasión el monje caminaba Por los caminos los pueblos y las ciudades Sin rumbo fijo confiando en La Providencia a veces se encontraba con personas bondadosas que le ofrecían comida agua o un lugar donde dormir otras veces se encontraba con personas malvadas que le insultaban le golpeaban
o le echaban el monje aceptaba todo con ecuanimidad sin apegarse ni rechazar nada su mente estaba en paz y su corazón estaba lleno de amor un día el monje llegó a una gran ciudad llena de ruido de gente y de humo el monje se sintió abrumado por el caos y la contaminación pero no se dejó llevar por el desánimo pensó que quizás en esa ciudad había muchas personas que necesitaban escuchar su mensaje y que él podía ayudarlas a encontrar la felicidad el monje se dirigió al centro de la ciudad donde había una plaza con una
fuente Allí se sentó a meditar esperando que alguien se acercara a él con curiosidad o con respeto sin embargo nadie le prestó atención la gente pasaba a su lado indiferente o burlona sin detenerse a mirarlo el monje no se sintió ofendido ni decepcionado sabía que la gente estaba cegada por sus deseos y sus preocupaciones y que no podía ver la belleza de la simplicidad entre la multitud el monje vio a un hombre que llamó su atención era un hombre joven de aspecto enfermizo con la piel pálida los ojos hundidos y los labios resecos el hombre
llev levaba una cajetilla de cigarrillos en la mano y fumaba uno tras otro sin parar el monje sintió una gran compasión por el hombre y decidió acercarse a él Disculpe señor le dijo el monje con una sonrisa puedo hacerle una pregunta el hombre se sorprendió al ver al monje y lo miró con desconfianza qué quieres le preguntó con rudeza solo quiero saber por qué fuma tanto le respondió el monje con amabilidad el hombre se encogió de hombros y soltó una bocanada de humo porque me gusta dijo Es lo único que me da placer en esta
vida y no le preocupa su salud insistió el monje no contestó el hombre qué más da todos vamos a morir algún día Prefiero morir joven y disfrutar que vivir viejo y sufrir el monje se entristeció Al escuchar esas palabras y trató de hacerle ver al hombre su error señor el tabaco es un veneno Que daña su cuerpo y su mente le dijo el monje le provoca enfermedades le quita energía le resta belleza le roba el aliento le oscurece la voz le amarga el gusto le irrita los ojos le ensucia los dientes le mancha los dedos
le acorta la vida qué placer puede encontrar en algo que le hace tanto mal no me importa replicó el hombre es mi elección y nadie tiene derecho a juzgarme Yo soy libre de hacer lo que quiera mi cuerpo señor el tabaco no le hace libre sino esclavo le dijo el monje le hace dependiente de una sustancia que no le aporta nada bueno y que le impide ver la verdadera naturaleza de las cosas le hace creer que necesita algo externo para ser feliz cuando la felicidad está dentro de usted no me vengas con esas tonterías dijo
el hombre Yo no creo en esas cosas yo solo creo en lo que veo en lo que siento en lo que me gusta y me gusta fumar Así que déjame en paz y vete a molestar a otro el hombre se dio media vuelta y se alejó del Monje sin escuchar más el monje lo siguió con la mirada y suspiró luego se sentó de nuevo a meditar esperando que el hombre reflexionar sobre sus palabras y que algún día cambiara su actitud el monje sabía que el hombre era un ser humano como él y que tenía el
potencial de despertar a la verdad Pero también sabía que el hombre estaba Atrapado en la ilusión y que solo él podía liberarse el monje no podía hacer nada más que ofrecerle su consejo su ejemplo y su compasión el resto dependía del hombre el monje sen continuó su viaje por el mundo sin perder la esperanza de encontrar a alguien que Quisiera escuchar su enseñanza aunque se encontraba con muchas dificultades y rechazos el monje no se desanima ni se enfadaba pensaba que todo era parte del camino y que cada experiencia le servía para aprender y crecer el
monje llegó a un pueblo pequeño donde reinaba la pobreza y la tristeza el monje vio que la gente vivía en casas destartaladas que vestía ropas sucias y rotas que trabajaba duro en el campo o en la mina que apenas tenía para comer el monje sintió una gran compasión por la gente y decidió quedarse un tiempo en el pueblo para ver si podía ayudarlos de alguna manera el monje se acercó a una casa humilde donde vivía una anciana con su nieto el monje les pidió permiso para pasar la noche y les ofreció su ayuda para lo
que necesitaran la anciana aceptó con gratitud y le dijo que podía dormir en el granero junto a las gallinas el nieto le dijo que podía ayudarlo a recoger Leña para el fuego el monje le agradeció su hospitalidad y se dispuso a colaborar con ellos el monje pasó varios días en la casa de la anciana y su nieto compartiendo su vida sencilla y dura el monje les hablaba de su filosofía de su forma de ver el mundo de su búsqueda de la felicidad la anciana y el nieto escuchaban con atención y respeto y a veces le
hacían preguntas o comentarios el monje se sentía contento de haber encontrado a dos personas que mostraban interés por su mensaje y que le trataban con amabilidad un día el monje quiso conocer el pueblo y salió a dar un paseo el monje vio que el pueblo era muy pequeño y que solo había unas pocas tiendas y servicios el monje se detuvo frente a una taberna donde vio a un grupo de hombres que bebían alcohol y jugaban a las cartas el monje se sintió curioso por saber qué hacían esos hombres Y por qué se entregaban a ese
vicio el monje entró en la taberna y se acercó a la barra allí pidió un vaso de agua y se sentó en un taburete el monje observó a los hombres que estaban en la mesa y se dio cuenta de que eran los mismos que trabajaban en el campo o en la mina el monje vio que tenían el rostro enrojecido los ojos vidriosos el aliento pestilente la voz ronca el gesto torcido el monje vio que beb sin medida que se reían sin motivo que se insultaban sin razón que apostaban sin sentido el monje sintió una gran
compasión por esos hombres y decidió acercarse a ellos Disculpen señores les dijo el monje con una sonrisa puedo hacerles una pregunta los hombres se sorprendieron al ver al monje y lo miraron Con desd qué quieres le preguntó uno de ellos con grosería Solo quiero saber Por qué beben tanto les respondió el monje con amabilidad los hombres se rieron y se burlaron del Monje por qué bebemos tanto repitió otro de ellos con ironía pues Por qué nos gusta porque nos divierte Porque nos ayuda a olvidar a olvidar qué insistió el monje a olvidar todo contestó otro
de ellos con amargura a olvidar la miseria el trabajo el hambre el dolor la soledad la muerte dar esta vida de miseria el monje se entristeció Al escuchar esas palabras y trató de hacerles ver a los hombres su error señores el alcohol es un veneno Que daña su cuerpo y su mente les dijo el monje les provoca enfermedades les quita fuerza les resta inteligencia les roba la dignidad les oscurece la conciencia les amarga el carácter les irrita el ánimo les acorta la vida qué diversión pueden encontrar en algo que les ha hace tanto mal no
nos importa replicaron los hombres es nuestra elección y nadie tiene derecho a juzgarnos nosotros somos libres de hacer lo que queramos con nuestra vida señores el alcohol no les hace libres sino esclavos les dijo el monje les hace dependientes de una sustancia que no les aporta nada bueno y que les impide enfrentar la realidad con sabiduría les hace creer que necesitan algo externo para ser felices cuando la felicidad está dentro de ustedes no nos vengas con esas tonterías dijeron los hombres nosotros no creemos en esas cosas nosotros solo creemos en lo que vemos en lo
que sentimos en lo que nos gusta y nos gusta beber Así que déjanos en paz y vete a molestar a otro los hombres se dieron media vuelta y siguieron bebiendo y jugando sin escuchar más el monje lo siguió con con la mirada y suspiró luego se levantó de su taburete y salió de la taberna esperando que los hombres reflexionaran sobre sus palabras y que algún día cambiaran su actitud el monje sabía que los hombres eran seres humanos como él y que tenían el potencial de despertar a la verdad Pero también sabía que los hombres estaban
atrapados en la ilusión y que solo ellos podían liberarse el monje no podía hacer nada más que ofrecerle su consejo su ejemplo y su compasión el resto dependía de los hombres el monje zen siguió su viaje por el mundo sin perder la fe de encontrar a alguien que Quisiera escuchar su enseñanza aunque se encontraba con muchas adversidades y obstáculos el monje no se desesperaba ni se rendía pensaba que todo era parte del destino y que cada situación le servía para probar y fortalecer su espíritu el monje llegó a una ciudad grande donde reinaba la abundancia
y la alegría el monje vio que la gente vivía en casas lujosas que vestía ropas elegantes y limpias que trabajaba poco en el comercio o en la administración que tenía mucho para comer el monje sintió una gran curiosidad por la gente y decidió quedarse un tiempo en la ciudad para ver si podía aprender algo de ellos el monje se acercó a un palacio donde vivía un rey con su familia y su corte el monje les pidió permiso para entrar y les ofreció su sabiduría a cambio de su hospitalidad el rey aceptó con generosidad y le
dijo que podía alojarse en una de las habitaciones y le dijo que podía alojarse en una de las habitaciones y que podía participar de los banquetes y las fiestas el monje le agradeció su hospitalidad y se dispuso a convivir con ellos el monje pasó varios días en el Palacio compartiendo su vida opulenta y festiva el monje les hablaba de su filosofía de su forma de ver el mundo de su búsqueda de la felicidad El rey y su familia lo escuchaban con cortesía y admiración y a veces le hacían preguntas o a lagos el monje se
sentía halagado de haber encontrado a unas personas que mostraban respeto por su mensaje y que le trataban con generosidad un día el monje quiso conocer la ciudad y salió a dar un paseo el monje vio que la ciudad era muy grande y que había muchas tiendas y servicios el monje se detuvo frente a un mercado donde vio a un hombre que comía todo lo que podía sin límite el monje se sintió intrigado por saber qué hacía ese hombre Y por qué se entregaba a ese vicio el monje entró en el mercado y se acercó al
hombre allí vio que el hombre era el rey y que Estaba rodeado de de sus sirvientes y de sus guardias el monje vio que el rey tenía el cuerpo obeso el rostro sudoroso el aliento pesado la voz jadeante El gesto hinchado el monje vio que el rey comía sin medida que probaba de todo que no dejaba nada que pedía más y más el monje sintió una gran compasión por el rey y decidió hablarle Disculpe majestad le dijo el monje con una reverencia puedo hacerle una pregunta el rey se sorprendió al ver al monje y lo
miró Con benevolencia qué quieres le preguntó con condescendencia solo quiero saber por qué come tanto le respondió el monje con humildad El rey se rió y le ofreció un trozo de pastel por qué como tanto repitió con jovialidad Pues porque puedo porque me divierte porque me ayuda a disfrutar a disfrutar de qué insistió el monje a disfrutar de todo contestó el rey con orgullo a disfrutar de la riqueza del poder de la fama del placer de la gloria de la vida a disfrutar de esta vida maravillosa el monje se entristeció Al escuchar esas palabras y
trató de hacerle ver al rey su error majestad la comida es un veneno Que daña su cuerpo y su mente le dijo el monje le provoca enfermedades le quita agilidad le resta lucidez le roba la salud le oscurece la visión le amarga el humor le irrita el estómago le acorta la vida qué diversión puede encontrar en algo que le hace tanto mal no me importa replicó el rey es mi elección y nadie tiene derecho a juzgarme Yo soy libre de hacer lo que quiera con mi vida majestad la comida no le hace libre sino esclavo
le dijo el monje le hace dependiente de una sustancia que no le aporta nada bueno y que le impide mantener un equilibrio entre el cuerpo y el espíritu le hace creer que necesita algo externo para ser feliz cuando la felicidad está dentro de usted no me vengas con esas tonterías dijo el rey Yo no creo en esas cosas yo solo creo en lo que veo en lo que siento en lo que me gusta y me gusta comer Así que déjame en paz y vete a molestar a otro el rey se dio media vuelta y siguió
comiendo y pidiendo sin escuchar más el monje lo siguió con la mirada y suspiró luego se alejó del rey y salió del mercado esperando que el rey reflexionar sobre sus palabras y que algún día cambiara su actitud el monje sabía que el rey era un ser humano como él y que tenía el potencial de despertar a la verdad Pero también sabía que el rey estaba Atrapado en la ilusión y que solo él podía liberarse el monje no podía hacer nada más que ofrecerle su consejo su ejemplo y su compasión el resto dependía del Rey el
monje zen siguió su viaje por el mundo sin perder la confianza de encontrar a alguien que Quisiera escuchar su enseñanza aunque se encontraba con muchas resistencias y dificultades el monje no se desalentado ni se desviaba pensaba que todo era parte del aprendizaje y que cada desafío le servía para mejorar y superarse el monje llegó a una isla donde reinaba la tranquilidad y la belleza el monje vio que la gente vivía en cabañas de madera que vestía ropas ligeras y coloridas que trabajaba poco en la pesca o en la artesanía que tenía lo suficiente para vivir
el monje sintió una gran admiración por la gente y decidió quedarse un tiempo en la isla para ver si podía compartir algo con ellos el monje se acercó a una cabaña donde vivía un hombre con con su esposa y sus hijos el monje les pidió permiso para quedarse y les ofreció su amistad a cambio de su hospitalidad el hombre aceptó con simpatía y le dijo que podía dormir en una hamaca y que podía comer de lo que había el monje le agradeció su hospitalidad y se dispuso a convivir con ellos el monje pasó varios días
en la cabaña compartiendo su vida alegre y relajada el monje hablaba de su filosofía de su forma de ver el mundo de su búsqueda de la felicidad el hombre y su familia lo escuchaban con interés y cariño y a veces le hacían preguntas o bromas el monje se sentía feliz de haber encontrado a unas personas que mostraban afecto por su mensaje y que le trataban con cordialidad un día el monje quiso conocer la isla y salió a dar un paseo el monje vio que la isla era muy bonita y que había muchas plantas y animales
el monje se detuvo frente a una cueva donde vio a un hombre que dormía todo el día sin hacer nada el monje se sintió curioso por saber qué hacía ese hombre Y por qué se entregaba a ese vicio el monje entró en la cueva y se acercó al hombre allí vio que el hombre era el hermano del hombre de la cabaña y que estaba solo y abandonado el monje vio que el hombre tenía el cuerpo Flash el rostro pálido el aliento rancio la voz débil el gesto apagado el monje vio que el hombre dormía sin
medida que no se levantaba que no se asea que no se alimentaba que no se cuidaba el monje sintió una gran compasión por el hombre y decidió despertarlo Disculpe señor le dijo el monje con una voz suave puedo hacerle una pregunta el hombre se sorprendió al ver al monje y lo miró con fastidio qué quieres le preguntó con pereza Solo quiero saber por qué duerme tanto le respondió el monje con paciencia el hombre se encogió de hombros y bostezo porque me gusta dijo Es lo único que me da descanso en esta vida y no le
preocupa su vida insistió el monje no contestó el hombre qué más da todos vamos a morir algún día Prefiero morir durmiendo y soñando que vivir despierto y sufriendo el monje se entristece Al escuchar esas palabras y trató de hacerle ver al hombre su error señor el sueño es un veneno Que daña su cuerpo y su mente le dijo el monje le provoca enfermedades le quita vitalidad le resta creatividad le roba la oportunidad le oscurece la memoria le amarga el ánimo le irrita el espíritu le acorta la vida qué descanso puede encontrar en algo que le
hace tanto mal no me importa replicó el hombre es mi elección y nadie tiene derecho a juzgarme Yo soy libre de hacer lo que quiera con mi vida señor el sueño No le hace libre sino esclavo le dijo el monje le hace dependiente de una sustancia que no le aporta nada bueno y que le impide aprovechar el momento presente le hace creer que necesita algo externo para ser feliz cuando la felicidad está dentro de usted no me vengas con esas tonterías dijo el hombre Yo no creo en esas cosas yo solo creo en lo que
veo en lo que siento en lo que me gusta y me gusta dormir así que déjame en paz y vete a molestar a otro el hombre se dio media vuelta y se tapó con una manta sin escuchar más el monje lo siguió con la mirada y suspiró luego se alejó del hombre y salió de la Cueva esperando que el hombre reflexionar sobre sus palabras y que algún día cambiara su actitud el monje sabía que el hombre era un ser humano como él y que tenía el potencial de despertar a la verdad Pero también sabía que
el hombre estaba Atrapado en la ilusión y que solo él podía liberarse el monje no podía hacer nada más que ofrecerle su consejo su ejemplo y su compasión el resto dependía del hombre el monje zen siguió su viaje por el mundo sin perder la ilusión de encontrar a alguien que Quisiera escuchar su enseñanza aunque se encontraba con muchas pruebas y tentaciones el monje no se desviaba ni se corrompía pensaba que todo era parte del karma y que cada acción le servía para purificar y elevar su alma el monje llegó a un país donde reinaba la
sabiduría y la armonía el monje vio que la gente vivía en templos que vestía ropas blancas y sencillas que trabajaba mucho en la ciencia o en la filosofía que tenía lo necesario para para vivir el monje sintió una gran reverencia por la gente y decidió quedarse un tiempo en el país para ver si podía aprender algo de ellos el monje se acercó a un templo donde vivía un sabio con sus discípulos y sus libros el monje le pidió permiso para entrar y le ofreció su respeto a cambio de su hospitalidad el sabio aceptó con cordialidad
y le dijo que podía alojarse en una de las celdas y que podía de lo que había el monje le agradeció su hospitalidad y se dispuso a convivir con él el monje pasó varios días en el templo compartiendo su vida culta y refinada el monje le hablaba de su filosofía de su forma de ver el mundo de su búsqueda de la felicidad el sabio lo escuchaba con atención y respeto y a veces le hacía preguntas o críticas el monje se sentía honrado de haber encontrado a una persona que mostraba interés por su mensaje y que
le trataba con cordialidad un día el monje quiso conocer el país y salió a dar un paseo el monje vio que el país era muy avanzado y que había muchas obras y descubrimientos el monje se detuvo frente a un laboratorio donde vio a un hombre que meditaba en silencio sin distracción el monje se sintió curioso por saber qué hacía ese hombre Y por qué se entregaba a ese vicio el monje entró en el laboratorio y se acercó al hombre allí vio que el hombre era el sabio y que estaba solo y concentrado el monje vio
que el sabio tenía el cuerpo sano el rostro sereno el aliento suave la voz Clara el gesto noble el monje vio que el sabio meditaba sin medida que no se movía que no hablaba que no pensaba que no sentía el monje sintió una gran compasión por el sabio y decidió irlo Disculpe maestro le dijo el monje con una reverencia puedo hacerle una pregunta el sabio se sorprendió al ver al monje y lo miró Con benevolencia qué quieres le preguntó con serenidad Solo quiero saber por qué medita tanto le respondió el monje con humildad El sabio
sonrió y le ofreció un cojín por qué medito tanto repitió con tranquilidad Pues por qué puedo porque me divierte porque me ayuda a liberarme a liberarse de qué insistió el monje a liberarme de todo contestó el sabio con sabiduría a liberarme de la ignorancia del sufrimiento del deseo del odio de la ilusión de la muerte a liberarme de esta vida acondicionada maestro la meditación es un antídoto que purifica su cuerpo y su mente le dijo el monje le ayuda a ver la verdad a comprender la realidad a cultivar la virtud a desarrollar la compasión a
iluminar la conciencia a despertar el espíritu a prolongar la vida ambos siguieron hablando sobre la meditación era algo que les apasionaba y les ayudaba mucho entonces el monje se despidió de él el monje rezó por el sabio y por todos los seres que sufrían por sus malos hábitos el monje deseó que todos encontraran la paz y la felicidad esta historia sen nos enseña que debemos de nosotros mismos y no dejar que las circunstancias externas nos afecten negativamente Sin embargo a veces somos nosotros mismos los que nos hacemos daño con algunos hábitos que pueden perjudicar nuestra
salud y nuestro bienestar quieres saber cuáles son en este video te voy a mostrar 10 hábitos que te deterioran la salud y te voy a dar algunos consejos para evitarlos o cambiarlos Presta atención Porque estos hábitos pueden estar afectando tu vida sin que te des cuenta no desayunar el desayuno es la comida más importante del día ya que te aporta la energía y los nutrientes que necesitas para empezar el día con vitalidad saltarse el desayuno puede provocar agotamiento pérdida de concentración y mayor riesgo de comer en exceso más tarde para evitar este hábito Procura levantarte
con tiempo suficiente para preparar y disfrutar de un desayuno equilibrado que incluya frutas cereales integrales lácteos y proteínas fumar el tabaco mata las células del sistema respiratorio y aumenta el riesgo de padecer enfermedades como cáncer de pulmón tos crónica y dificultad para respirar además el humo del tabaco afecta también a las personas que te rodean que se convierten en fumadores pasivos para dejar de de fumar lo mejor es buscar ayuda profesional que te Oriente sobre las opciones disponibles como parches chicles medicamentos o terapias también puedes apoyarte en tu familia y amigos y Buscar actividades que
te distraigan y te relajen dormir poco lo recomendado es dormir entre 6 y 8 horas diarias dependiendo de las necesidades de cada persona Si duermes menos puedes sufrir cansancio mal humor rendimiento y mayor apetito para dormir mejor es conveniente seguir una rutina de sueño que implique acostarse y levantarse a la misma hora todos los días evitar las siestas largas reducir el consumo de cafeína y alcohol y crear un ambiente cómodo Y tranquilo en el dormitorio abusar del alcohol El consumo excesivo de alcohol puede dañar el hígado el cerebro y el corazón además de favorecer el
desarrollo de de algunos tipos de cáncer también puede afectar a tu estado de ánimo Tu memoria tu autocontrol y tu capacidad de tomar decisiones para reducir el consumo de alcohol puedes Establecer un límite de bebidas por día o por semana elegir bebidas con menos graduación alternar el alcohol con agua o refrescos y evitar beber en situaciones de estrés o aburrimiento no realizar actividad física llevar una vida sedentaria puede afectar tu salud cardiovascular tu metabolismo y tu funcionamiento cerebral el ejercicio físico te ayuda a mantener un peso saludable a fortalecer tus músculos y huesos a prevenir
enfermedades crónicas y a mejorar tu ánimo y tu autoestima para incorporar la actividad física a tu rutina puedes elegir una actividad que te guste y te divierta como caminar bailar nadar o practicar algún deporte lo ideal es hacer al menos 30 minutos de ejercicio moderado al día o 150 minutos a la semana comer a des horas picar entre horas alimentos poco saludables como patatas fritas caramelos o chocolate puede elevar el nivel de azúcar en la sangre y favorecer la obesidad y la diabetes estos alimentos suelen tener muchas calorías grasas azúcares y sal y pocos nutrientes
para evitar este hábito es mejor hacer cinco comidas al día que incluyan un desayuno una comida y una cena completas y dos tentempiés ligeros como fruta yogur o frutos secos También es importante beber agua para hidratarse y saciarse y evitar las bebidas azucaradas o alcohólicas estar estresado el estrés crónico puede causar problemas físicos como contracturas caída del cabello o úlceras y problemas emocionales como depresión y ansiedad el estrés se produce cuando percibimos que las demandas del entorno superan nuestros recursos para afrontarlas para manejar el estrés es necesario identificar las fuentes que lo generan y Buscar
soluciones o alternativas para resolverlas O minimizarlas también es útil practicar técnicas de relajación como la respiración profunda la meditación o el yoga y dedicar tiempo a actividades placenteras como leer Escuchar música o estar con amigos no protegerse del sol la exposición excesiva al sol sin protección adecuada puede provocar quemaduras insolación dolores de cabeza problemas de vista y cáncer de piel los rayos ultravioleta del sol pueden dañar el ADN de las células de la piel y provocar su envejecimiento prematuro o su transformación maligna para protegerse del sol es recomendable usar un protector solar con un factor
de protección adecuado a tu tipo de piel y renovarlo cada dos horas o después de bañarte también es aconsejable evitar el Sol en las horas centrales del día usar ropa ligera y de colores claros y cubrirse la cabeza con un sombrero o una gorra comprar alimentos Bajos en grasa estos alimentos pueden tener un efecto engañoso ya que suelen contener más azúcar harina procesada y sodio que los alimentos normales estos ingredientes pueden aumentar el riesgo de obesidad diabetes hipertensión y enfermedades cardiovasculares es mejor leer las etiquetas y los ingredientes antes de comprar estos alimentos y optar
por alimentos naturales o integrales que tienen más fibra vitaminas y minerales También es importante moderar el consumo de grasas y elegirlas de origen vegetal como el aceite de oliva El Aguacate o los frutos secos usar botellas de agua de plástico algunas botellas de plástico contienen bisfenol a o bpa una sustancia que se ha relacionado con la obesidad y la disminución de la fertilidad el bpa puede pasar al agua cuando la botella se calienta se expone al sol o se reutiliza varias veces para evitar este riesgo es mejor usar botellas reutilizables de vidrio o metal que
son más ecológicas y seguras También es importante lavar las botellas con frecuencia y no llenarlas con agua caliente o con bebidas carbonatadas hasta aquí el video de hoy Espero que te haya gustado y que te haya servido para aprender algo nuevo Recuerda que tu salud es lo más importante y que depende de ti cuidarla y mejorarla no dejes que los malos hábitos te impidan vivir una vida plena y feliz si te ha gustado este V te invito a que le des un like que lo compartas con tus amigos y que te suscribas a mi canal
sabiduría monje donde encontrarás más vos sobre temas de interés historias zen y consejos prácticos Muchas gracias por tu atención y nos vemos en el próximo ví namasté